El Diario De Ana Frank

RESEÑA SOBRE EL LIBRO “EL DIARIO”

El Diario escrito por Ana Frank en su primera edición publicado por Editorial Porrúa en el año de 1948 en México consta de 208 páginas. Se trata de las anécdotas de una joven judía que vivió durante 2 años en un refugio y escribió sus experiencias en un diario que le fue regalado el viernes 12 de julio de 1942 en plena Segunda Guerra Mundial, en la ciudad de Ámsterdam, Holanda.

Este diario fue regalado por su cumpleaños número 13, al cual nombra Kitty y lo considera su única amiga.

A pesar de contar con una familia y un hogar agradable ella se siente muy sola y comienza a refugiarse en Kitty escribiéndole su vida diaria.

Ana Frank fue hija de Otto Frank, y vivía tranquilamente con su madre y su hermana Margot. Comienza, como cualquier jovencita, a describir la historia de su familia. También escribe sobre sus diferentes pretendientes varones que tratan de cortejarla. Solo uno : Harry Goldman, había llamado su atención y obtenido su amistad.

Su trato con el fue siendo menos frecuente debido a que la abuela de este la consideraba demasiado joven para tener una amistad con Harry.

Cuenta algunas de sus anécdotas con sus profesores del Liceo Judío en el cual ella y su hermana habían sido recibidas. Ana no se sentía cómoda siendo una mala alumna.

Tras una citación de las S.S. para su hermana Margot, la familia asustada decide huir a un anexo en el patio de la oficina donde trabajaba el padre. Detalla minuciosamente el edificio donde habrán de esconderse durante largo tiempo. Además de ellos también vivírian en el mismo lugar 4 personas más; la señora y el señor Van Daan, su hijo Peter y el señor Dussel.

Debido a las precauciones tomadas por el señor Frank, quien desde hacia ya tiempo se había ocupado de trasladar al anexo algunos de los muebles y ropas de la familia, las ocho personas ahí contaban con lo necesario para sobrevivir un tiempo.

Ana se sentía deprimida de saber que no podía salir de ese escondite y si lo hiciera tenía miedo de ser descubierta. Solo pensaba en lo que haría después de la guerra.

El hijo de la familia Van Daan : Peter de 16 años no era del agrado de Ana ya que al principio lo consideraba fastidioso y tímido. Con el paso de los meses esta opinión fue cambiando. En varias ocasiones Peter tomaba sin permiso un libro que solo se les permitía leer a las personas mayores y por esto fue castigado severamente.

La señora Van Daan discutía frecuentemente con los padres de Ana, quienes defendieron en varias ocasiones a la joven de los malos comentarios de su incomoda vecina.

Los señores Koophuis, Kraler, Henk, Miep y Elli eran compañeros de trabajo del padre, los cuales llevaban provisiones a la familia y fueron un gran apoyo moral durante su estancia en el anexo. El primero proveía de libros a Ana cada quince días; se nota en ella un gran entusiasmo por la lectura y por retomar sus estudios. A nadie le dejaba leer su diario solo en una ocasión se lo permitió a su hermana.

Relata en varias ocasiones sus disputas con la señora Van Daan (Kerli como la llamaba cariñosamente su esposo) además, le parecía muy extraño que los adultos peleasen. Se le nota enojada cuando se niega a soportar las humillaciones de los otros, al querer ocuparse de su vida, comentando sus múltiples defectos.

Relató una conversación entre los Van Daan y sus padres, donde el tema era la modestia. Al fin, la señora terminó irritada al defender en repetidas ocasiones, que ella era muy modesta.

Conforme pasan los meses, Ana va narrando como el carácter de su madre le es molesto en varias ocasiones y por ello chocan fatalmente. Se considera muy distinta a ella y cree que Dios la esta poniendo a prueba.

Considera que nadie del refugio le tiene paciencia, un día se siente tratada como inteligente y al otro como ignorante, por ello se refugia en Kitty a la cual nunca le falta paciencia y le promete a su diario que a pesar de todo se mantendrá firme para recorrer su camino.

En diversas ocasiones relata ruidos nocturnos extraños; como aviones, bombas y balas sobre la ciudad.

Reflexiona sobre su modo de vivir el cual considera el paraíso en comparación con la vida de los otros judíos. Después de pasados algunos meses escondidos describe su modo de vivir con cosas “requeteusadas”.

Una de sus principales discusiones con el señor Dussel , con quien compartía su cuarto, fue por el hecho de pedirle prestada su mesita de noche para estudiar, a lo cual él discutió varias horas con ella y con su padre, quedando al final aceptado, aunque enfadado, que Ana la usara dos tardes a la semana.

Detalla cosas sobre su vida en el anexo a lo largo del día ; una tarea de todos era la de pelar las papas viejas que comerían en la cena. Durante la mañana y hasta las 5:30 de la tarde debían obligadamente guardar silencio ya que los trabajadores de la fábrica podrían darse cuenta de su presencia.

En un momento opta por no discutir con nadie y prefiere quedarse callada y hablar consigo misma para no ser juzgada. Durante sus cumpleaños se regalan obsequios; y durante las fiestas de Navidad sus tradiciones perduran aún.

En algunas pocas ocasiones, Ana comenta que los amigos de su padre se enferman frecuentemente de gripe o hemorragias, incluso ella también padece una gripe fastidiosa la cual es tratada por su madre con múltiples remedios caseros.

Analiza el odio y la cólera que sintió hacia su madre en muchas ocasiones; le causa conflictos morales y se siente egoísta por solo escribir de sus sentimientos en Kitty, pero a pesar de ello no refleja ningún sentimiento de amor hacia su madre.

A pesar de todo lo que esta ocurriendo fuera del refugio Ana comienza a descubrir

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