TENDENCIAS SOCIO-POLITICAS

INTRODUCCION

TENDENCIAS SOCIO-POLITICAS

El propósito  es presentar un breve análisis de la situación sociopolítica actual de algunos países internacionales  e indicar algunas de las tendencias más probables en el curso de la década actual. Tienen tradiciones y características socioculturales diferentes que conoceremos.

América Latina ha sido siempre una combinación de algunas características básicas comunes, debido a su pasado ibérico común y a una similitud de condiciones durante el periodo colonial y la primera mitad del siglo xix, con excepción de la diferenciación española-portuguesa y de la presencia de rasgos característicos en cada uno de los países de la región.

Esto ha cambiado en forma significativa durante los últimos veinte años, ya que los rasgos característicos de los países individuales han variado en forma creciente, en tanto que la polaridad española-portuguesa de la época colonial ha desaparecido como frontera política y se ha convertido en una frontera, aunque relevante, de los elementos culturales de los rasgos característicos de los países en cuestión.

La creciente diferenciación entre los países latinoamericanos avanza en tres ámbitos principales: el del desarrollo relativo, el de viabilidad nacional y el de integración social. La diferenciación económica entre los países de  América Latina traspasó un umbral decisivo con el proceso de industrialización mediante la sustitución de importaciones, que comenzó en los años treinta en forma espontánea y ha proseguido en forma deliberada desde la segunda Guerra Mundial.

Después de los años sesenta la industrialización latinoamericana se ha articulado estrechamente con las nuevas formas y condiciones de desarrollo de la economía mundial y su internacionalización bajo el control de unos centenares de empresas transnacionales.

ANALOGIA

DEMOCRACIA

La democracia es al mismo tiempo un estado de ánimo y un estado de hecho. Una democracia estable no es posible si al regularla la cultura política predominante de una sociedad no está fundamentada en la convicción de que la base de la legitimidad política es un gobierno democrático. Sin embargo, la legitimidad democrática es un requisito necesario pero no suficiente para la existencia y la conservación de un régimen democrático.

Los ejemplos en los países occidentales más desarrollados corroboran inmediatamente el anterior análisis teórico. Mientras mayor sea el grado de integración social en una sociedad, como por ejemplo en Suecia, y mientras más democrático sea el régimen político, menos alteración causa la rotación de partidos y de dirigentes. Cuando, como en los casos de Francia e Italia, la integración social, aunque bastante amplia, es relativamente menor, el grado global de democracia es menor y existe especial preocupación por conservar las coaliciones políticas principales.

En el caso de América Latina la primera observación a hacerse es que la cultura política de la región está fuertemente imbuida de un sentido democrático de legitimidad política. Este hecho es una expresión típica de la afiliación occidental de la cultura latinoamericana. No excluye, sin embargo, la existencia en diversos grados de importancia de valores antidemocráticos.

Los países de Centroamérica y el Caribe, que forman parte del área de hegemonía manifiesta de los Estados Unidos, no gozan de suficiente soberanía efectiva y de autonomía interna para llenar los requisitos del ejercicio independiente de la democracia. Pueden tener regímenes democráticos pero solamente en el grado en que, aparte de consenso interno sus políticas sean realmente compatibles con los intereses norteamericanos dominantes.

SITUACION ACTUAL

La situación política en el grupo de países que incluye a México y  América del Sur presenta una gran variedad de regímenes. Esta variedad abarca desde algunos gobiernos formalmente declarados no democráticos  como el caso actual de la Argentina hasta dictaduras apenas disfrazadas  Pinochet, supuestamente confirmado por plebiscito, o Stroessner, supuestamente elegido, incluyendo algunas semidemocráticas, como  Brasil: cuasi democracias, como Colombia, y verdaderas democracias, como Venezuela. El motivo principal por el cual pocos países en ese grupo reconocen abiertamente su condición no democrática es la cultura política latinoamericana que, como se dijo anteriormente, está impregnada de la convicción de que el gobierno democrático es la única base de la legitimidad.

La integración social,  depende de tres variables principales:

1) Integración socioeconómica

 2) Unidad cultural

 3) Acuerdo general con el régimen político.

 En el caso de los países latinoamericanos, ninguno logra alcanzar un nivel alto para estas tres variables. En el mejor de los casos, el de Costa Rica  una sociedad de colonos que tiene un alto nivel de unidad cultural y de acuerdo sobre el régimen político, la integración socioeconómica es sólo moderada. En la mayoría de los casos las tres variables son bajas.

TENDENCIAS POLITICAS Y ECONOMICAS INTERNACIONALES

Las tendencias políticas en  América Latina, durante un futuro relativamente previsible, como por ejemplo el resto de esta década, estarán condicionadas en diversas proporciones por la evolución de los factores internos implicados en cada país en la formación de la integración social y por la evolución de la situación internacional. El ambiente internacional ejerce una fuerte influencia sobre todos los países latinoamericanos. Aun los cuatro países grandes, que gozan de un grado considerable de autonomía regional, son profundamente afectados por las condiciones internacionales. Entre ellas tienen especial importancia las condiciones de la economía internacional, la evolución de los precios y del régimen de distribución del petróleo, la forma en la cual se reciclan los petrodólares y el comportamiento de los países del Tercer Mundo frente a la posible expansión de la cooperación Sur-Sur. En términos políticos, la evolución de las confrontaciones Este-Oeste y del comportamiento internacional de los Estados Unidos en este contexto es también de enorme importancia. En el caso de los países de Centroamérica y del Caribe las condiciones internacionales más que relevantes son determinantes, especialmente en cuanto al comportamiento internacional de los Estados Unidos. 

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