Еl objetivo de hacer que "todos los pueblos del mundo alcancen en el año 2000 un nivel de salud que les permita llevar una vida social y económicamente productiva"
Enviado por hkjdfs • 18 de Enero de 2014 • Trabajo • 2.659 Palabras (11 Páginas) • 590 Visitas
"La salud para todos en el año 2000" en la actualidad es oficial de todos los Estados Miembros de la OMS. ¿Qué significa esa idea? ¿Cuáles son sus ramificaciones? He aquí la explicación del Director General de la OMS.
En los últimos años se han registrado globalmente ciertas mejoras en la situación sanitaria mundial. Así lo prueban las estadísticas. Sin embargo, un recién nacido en algunos países de África no tiene más que un 50% de posibilidades de sobrevivir en la adolescencia, cuatro quintas partes de la población mundial carece de acceso a toda forma de atención sanitaria permanente y tan sólo una de cada tres personas de los países en desarrollo dispone en medida razonable de agua inocua y de un saneamiento adecuado.
Nuestra última evaluación de la situación sanitaria mundial muestra que la reducción de las tasas de mortalidad ha empezado a seguir un ritmo más lento. En ciertos países, las tasas brutas de mortalidad se han estabilizado y en alguno de ellos han efectivamente aumentado. Las tasas de mortalidad infantil siguen siendo elevadas en todos los países en desarrollo y el ritmo de las mejoras ha comenzado a perder intensidad. La tasas de mortalidad en las zonas donde ya son relativamente bajas han empezado a disminuir con un ritmo más rápido que en las zonas donde son elevadas.
Es evidente que los servicios de salud no han conseguido llegar hasta quienes han estado privados de ellos. Más de cinco millones de niños mueren anualmente por enfermedades diarreicas. Ese número es igual al total de niños nacidos anualmente en los Estados Unidos, el Reino Unido, Francia, los Países Bajos y Suecia, países donde las enfermedades diarreicas apenas pasan de ser un problema menor. Más de la mitad del total de defunciones infantiles pueden relacionarse con el funesto complejo de la malnutrición, las enfermedades diarreicas y las enfermedades respiratorias. Todas esas defunciones podrían ser evitadas; es, precisamente, la falta de una acción eficaz contra esas enfermedades de la pobreza lo que impide seguir reduciendo las tasas de mortalidad. Cuando se ha desarrollado contra esas enfermedades una acción eficaz los resultados han sido espectaculares. Los datos obtenidos en América Latina mediante encuestas transversales de alcance nacional revelan que, a medida que la proporción de defunciones debidas a enfermedades infecciosas y parasitarias experimenta una reducción aproximada del 22% al 6% de la totalidad de defunciones, la expectativa de vida aumenta de 45 a 68 años, alcanzando así un nivel próximo al de los países desarrollados.
La amenaza de las grandes enfermedades, como el paludismo, la esquistosomiasis, la filariasis, la tripanosomiasis, la leishmaniasis, el cólera o la lepra, o no se ha reducido o ha efectivamente aumentado en el curso de los últimos años. Cerca de una cuarta parte de la población mundial sigue estando infectada por parásitos.
propósito hacer que “todos los pueblos del mundo alcancen en el año 2000 un nivel de salud que les permita llevar una vida social y económicamente productiva” (OMS/UNICEF, 1978), se manifestó la creciente preocupación de los gobiernos por hacer frente a las desigualdades en las condiciones sanitarias y el acceso a los servicios de salud entre los diferentes países y grupos de población. La Salud para todos promovió un mayor interés internacional en la salud pública, en especial en el desigual impacto de los factores económicos y sociales sobre la salud de las diferentes poblaciones.
Al año siguiente, en la Conferencia de Alma-Ata (Kazajstán) auspiciada por la OMS y UNICEF, quedó establecido que para llevar a cabo la política “Salud para todos en el año 2000” era necesario definir una estrategia específica, distinta a las utilizadas hasta entonces. Este marco conceptual, que tenía como pilares la equidad, la prevención, la participación comunitaria, la colaboración intersectorial y la aplicación de tecnologías adecuadas (ver el recuadro adjunto), se definió como “Atención Primaria de la Salud”. Aunque los principios de esta estrategia ya se estaban aplicando en los sistemas sanitarios de algunos países, en especial en los países socialistas del bloque soviético (Venediktov, 1998:82), en esta ocasión se recogieron las lecciones de las acciones médicas anteriores y se formuló una estrategia global para el futuro suficientemente ambiciosa para ser movilizadora y suficientemente consistente para servir de guía a la acción y a la movilización.
El concepto de la APS incorpora algunos principios fundamentales comunes al proceso de desarrollo socioeconómico en general, pero con énfasis en su aplicación en el campo de la salud. Según este enfoque, la salud está sujeta a la disponibilidad y a la distribución de los recursos, no sólo los sanitarios como la oferta de médicos, enfermeros, estructuras de salud, etc., sino también otros recursos socioeconómicos como la educación, la disponibilidad de agua potable, la existencia de saneamiento mínimo y la provisión de alimento. Por tanto, la APS propone una distribución más justa y equitativa de los recursos, teniendo especial consideración hacia aquellos que mayores necesidades tienen en materia de salud.
objetivos hacia la meta “Salud para todos en el año 2000” no ha sido uniforme. En la actualidad, la desigualdad en las condiciones sanitarias y en el acceso a los servicios de salud (incluyendo los de la APS) entre los países y los diferentes grupos de población dentro de los mismos son aún mayores que hace dos décadas. En 1999, aproximadamente la quinta parte de la población mundial carece de acceso a los servicios de atención sanitaria y un tercio de la misma no tiene acceso a los MEDICAMENTOS ESENCIALES (Hamand, 1999).
Durante las últimas dos décadas, muchos gobiernos de los países pobres han sido incapaces de mantener en funcionamiento unos sistemas sanitarios que brinden unos servicios de salud mínimos de calidad, lo cual ha obstaculizado la implementación de los principios de la APS y el avance de la salud para todos. Esta situación se ha debido a una falta de financiación para la salud y para otros servicios sociales, debida a la crisis de los años 80, a la incapacidad para obtener fondos locales e internacionales para ellos, así como también a las fuertes restricciones que los programas de ajuste estructural de la economía han impuesto a los presupuestos nacionales en esos sectores.
El rápido crecimiento de los servicios privados de atención sanitaria ha tenido un impacto diferente sobre el sector sanitario en función del grado de desarrollo socioeconómico del país. En los países en desarrollo ha contribuido en general al incremento de los costes, al aumento de las prácticas deficientes y a las desigualdades en el acceso a la prestaciones
...