ATOMO

Desde los orígenes del pensar el hombre ha buscado y tratado de explicar la causa del. universo y por qué la existencia de la multiplicidad, intuyendo en algunos casos una unidad subyacente unificadora de la multiplicidad.

Los primeros pensadores atribuyeron, en algunos casos, a una materia determinada el origen del universo, como Tales que señaló el agua como primer principio o Anaxímenes el aire, o Empédocles que indicó como origen el aire, el agua, la tierra y el fuego.

En cambio otros pensadores no determinaron la materia ni señalaron a una especifica, como Anaximandro que indicó como origen del universo al ; Leucipo y Demócrito expresaron que la realidad está compuesta de pequeñas partículas indivisibles que caían en forma rectilínea y que, por una ley determinada colisionaban entre ellas formando los objetos conocidos

Estas partículas adoptaban una cierta y determinada forma y de esa manera los distintos cuerpos van adquiriendo la forma conocida, además decían que de los cuerpos se desprendían en forma sutil partículas que impresionaban en otros cuerpos, siendo ésta la forma en que se producen las sensaciones.

Esta teoría cae en el olvido y es retornada en el siglo I el filósofo Epicúreo, con la diferencia que este pensador no atribuía a una ley determinada el choque de las partículas sino al mero azar.

Durante la Edad Media y principios de la Edad Moderna, la teoría atómica cae en el olvido absoluto hasta que, en el s. XIX d.C. John Dalton la retorna postulando como ley que toda materia está formada por pequeñas partículas indivisibles llamadas átomos

A partir de ese momento la teoría atómica se desarrolla velozmente. En el año 1897 J.J. Thomson realizando una serie de experimentos observó que existen partículas cargadas negativamente a las que llamó electrón, por lo tanto dedujo que esa partícula debía pertenecer a algún lugar, el único conocido era el átomo, que dejaba de ser indivisible. También dedujo que si existía una partícula negativa, debía existir una partícula positiva. Esta se descubrió años más tarde y fue Ruthenford que definió al átomo como un núcleo cargado positivamente alrededor del cual giran orbitalmente las partículas negativas, sugiriendo la existencia de una partícula hipotética de masa similar a la partícula positiva pero sin carga, al que denominó neutrón.

Se tenia ya la forma de un átomo, a partir de ese momento se siguió profundizando su estudio, en el año 1913 el físico Niels Bohr propone un modelo atómico en el cual los electrones se encuentran en órbitas o niveles de energía cuantificados, determinados y definidos; estos niveles no absorben ni emiten energía, llamándolos niveles estacionarios de energía (esto es de real importancia para lo que más adelante se verá como interacción y energía estática) pero admitió también que si un átomo absorbe energía

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