Reforma Agraria Y Concentración De La Tierra En Colombia

INTRODUCCIÓN

Desde el período de la colonia ha sido evidente la apropiación de tierras, ingresos, poder político y social en manos de unos pocos, y aunque ya han pasado muchos años desde la colonia hasta nuestro siglo, al parecer las cosas no han variado mucho.

A pesar de que en la actualidad la Constitución Política promulgue muchos derechos como la igualdad y el derecho a una vida digna, parece ser que éstos sólo han quedado consignados en papel, aún en nuestros tiempos se habla de una mala distribución del factor productivo tierra, y de la tenencia de éstas en manos de los sectores más poderosos de las sociedad.

Aunque el problema resulta para muchos sin importancia e insignificante, la concentración de la tierra en manos de unos pocos esconde grandes trasfondos que necesitan ser analizados detalladamente ya que de cierta manera terminan explicando la tan mencionada inequidad social y económica de nuestro siglo y todos los anteriores, además de las continuas disputas que se han dado alrededor e éstas, y ni hablar de los muchos intentos políticos para logar una distribución equitativa de la tierra.

El proceso de concentración de la tierra en manos de los más grandes productores se ha acelerado en Colombia en los últimos años, a la vez que se ha reducido en forma dramática el área sembrada. La ampliación de área de grandes propiedades dedicadas a la ganadería extensiva es una verdadera relatifundización del país, este fenómeno se acrecentó con la presencia del narcotráfico ya que la compra de tierras se consolida como un negocio en sí mismo y el precio pagado por las fincas no está determinado por su productividad agropecuaria, sino por las posibilidades de valorización del predio.

Hoy nos encontramos ante unas cifras impresionantes de pobreza, según la CEPAL el 56.3% de los colombianos, unos 22.6 millones de personas se encuentran bajo línea de pobreza, es decir que reciben menos de $110.000 al mes. En las zonas urbanas se encuentran bajo esta línea un 47.2% y en las rurales el 79.6%. Lo anterior se agudiza si comparamos como está nuestro país en empleo: siete y medio millones de campesinos y cuatro millones de trabajadores urbanos, se encuentran sin empleo. De los catorce y medio millones de la población económicamente activa, ubicamos tres millones en la miseria absoluta.

Para nadie es un secreto que los factores tradicionales de la producción son fuentes de creación de valor y de riqueza, y además son determinantes del ingreso y la distribución política y social, por esta razón se puede firmar que la distribución de la tierra en manos de unos pocos genere inequidad social y económica.

Al parecer esto lo tenían muy claro los ex presidentes López Pumarejo, Llera Restrepo y Pastrana entre otros muchos más y sin desmeritar la labor realizada por los presidentes posteriores a los mencionados anteriormente, pues fue evidente que durante su período presidencial hicieron grandes esfuerzos para lograr una mejor distribución de la tierra a través de reformas agrarias.

Cabe aclarar que las reformas agrarias no fueron el único mecanismo utilizado en Colombia para la distribución equitativa de la tierra, sin embargo este mecanismos ha sido uno de los más utilizados.

Programas como la titulación (que buscaba aclarar derechos de propiedad) y las zonas de reserva campesina se han llevado a cabos para lograr una mejor distribución del factor productivo tierra.

El desplazamiento es un fenómeno que tiene mucho q ver con el problema agrario no resuelto, igualmente relacionado con el narcotráfico y el conflicto armado de las últimas décadas. La lógica se ha encargado de poner a la tierra y a la población en función de los procesos de transformación y desarrollo de la agricultura y la economía.

A lo largo de este trabajo se describirán y analizarán las reformas agrarias implantadas en Colombia desde el gobierno de López Pumarejo en 1936 hasta la actualidad, pues es de vital importancia conocer las causas y las soluciones propuestas para acabar con la inequidad en la distribución de la tierra. Teniendo en cuenta principalmente los objetivos buscados por ellas, y el alcance y consecuencia de cada una. Finalmente se presentarán las conclusiones donde se analizará si han dado resultado las reformas agrarias.

1. ANTECEDENTES REFORMAS AGRARIAS

1.1. LEY 200 DE 1936: LEY DE TIERRAS

Entre 1934-1936, el país vivió gran cantidad de luchas de masas que permitió la apertura de puertas, pero el movimiento campesino no había constituido una organización social capaz de defender sus intereses. En cambio los grandes propietarios ya contaban con fuertes organizaciones nacionales.

Terminada la República Conservadora, los liberales empezaron a preocuparse por el aumento de la población, el problema del campo y las condiciones de vida del campesinado; debido a que para mediados de los años 20 y comienzos de los 30, la situación de los campesinos era de consideración, ya que existía el peonaje por deuda, la ausencia del salario monetario, la aparcería , el concertaje y las pocas inversiones de capital en la tierra.

Alfonso López Pumarejo en su primera administración (1934-1938), pretendía hacer una serie de cambios económicos y sociales que encaminarían al país a una serie de reformas que evitaran el descontento de la población y evitar a su vez, la filtración de ideas socialistas su gobierno.

Para lograr los objetivos de su Revolución en Marcha, el gobierno de López propuso una serie de cambios a favor de las clases sociales más bajas: en cuanto a educación, López estableció la educación primaria de forma gratuita y obligatoria para todos los ciudadanos, además concedió libertad de enseñanza y limitó la intervención de la iglesia en esta actividad. En cuanto a pago de impuestos, se aumentó la responsabilidad fiscal a aquellas personas que poseían altos capitales y rentas, estableciendo un sistema de impuestos diferencial, según el cual, la gente aportaba al Estado, de acuerdo a su capacidad económica.

Además de lo anterior, Alfonso López Pumarejo, llevó a cabo la primera reforma agraria en Colombia: Ley 200 de 1936 o Ley de Tierras, cuyo objetivo principal era impulsar la transformación capitalista de la tierra mediante la obligación a explotarla.

Esta ley tenía como finalidad otorgar tierras a aquellos que la cultivaban y no les pertenecía, llevar a cabo el principio de función social de la tierra, prohibió que los campesinos fueran desalojados de los territorios ajenos que invadían, dio facultades al Estados para expropiar tierras según fuera el caso, y decretó la extinción de dominio a los 10 años.

El aspecto más polémico de reforma fue el artículo 12: en el que se estableció

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