ADAM SMITH Y LA RIQUEZA DE LAS NACIONES

ADAM SMITH Y LA RIQUEZA DE LAS NACIONES

Adam Smith nació en Kirkcaldy, Escocia, sus padres fueron Adam Smith y de Margaret Douglas; Fue un filosofo moralista  y catedrático, cuya pensamiento se centro en el crecimiento económico para promover la riqueza de una nación, razón por la cual lo llamaron el padre de la economía moderna; en su primer libro la Teoría de los sentimientos morales publicado en 1759, expuso los principios que guían la conducta humana indicando que el hombre es motivado por dos fuertes sentimientos la envidia y la empatía, en donde una fuerza invisible conduce dichos sentimientos para promover un bienestar general en la sociedad.

Entre el siglo XVI y XVIII el mundo estaba pasando por la transición de un sistema feudalista al capitalista gracias a la revolución industrial, a grandes e importantes descubrimientos, y a la perdida de la credibilidad de los fundamentos divinos por lo que se empiezan a solicitar explicaciones científicas en todos los campos del conocimiento, por lo que se empiezan a crear y poner en practica normas objetivas que regularan el comportamiento humano.

En el año 1976 Smith publica “La Riqueza de las Naciones”, el cual se fundamenta en la idea de que para que la sociedad actual progrese, esta debe enfocarse en la producción industrial de bienes aumentando su producción, para así lograr aumentar  sus ganancias; este planteamiento tiene como propulsor el atributo innato del hombre por comprar y vender, denominado la propensión natural al cambio, donde las personas en su insaciable búsqueda por su propio bienestar y libertad innata son orientados por lo que Smith llama la mano invisible que promueve la riqueza y el bienestar de la sociedad sin intervención del Estado gracias al sistema capitalista, este instinto natural logra florecer.

Gracias al instinto primitivo del hombre por el intercambio, para Smith, la responsable de provocar el incremento en la riqueza y la cantidad de mercancía que produce la sociedad, es el rendimiento o productividad del trabajo y la cantidad de operarios que requiere un empleo útil , la primera depende de la especialización en determinadas actividades, donde se empiezan a tener en cuenta factores como la destreza de un obrero en determinada actividad, ahorrar tiempo que se desperdicia al cambiar de una función o actividad a otra y el descubrimiento de las innovadoras maquinas que simplificaban la transformación y producción de artículos a un menor costo y la división del trabajo; lo que lleva a Smith a hacer la clasificación de las clases sociales, las cuales según él estarían divididas en trabajadores, los cuales a cambio de un salario por prestar su tiempo y capacidades es dueño del factor de producción denominado fuerza de trabajo, lo sigue el capitalista, quien es el dueño del capital, las maquinas y herramientas, y al producir un articulo por cantidades obtiene grandes ganancias, y en el escalafón mas alto están los terratenientes, los cuales son los dueños de la tierra donde se llevan a cabo estas actividades, así que recibe un pago por ello denominado renta;  todo este proceso esta sujeto a la expansión de los mercados tanto a nivel nacional como internacional y la acaparación de capital, puesto que entre más extenso y consolidado sea un mercado, generan mayores probabilidades de vender en mayores proporciones uno o mas artículos generando grandes ganancias y propiciando el crecimiento de la división del trabajo.

Para Smith, en el proceso productivo manufacturero participaban los artesanos, como los creadores de bienes en sus talleres gracias a medios de producción como las herramientas y materia prima, luego esta el mercader quien se encarga de vender lo producido por el artesano, pero cuando el artesano no tenia los medios de producción, el mercader empezó a surtirlo, lo que creo exclusividad. Posteriormente los artesanos decidieron agruparse y trabajar a ordenes de un capitalista industrial, el cual era el dueño de las maquinas, herramientas y  materia prima, ejercía el papel de patrón y era quien designaba a sus trabajadores las funciones especificas de lo que deberían hacer, de allí es de donde nace la teoría de la división del trabajo.

Smith considera que para que lo planteado anteriormente sea posible, debe hacerlo a través del sistema capitalista, enfocado en actividades industriales y la división del trabajo, pues a pesar de ser un sistema caótico, éste esta regido por un conjunto de leyes que garantizan el progreso económico y social y el desarrollo de libertades individuales, pero como no todo trabajo tiene el mismo valor, Adam decidió dividir el trabajo en dos, el trabajo productivo, es decir que se dedica a la producción de bienes comerciales y útiles, realizado por los artesano, comerciantes y capitalistas industriales; en éste contexto Smith excluye los servicios, aquellos ordenados por el Estado y ejecutados por sus funcionarios como el ejercito la marina, sacerdotes, doctores entre otros, los cuales  debía de encargarse de asuntos como la defensa nacional, infraestructura vial, educación, justicia y registro civil, ya que como no eran áreas rentables para los capitalistas, los califica como trabajo improductivo.

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