CASO PRACTICO. Los impuestos ambientales

Introducción

Los procesos de industrialización, centrándose en los diferentes gestores económicos mundiales sumados a la carencia de conciencia de los diferentes beneficiarios, que han llevado al gradual deterioro ambiental que aumenta con cada avance económico (Colin,2003), la preocupación por estos impactos se han abarcado muchos tipos de acciones por diferentes autoridades en varios países del mundo estableciendo la lucha para buscar soluciones efectivas contra estas situaciones; dentro de las acciones que se llevan a cabo son los impuestos ambientales, los cuales se encargan de modificar las señales económicas que reciben individuos y empresas sobre los costos ambientales de sus acciones, pues figuran como un mecanismo a través del cual los contribuyentes ven reflejado el precio de la contaminación en su economía con el objetivo de disuadir a los sujetos de contaminar (Pérez, Alava, Mancilla, Martín, & Aldaz, 2011).

Los impuestos ambientales se refieren a aquellos impuestos destinados a apaciguar los efectos nocivos causados al planeta por las actividades económicas intencionales o no, los cuales sirven para mitigar el cambio climático. Las mismas que parten de un principio sencillo, quien contamina, paga, es decir, se refieren a aquellos impuestos que consisten en el cobro de las externalidades que tienen un impacto negativo, comprobado y específico sobre el ambiente (Iberdrola, 2019).

La finalidad de los denominados “impuestos verdes”, es obligar a que los contaminantes paguen bajo el principio “quien contamina, paga” de tal manera que el precio refleje el coste de las externalidades, sirve como herramienta clave para avanzar hacia una economía descarbonizada, que favorezca al desarrollo sostenible y uso de los recursos de manera óptima. esta clase de impuestos presenta ciertas ventajas que justifican su existencia, algunos de estos beneficios son: Internalizan las externalidades negativas. Promueven el ahorro energético y la utilización de fuentes renovables. Incentivan a las empresas a innovar en sostenibilidad. Generan recaudación para los gobiernos que puede servir para bajar otros impuestos o para desarrollar proyectos ambientales. Protegen el ambiente (GK, 2019).

En Ecuador, en el año 2011 mediante la Ley de Fomento Ambiental, se crearon los denominados “impuestos ambientales” mediante el cual se obtuvo recaudaciones a partir del año 2012. entre los impuestos ambientales con los que cuenta el país tenemos el impuesto ambiental a la contaminación Vehicular, impuesto redimible a las botellas plásticas; dichos impuestos son recaudados y regulados por en Servicio de Rentas Internas del Ecuador (SRI) y la Asamblea Nacional del Estado (Ministerio del Ambiente y Agua, 2018).

El presente trabajo tiene por objetivo conocer los impuestos ambientales con los que cuenta el país mediante la consulta bibliográfica de información referente al tema para poder analizar sus beneficios tanto ambientales como gubernamentales.

Desarrollo

Impuesto Ambiental a la Contaminación Vehicular

Es un impuesto que grava a la contaminación del ambiente producida por el uso de vehículos motorizados de transporte terrestre.

Objetivo: Reducir la contaminación del ambiente producida por el uso de vehículos motorizados de transporte terrestre.

Hecho generador. El hecho generador de este impuesto es la contaminación ambiental producida por los vehículos motorizados de transporte terrestre.

El Impuesto Ambiental a la Contaminación Vehicular (IACV) debe pagar todo propietario de vehículo motorizado de transporte terrestre cuyo cilindraje sea mayor a 1500cc.

Se debe pagar sobre la base imponible de acuerdo al cilindraje del vehículo y el factor de ajuste que considera su antigüedad.

Conforme la Ley Orgánica de Incentivos para Asociaciones Público Privadas publicada en el Registro Oficial Suplemento 652 de 18 de diciembre del 2015 con referencia a la Disposición Transitoria, se amplía la duración de la rebaja del 50% del valor del IACV a pagar hasta el año 2018, para vehículos cuyo cilindraje sea mayor a 2500 centímetros cúbicos y que tenga más de cinco años de antigüedad.

Impuesto Redimible a las Botellas Plásticas No Retornables

La finalidad de disminuir la contaminación

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