TIPOS POLITICOS EN MELANESIA Y POLINESIA. SAHLINS

TIPOS POLÍTICOS EN MELANESIA Y POLINESIA. MARSHALL SAHLINS.

La población indígena de las islas del pacífico, sin saberlo, otorga a los antropólogos un legado científico: un conjunto de experimentos en la evolución y en la adaptación de la cultura.

Tanto Melanesia como Polinesia tienen la característica de formar parte de áreas agrícolas que han utilizado técnicas muy parecidas a través del tiempo, pero muestran destacadas diferencias en aspectos religiosos, económicos, políticos y de parentesco. Las sociedades polinesias han presentado formas jerárquicas complejas y de autoridad, en cambio las sociedades melanesias no han superado el subdesarrollo. El sistema melanesio es fundamentalmente segmentario, mientras que el sistema polinesio es piramidal.

El sistema político polinesio funciona como una pirámide de grupos, en cuya cúspide está la familia, por debajo de un máximo jefe. La jerarquía de los linajes está establecida por la distancia genealógica al antepasado común. Sin embargo Melanesia tiene adelantos en la estructura política ya que presenta un heterogéneo conjunto de sistemas sociopolíticos. El organismo étnico-cultural característico en la población de Melanesia lo forman grupos independientes de parentesco residencial con el mismo modo de organización, idéntico status político y cada tribu y grupo de aldeas se autoadministran económicamente.

Un progreso político polinesio es la actuación histórica. Casi todos los pueblos indígenas del Pacífico Sur mostraron resistencia a la gran privación de libertad cultural europea durante los S. XVIII y XIX, y algunos desarrollaron Estados controlados por los nativos con leyes públicas, gobiernos, monarcas e impuestos, ministros, mostrando así el nivel y la capacidad indígena para poder conseguir éxitos políticos.

Dentro de las diferencias entre Polinesia y Melanesia se destaca la importancia del liderazgo. El gran-hombre se observa en los lugares subdesarrollados de Melanesia, y otro tipo de jefe está vinculado con el avance polinesio. Son dos clases de jefes sociológicos diferentes, por las discrepantes circunstancias sociales en las que actúan, pero principalmente por la distinta personalidad.

El gran hombre melanesio es totalmente un burgués, utiliza la astucia y el cálculo para sus intereses económicos. Su acción pública es competitiva y demuestra una posición sobre las masas que es el resultado de su propia actuación personal. Su mirada se fija en sus propios fines.

El jefe polinesio es más feudal que capitalista, su apariencia es casi regia. En las acciones públicas se observa la elegancia y distinción de su educación, y muestra un indiscutible derecho de mando. Con su posición, que es más debida al don social que a su propio esfuerzo, puede concederse el lujo de ser un jefe y de hecho lo es.

La organización política basada en el gran-hombre es usualmente inestable

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