Caso práctico-Perspectivas Ambientales de la OCDE

1- ¿Cómo se podrían mejorar los conocimientos necesarios para adoptar políticas adecuadas de desarrollo sostenible, y no desembocar en políticas contradictorias como las mencionadas en el texto?

Es necesario incluir a todos los actores sociales, económicos y medioambientales para adoptar esas medidas que no resulten contradictorias. Si nos basamos en indicativos meramente económicos los resultados medioambientales hemos visto en el pasado que han sido catastróficos, con políticas contradictorias como las mostradas en el texto. Hay que valorar más allá del PIB, y valorar la inacción cuál es el resultado que nos puede ofrecer.

La pedagogía y la información son fundamentales en todas las esferas, desde los centros escolares, pasando por el personal que trabaja en las instituciones y la empresa privada. Si la educación es la base de nuestra vida y nuestro desarrollo, una educación respetuosa con los recursos y nuestro entorno va a repercutir en cómo interactuemos con ello. Pero es necesario conjugar el desarrollo económico con la sostenibilidad, evitando acciones enriquecedoras a cambio de destrucción. Tenemos el ejemplo claro de la Amazonía.

La forma más efectiva lamentablemente en estos momentos sigue siendo la economía, es decir, introducir aspectos que generen cargas o impuestos por la utilización negativa de recursos naturales. Por lo que la introducción de algunos aspectos sostenibles en el PIB sería muy beneficioso. Es necesario equilibrar el crecimiento económico con el agotamiento de los recursos, estimando estos recursos disponibles finitos y valorando en todo su conjunto lo que supone su uso y abuso. Materialización de la premisa “quien contamina, paga”, impuestos más elevados en función de la materia prima utilizada, beneficios y/o subvenciones a quienes desarrollen actividades sostenibles… son algunas de las acciones que hay que tener en cuenta. Con formación e información es fácil hacer entender por qué se toman determinadas decisiones en vez de otras, y no caer en políticas contradictorias.

2- Imagina que eres el alcalde de un municipio de 30 000 habitantes y debes elaborar una serie de medidas relacionadas con el desarrollo sostenible y la mejora en la calidad de vida de tus ciudadanos. Plantea cinco medidas concretas.

Para conseguir la sostenibilidad en un municipio de tamaño mediano se pueden establecer medidas como:

• Remunicipalización de la recogida de residuos. Los residuos son un problema en todos los municipios, independientemente del tamaño del mismo. Y en la mayoría de ellos se trata de un servicio externo al ayuntamiento. Con la remunicipalización ahorramos costes a la vez que generamos empleo estable y de calidad. Es necesario acompañar esta acción con otras acciones informativas para la ciudadanía, así como vincularla a posibles asociaciones locales y centros escolares. Estos recursos pedagógicos e informativos no sólo fomentan el respecto y protección por el entorno, sino que generan conductas que consiguen que se vea el desarrollo sostenible como algo de nuestro día a día, y que con acciones que consideramos habituales, modificándolas un poco, podemos asegurar un entorno más limpio, y saludable y que perdure en condiciones óptimas para generaciones futuras.

• Promoción de consumo de productos de Km.0. Es necesario volver al consumo de proximidad y responsable, y se pueden establecer políticas de ayuda y promoción para consumo de productos locales por múltiples razones. Por calidad del producto, que no necesita recolectarse semanas antes de su maduración para un transporte lejano. Por el cuidado del medio ambiente, ya que se trata de instalaciones agroganaderas ecológicas, que respetan el entorno, mantienen razas autóctonas y no emplean sustancias nocivas con el medio ambiente, además de producir productos de temporada que no esquilman los suelos ni consumen cantidades desproporcionadas de nutrientes o agua. Por el compromiso ético de los productores de estas explotaciones, que son los principales interesados en ofrecer un producto de calidad. Por la creación de empleo digno y justo, algo tan complicado de encontrar en nuestros tiempos.

• Recuperación de aguas para su posterior reutilización en riego de zonas verdes y baldeo de calles. El agua es un bien fundamental para la vida, y el cambio climático está produciendo consecuencias terribles en este aspecto. Gran parte de esta recuperación puede obtenerse con una correcta depuración de las aguas residuales, que no sólo proporcionarían un agua de calidad para reutilización, sino unos fangos que podrían utilizarse como abono orgánico. Es necesario optimizar y mejorar la captación y la red de distribución, para evitar pérdidas por fugas o averías, a la vez que se garantiza la calidad con la que llega a las personas usuarias. El agua de menor calidad, o que tras los tratamientos no pueda considerarse de consumo se podrá utilizar para el baldeo y limpieza de las calles, evitando de esta manera despilfarro de agua potable.

• Programas para luchar contra la pobreza energética. Siguiendo los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 es necesario disponer de un acceso a la energía accesible y no contaminante. Nuestra vida diaria depende de servicios energéticos para su desarrollo, por lo que en primer lugar estamos en la obligación de asegurar que todas las personas tienen acceso a esos servicios, eliminado la pobreza energética. Para ello es fundamental realizar un trabajo en común junto con Servicios Sociales para identificar las familias que necesitan ayuda en este aspecto y facilitarles todos los medios posibles (abonos sociales, tarificación gratuita, …) para no consentir cortes en los suministros por parte de los oligopolios. En esta línea hemos de trabajar de manera que estos servicios se ofrezcan de forma sostenible, con energía procedente de renovables fomentando el consumo de las mismas.

• Programas para reducir las emisiones de CO2. Estableciendo planes de emisiones 0 que conllevarían algunas acciones concretas como pueden ser las siguientes: instalación de energía fotovoltaica en los edificios municipales; mejora de la movilidad urbana con zonas peatonales, caminos escolares o fomento de  la bicicleta; utilización de vehículos eléctricos en la flota municipal; cambio de luminarias  por LED.

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