Reflexión sobre la nueva ley de medios en Argentina

Primera reflexión sobre la página web de la ley de medios

Laa Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual fue creada para derrocar al grupo Clarín, que se encuentra divorciado del poder y viceversa, y de paso controlar los contenidos de los medios para coartar su libertad de prensa y expresión e imponer un discurso pro-gubernamental para todos, de lo contrario, la nueva ley de medios nunca hubiera existido, sino que se hubiera continuado enmendando la vieja ley de medios de la década del setenta.

Analizando los cinco puntos clave llego a una conclusión:

• Habrá más presencia gubernamental en el espacio radioeléctrico, más control de contenidos, paulatinamente les irán revocando las licencias a aquellos medios contrarios al gobierno que se nieguen a difundir el mensaje oficialista para todos .

• El nuevo ente de control: el AFSCA no será neutral, como lo era el COMFER, sino que será un ente gubernamental, con todo lo que ello implica: no habrá libertad de expresión o prensa, se controlarán todos los discursos anti-oficialistas y habrá sanciones para los que hablen o escriban en contra del gobierno, los cuales con el tiempo serán cada vez menos hasta llegar a tener solo medios de comunicación audiovisuales oficialistas .

• Por la concentración de medios, los mejores negocios de los medios audiovisuales los harán los medios oficialistas y aquellos que se conviertan con el tiempo, los demás se repartirán las migajas, porque cuando quieran volcarse a formar otras empresas para poder continuar su difusión, serán cercenadas las licencias.

• Los nuevos jugadores que entren en acción serán las telefónicas y las empresas de cable fuera del grupo Clarín, las cuales harán suculentas alianzas con el gobierno y se repartirán toda la torta de ganancias El “triple play” del cable, teléfono e internet serán puramente oficialistas.

• Habrá mayoría de contenido nacional en los medios, incluida la música y la cultura, se volverá a escuchar música nacional en todas las radios, como ocurrió en el año 1982 en plena guerra de Malvinas. No podré escuchar la música que yo quiera ni participar de la cultura que me guste más, porque solo habrá “una para todos”. Tendremos el desembarco de medios latinoamericanos alineados con el gobierno, tendremos que ver los discursos de Chávez. No se salvaran ni los programas infantiles, me imagino haciendo zapping y teniendo que ver “El Chávez del ocho”.

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