Teoría política y del estado

Teoría política y del estado

Marco Antonio Padilla Rodríguez

3 de diciembre de 2018

Ensayo sobre un socialismo justificado por ser profesionales y no solo éticos.

En  este ensayo hablaremos como justificar un socialismo a través de diferentes puntos de vista abordados durante el periodo de otoño 2016 de la clase teoría política y del estado, apoyándonos en un texto de adela cortina titulado “¿Para qué sirve realmente la ética?”.

        Adela Cortina nos menciona que: “Ninguna sociedad puede funcionar si sus miembros no mantienen una actitud ética. Ningún país puede salir de las crisis si las conductas inmorales de sus ciudadanos y políticos siguen proliferando con toda impunidad. Este libro nos recuerda que ahora más que nunca, necesitamos la ética.”

        Por un lado hay que entender primero que es el socialismo, Friedrich Engels nos menciona en su obra del socialismo utópico al socialismo científico, que “El socialismo es un sistema social y económico caracterizado por el control por parte de la sociedad, organizada con todos sus integrantes, tanto de los medios de producción como de las diferentes fuerzas de trabajo aplicadas en los mismos.”

Dirigiéndonos un poco mas hacia el término de socialismo utópico nos damos cuenta que nace por la crítica de la nueva sociedad capitalista, resultado de la revolución industrial, entendiendo a la propiedad privada no como derecho natural, sino como un fenómeno histórico. Philippe Bouchez nos menciona que necesitamos es alcanzar la igualdad que vaya más allá de la mera igualdad legal, lo que lleva a rechazar la exaltación de la libertad abstracta que propugnaba el liberalismo, que “solo enseña al hombre a ser egoísta, a convertirse en su propio dios, su propia fe, su propia gloria, su propia razón y su propia fuerza.” De cierta manera esto ultimo durante los últimos años no es mal visto dado que nos encontramos con varias situaciones en las cuales el estado se ha visto corrompido o busca satisfacer intereses personales en vez de intereses comunes.

        Sin embargo es aquí donde parte la importancia que concede la educación como medio para que arraiguen los valores que hagan posible la sociedad igualitaria y armónica, buscando una era de paz y libre convivencia entre los pueblos. Pero aquí la gran pregunta es como lograr eso? Es donde abarcaremos el tema ético,  Adela cortina nos muestra que la idea para que la sociedad conviva de una manera sana es por medio de la educación y ella lo menciona en su libro como ser profesionales, no solo éticos. Abordaremos los 5 puntos básicos que nos propone adela cortina.

El socialismo utópico seria abordable desde la educación porque educar con calidad supone formar ciudadanos justos, personas que sepan compartir los valores morales propios de una sociedad pluralista y democrática que permitirá construir una buena sociedad, y es ahí donde las universidades deben formar buenos profesionales, más allá de ser solo un medio de vida.  Por otro lado hay que comprometerse en la transformación social, cambiar la sociedad hacia algo mejor exige en realidad trabajar también desde la sociedad civil, exige convertir también a la sociedad en protagonista de su futuro

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        También debemos considerar que quien ingresa en una profesión se compromete a proporcionar ese bien a su sociedad. “ el profesional no se sirve a si mismo, sino a una tarea que le trasciende”. Adela cortina hace una mención muy importante con una corriente aristotélica en la cual habla sobre la técnica y la practica, donde la primera solo vale en relación con el fin que se busca con ellos, un ejemplo claro es la persona que hace zapatos, lo que importa son los zapatos y no la actividad de hacerlos. Quien domina las técnicas no tiene que discutir si el fin es bueno o es malo, sino buscar los medios para alcanzarlo. Por otro lado las practicas son actividades que valen por si mismas, valen por el fin por el que se realizan, un ejemplo claro es una persona que pasea, lo hace por el gusto de disfrutar el paseo, no porque sirva de algo llegar a un lado. Esto nos deja con la idea de que debemos educar a buenos ciudadanos y a buenos profesionales que saben utilizar las técnicas para ponerlos al servicio de buenos fines, que se hacen responsables de los medios y de las consecuencias de sus acciones con vistas a alcanzar los fines mejores.

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