BIOMECANICA DE HUESO

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Introducción

El tejido óseo es un tipo especializado de tejido conectivo cuya matriz extracelular se halla mineralizada en su mayor parte.

El tejido óseo se caracteriza por su gran dureza y consistencia. Consta de una sustancia fundamental y de células óseas, las cuales se alojan en las cavidades óseas que están existentes en la materia y es muy fundamental. Esta última es rica en sustancias minerales (sales de calcio) que aumentan con la edad. La sustancia cimentadora sirve de unión entre las fibrillas. Este tejido representa la parte más importante del esqueleto y a pesar de su dureza y resistencia posee cierta elasticidad. Al igual que el cartílago, el tejido es una forma especializada del tejido conectivo denso, además provee al esqueleto de la fortaleza de funcionar como sitio de inserción y sostén del peso para los músculos y le da rigidez al organismo para protegerlo de la fuerza de gravedad.

Es por ello que es complejo, cuyas propiedades son producto de la asociación de una morfología externa macroscópica y de una morfología microestructural compuesta por una red trabecular. Esta organización debe permitir que el esqueleto sea sólido, elástico y liviano para facilitar la locomoción. El hueso está sometido a exigencias y cargas considerables. Para soportarlas, dispone de propiedades mecánicas que deben considerarse en distintos contextos (compresión, tracción, flexión, etc.). Además, se trata de un tejido vivo que no sólo se forma, sino que también se reabsorbe en función de las cargas mecánicas que recibe.

Dentro de este tejido encontramos células que componen el tejido oseo, como; las osteoprogenitoras, los osteoblastos, los osteocitos y los osteoclastos que más adelante se mencionaran a detalle.

Además de ello mencionaremos su estructura y la gran importancia y funcionamiento que tiene en nuestra composición ósea.

Desarrollo

Como anteriormente se mencionaba el sistema esquelético está compuesto por los huesos, que, unidos a las articulaciones, confieren a este sistema sus funciones básicas de sostén y movilidad del cuerpo humano.

El hueso es el único tejido cuya responsabilidad principal es soportar las cargas mecánicas de las que es objeto el cuerpo, cabe mencionar que para poder tener una estructura y composición debe este  estar conformado por factores funcionales que le dan dureza y rigidez, este factor podemos encontrarlo con mayor proporcionalidad, aproximadamente con un 60% y es denominado cómo estructura inorgánica, además de ello encontramos también otra estructura importante que conforma la estructura del tejido oseo, que es la orgánica. Esta constituye aproximadamente un 30% de flexibilidad y resistencia en la que participan las células oseas y las fibras de colágeno y también constituida con un 10% de agua. Todo esto para constituir solo su estructura y composición.

Dentro de la estructura y composición es importante mencionar las células que se encuentran en el tejido oseo que son las células osteoprogenitoras, los osteoblastos, los osteocitos y los osteoclastos. Todas estas células tienen funciones especiales que ayudan y funcionan de diferente forma, pero todas estas en conjunto una sobre otra.

Las células osteoprogenitoras o células no especializadas son derivadas del mesénquima, estas se encuentran en la capa interna del periostio (tejido que rodea exteriormente al hueso), en el endostio y en los canales del hueso que contienen los vasos sanguíneos. Tienen la función de auxiliar cuando una de las células se encuentra débil en su función y sirve de reincorporación para su correcto funcionamiento.

Los osteoblastos, que forman el tejido óseo pero que han perdido la capacidad de dividirse por mitosis estas segregan colágeno y otros materiales que son utilizados para la construcción del hueso estas se encuentran en las superficies óseas y a medida que segregan los materiales de la matriz ósea los va envolviendo convirtiéndolos en osteocitos.

Los osteocitos, estas células óseas maduras derivadas de los osteoblastos constituyen la mayor parte del tejido óseo. Al igual que los osteoblastos han perdido la capacidad de dividirse. Los osteocitos no segregan materiales de la matriz ósea y su función es la de mantener las actividades celulares del tejido óseo como el intercambio de nutrientes y productos de desecho.

Y finalmente los osteoclastos, estas células derivadas de monocitos circulantes que se asientan sobre la superficie del hueso y proceden a la destrucción de la matriz ósea.

Constituyendo las células que se encuentran en el tejido oseo encontraremos sustancias que los recubren como, la sustancia intercelular este tipo de sustancia es un gel viscoso y semilíquido, en las que están incluidas las fibras y células del tejido y constituidos por macromoléculas de polisacáridos y liquido tisular.

Encontramos también formas que pueden darle estructura y que podemos encontrarlas de dos formas, forma macroscópica y microscópica.

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