JHONSON SIMPSONS

Simpson fue un exitoso atleta negro que fue acusado de asesinar a su esposa Nicole, la cual era blanca. Hay mucha evidencia en su contra: ADN, historial de violencia doméstica, ropa, etc. También Simpson escapó (una notoria redada televisiva), lo que intensificó aún más su sentimiento de culpa. Ante una situación tan difícil, los abogados de Simpson optaron por introducir factores raciales en su defensa. Según su abogado, Simpson fue víctima de una conspiración policial racista que lo acusó de asesinato. Hace unos años, estallaron disturbios en Los Ángeles, la ciudad donde ocurrieron estos incidentes, porque policías blancos agredieron a Rodney King, un hombre negro, y un jurado (en su mayoría blancos) los absolvió. En este lamentable trasfondo, los abogados de Simpson se aseguraron astutamente de que el jurado del caso Simpson fuera mayoritariamente negro. La mesa está destinada a presentar sus teorías conspirativas sobre la conspiración policial.

Al comienzo del juicio, los factores raciales no eran comunes. Pero resulta que el detective principal en el caso, Mark Fuhrman es un racista. Hace unos años, Fuhrman hizo algunas cintas de audio con afijos étnicos. Con base en esto, el jurado se convenció de que la conspiración era real y finalmente absolvió a Simpson. Cuando Simpson fue absuelto, los negros estadounidenses estallaron de alegría. De hecho, la cinta de Fuhrman es solo una situación ficticia y los detectives la han grabado como posible material cinematográfico. En otras palabras: Furhman solo está dibujando bocetos, pero su actuación es vista como una verdadera prueba de lo que él llama racismo.

De hecho, hubo algunas cosas extrañas en ese juicio. Por ejemplo, se le pidió a Simpson que usara los guantes que usaba el asesino, pero eran demasiado pequeños para él. Desde entonces, la defensa persuadió al jurado de que Simpson no podía ser un asesino (de hecho, es perfectamente normal que los guantes de cuero se encojan jsjs). El jurado decidió ignorar la evidencia masiva de que Simpson fue el asesino.

Algo en tener en cuenta es que la actitud de la mayoría de los negros en este juicio no tiene nada que ver con un asesinato. El veredicto fue en realidad sobre la dignidad de los negros. Simpson se convirtió en un héroe porque su figura protestará por siglos de racismo y, más concretamente, contra el caso Rodney King de hace unos años. El caso me impactó porque descubrí la enorme corrupción en el liderazgo negro de América del Norte. Los abogados de Simpson (especialmente Johnny Cochran, que es un hombre bastante rico) utilizaron el chantaje racial para liberar a un asesino, y lo lograron.

Los líderes negros usan a los asesinos como héroes y envían un mensaje claro a sus seguidores: mientras uses el chantaje racial como arma defensiva, puedes violar las reglas.

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