ClubEnsayos.com - Ensayos de Calidad, Tareas y Monografias
Buscar

Segundo Rosero


Enviado por   •  14 de Julio de 2014  •  542 Palabras (3 Páginas)  •  340 Visitas

Página 1 de 3

Segundo Rosero nació en el pequeño pueblo de Pimampiro, en Ecuador, un país de cóndores y delfines. Es el resumen de sus mayores: músicos populares que cantaban en el tiempo en que los medios de comunicación no imponían los gustos. Escuchó los pasillos de los ecuatorianos Julio Jaramillo y Olimpo Cárdenas, que tuvieron que irse de un país que expulsa a sus hijos. Amó el pasillo, esa música que no es triste sino que tiene melancolía: habla de pañuelos en despedida y amores trágicos. Entendió que el bolero iba a durar más de los 100 años que tiene y bajó al Valle del Chota, donde los músicos negros hacen himnos populares de celebración de la Vida. Por eso impulsó la grabación de esos cantos que se pierden porque los Estados creen que la Cultura está en las momias de los museos: cada ocasión que muere un cantor de tradición oral es como si se extinguiera una biblioteca.

Desde niño fue invitado a esos rituales en la provincia de Imbabura, que tiene más de treinta lagunas y culturas musicales prodigiosas: violines de los indios en las fiestas de San Juan, tambores de reminiscencias africanas en Carpuela o las guitarras de los músicos mestizos en Ibarra. Esta es la tierra más generosa en músicos y por eso no fue casual que sus maestros nacieran en Cotacachi, donde en cada casa hay una guitarra.

Es de Ecuador, rico en culturas musicales, sistemas de pensamiento musical y géneros musicales, que -como dicen los entendidos- "se encuentra desde la más complicada polirritmia en la música de los habitantes negros de la provincia de Esmeraldas o la interesante fusión de música negroide e indígena presente en los grupos negros del Valle del Chota, hasta la más melancólica pentafonía del indígena de la Sierra o la elemental trifonía utilizada por los nativos de la Amazonía". Y, claro, esas fusiones de la cultura Mestiza que es cómo se perfila este milenio.

Carlos Rubira Infante junto a Segundo Rosero

Segundo Rosero viajó con los saberes de su tierra hasta la Costa: un deslumbrante mundo que le enseñó que era posible fundir las melodías hasta encontrar un puente donde estuvieran todos. Julio Jaramillo había encontrado ese puente entre la vieja tradición musical ecuatoriana -llena de poesía deslumbrante y melodías académicas- y los cantares que requería un país en permanente construcción.

Rosero, como muchos, tomó la posta y el día que moría Mr. Juramento el entonces joven Rosero -sin saberlo- grababa a pocas cuadras su primer disco, justamente con Rosalino Quintero, el eterno acompañante de JJ. Y no fue azar porque bien se sabe que en la intrincada historia de los pueblos siempre hay sucesores y esa designación sólo entregan los pueblos. Eso a Rosero no le quita el sueño porque entiende que la fama es engañosa y que trascender es lo difícil.

Rosero es

...

Descargar como (para miembros actualizados) txt (3 Kb)
Leer 2 páginas más »
Disponible sólo en Clubensayos.com