Simon Rodriguez
Enviado por monicanavarro93 • 31 de Mayo de 2014 • 2.956 Palabras (12 Páginas) • 230 Visitas
SIMON RODRIGUEZ
NACIMIENTO
Al parecer Simón Rodríguez fue un niño expósito, es decir, abandonado por su madre al nacer a la caridad pública. Esto se sabe porque en junio de 1793, cuando se casó con María de los Santos Ronco se identificó como “expósito de esta feligresía” y además, en su acta de bautizo del 14 de noviembre de 1769 el cura lo describe como” Simón Narciso Jesús, párvulo expósito…”
Sin embargo, no está totalmente demostrado que dicha acta de bautismo no se refiera a algún homónimo de Rodríguez, aunque se sabe que su nombre era Simón Narciso porque así firmó su renuncia al cargo de maestro años más tarde, y por qué los expósitos usualmente eran nombrados según el santoral. Así, al maestro de Bolívar se le habría bautizado como Simón Narciso, porque el 28 de octubre es el día de San Simón y el 29 el día de San Narciso.
A pesar de esto, testimonios de la época recogidos por el biógrafo Miguel Luis Amunátegui y basados seguramente en el de Andrés Bello, quien fue vecino de Rodríguez en Caracas, argumentan lo contrario diciendo que “tuvo por padre a un clérigo nombrado Carreño, cuyo apellido llevó don Simón por algún tiempo; pero que cambió después por el de Rodríguez”. Esto está en línea con las evidencias documentales más recientes que sugieren que Rodríguez, en efecto, era hijo del clérigo Alejandro Carreño (1726- 1791), músico, quien llegaría a ser maestro de capilla de la Catedral de Caracas en 1789. Y de ser así, su madre fue Rosalía Rodríguez (1743-1799 o 1800), hija de un propietario de haciendas y ganado descendiente de canarios. Rosalía se casó dos veces. La primera, en 1759, tuvo una hija que llegaría a ser concuñada del padre de Andrés Bello. Viuda, contrajo segundas nupcias en 1780 con Carreño, y del matrimonio nació una hija.
El 4 de julio de 1774 nace José Cayetano del Carmen, hermano de Rodríguez y como él, expósito. Llegaría a ser un importante músico del período colonial y de la época de la independencia, y en el censo de pobladores de la parroquia caraqueña de Altagracia, figuran en la casa de Rosalía Rodríguez “Simón expósito, párvulo” y “Cayetano, id., párvulo”.
En 1790, en el censo Simón y Cayetano figuran como residentes de la casa del clérigo Alejandro Carreño, casa que era contigua a la del pintor Juan Pedro López, abuelo de Andrés Bello, y que ya estaba fallecido en ese entonces.
SIMÓN RODRÍGUEZ EDUCADOR
El 23 de mayo de 1791, Rodríguez es nombrado maestro de “primeras letras” de la escuela dirigida por Guillermo Pelgrón, quien era maestro desde 1778 y le había propuesto para el cargo. Rodríguez presta juramento el 30 de mayo, y enseñará en el segundo piso de la escuela, que estaba situada entre las esquinas de Veroes y Jesuitas. Allí se le establece un sueldo de cien pesos anuales, más la remuneración que los padres de los niños quieran aportar. En esta época existían en Caracas sólo tres escuelas primarias con autorización legal: la del Pelgrón, pública, y dos privadas, regentadas por religiosos. Pero además había un gran número de personas que se dedicaban a enseñar a leer y a escribir sin tener licencia para ello. En este primer año de trabajo de Rodríguez, muere el clérigo Alejandro Carreño, probable padre suyo y de Cayetano.
Entonces, Simón Bolívar ya había quedado huérfano y estaba bajo la tutoría de Feliciano Palacios, su abuelo materno, quien al parecer tenía buena opinión y afecto por Rodríguez. Esto es patente en una carta a su hijo Esteban en Madrid fechada el 3 de septiembre de 1792, donde escribe, “Te incluyo una lista para que me compres y remitas los libros que contiene. Estos son para el amanuense que me escribe, que es Don Simón, el hermano de Cayetanito Carreño; es hombre muy de bien y de bastante habilidad para llevar mis asuntos y cuentas, con descanso mío”.
Debido al deplorable estado de la escuela, Rodríguez compró muebles de estudio a sus expensas y el 6 de mayo de 1793, solicita ante el Ayuntamiento de Caracas que le sean compensados. El informe sobre la escuela y la tasación de los muebles instalados se presentan el 1 de junio siguiente, y en 1974 se le entregan varios abecedarios y textos de enseñanza para que opine sobre su posible adopción oficial en las escuelas. A estos él responde favorablemente y el 19 de mayo envía al Ayuntamiento una memoria titulada “Reflexiones sobre los defectos que vician la escuela de primeras letras en Caracas, y medio de lograr su reforma por un nuevo establecimiento”.
En ella señala la influencia perjudicial que ejercen muchos de los que se dedican a la enseñanza por su cuenta, y la insuficiencia de los sueldos que se asignan a los maestros de profesión. Así mismo aboga por el derecho de pardos y morenos a recibir enseñanza en igualdad de condiciones que los blancos; propone la creación de cuatro nuevas escuelas, una en cada parroquia de la ciudad, con cuatro maestros de número y doce pasantes en cada una, etc. El Cabildo dispone que la memoria sea sometida a la consideración de los vocales, y mientras espera, Rodríguez es testigo junto con su esposa, de la boda de Cayetano con María de Jesús del Carmen Muñoz.
El 1 de junio de 1795, copia y presenta de nuevo la memoria sobre reformas a la educación, ya que la misma se había desencuadernada durante la consideración del Cabildo, y el 20 de junio el Cabildo la aprueba provisionalmente, declarando que: “se considera una obra sumamente importante, el principio y raíz de las buenas costumbres, instrucción y facilidad para formarse los niños”. Sin embargo, se acuerda pasar el asunto a consideración de la Real Audiencia, por incumbir a ésta su definitiva aprobación o rechazo.
El 23 de junio de ese mismo año, Simón Bolívar, que tiene doce años de edad, se escapa de la casa de su tutor, Carlos Palacios, y se traslada a la de su hermana María Antonia. Ello da lugar a un pleito judicial para decidir quién habrá de hacerse cargo de la educación del menor y de la administración de su cuantiosa fortuna. A la fuerza, Bolívar es trasladado a la casa de Simón Rodríguez el 1 de agosto, ya que Carlos Palacios había obtenido permiso de la Real Audiencia para que Rodríguez alojase al menor y se ocupase de su educación. Según Palacios, ya que Rodríguez era “un sujeto de probidad y habilidad notoria, y estando destinado por su oficio a la enseñanza de los niños, podrá más cómodamente proveer a la educación de éste, teniéndole siempre a su vista y en su propia casa, que es bastante cómoda y capaz”.
En este episodio se le ha atribuido a Rodríguez el inspirar la frase que Bolívar dijera para justificar su cambio de domicilio, “los esclavos tienen libertad para variar y elegir amos a su satisfacción”, pero
...