“EL ÁRBOL DEL CONOCIMIENTO” Las bases biológicas del entendimiento humano

“EL ÁRBOL DEL CONOCIMIENTO”

Las bases biológicas del entendimiento humano.

El libro habla sobre la idea que solemos tener sobre la certidumbre, es decir, la certeza de los hechos que van transcurriendo en nuestra vida cotidiana. Esta certeza la creamos y creemos a partir del sentido perceptual que se refiere a la manera en que el cerebro interpreta con los estímulos sensoriales que recibe a través de nuestros sentidos para formar una impresión consciente de la realidad física de nuestro entorno, y es que a decir verdad, el sentido por el cual nos dejamos llevar con más facilidad es la vista y así vamos dejando de desarrollar al máximo la capacidad del oído, tacto, gusto y el olfato. Con el simple hecho de visualizar algo que pueda representar un problema y que consideramos que ya no tiene solución dejamos de buscar opciones u alternativas.

Se hace referencia a que para que podamos tener conocimiento sobre diversas cosas es importante que se vivan experiencias de manera personal para poder entender el hecho o fenómeno y así poder tener una perspectiva distinta a lo que solemos creer sin haber investigado antes o haberlo comprobado. Se dice que se tiene que buscar el conocimiento, la verdad ya que no podemos vivir pensando que las cosas van sucediendo de forma espontánea. Todo tiene una respuesta.

Aunque muchas veces el buscar y comprobar los resultados de un problema o determinada situación es importante siempre tener de algún modo la disposición o la mente abierta a encontrar nuevas respuestas. Cada experiencia está ligada con nuestra estructura de una manera indisoluble, por lo que siempre nos encontraremos con que no podemos separar nuestra historia de acciones (biológicas y sociales) de cómo nos aparece el nuevo resultado. Lo más obvio siempre es lo que más nos cuesta entender y es que la disposición que tengamos ante lo que vayamos viviendo siempre va a poder ser controlado por nuestra función neuronal. Por ejemplo: si una persona está fielmente apegada a la idea de que si va de vacaciones a un bosque únicamente verá árboles está predisponiendo a su mente a tener una actitud negativa y cerrada pero en cambio si esa persona cambia su actitud a una más positiva y trata de pensar que conocerá nuevas cosas aparte de árboles se llevará la sorpresa de encontrar nuevas cosas, vivirá una experiencia grata y además podrá ser capaz de llevar consigo una experiencia cognoscitiva.

Es importante mencionar que los estados que nuestra actividad neuronal detectan son abonados o alimentados por distintas perturbaciones que ya se encuentran determinadas en cada persona por su estructura individual y no por las características del agente que observamos o también conocido como el agente perturbante.

Una parte muy interesante del libro es la parte referida a “El gran escándalo”, en esta sección habla sobre algo que pasa en forma común y es que nos gusta ver lo que pasa en las experiencias de otras personas, gozamos el solo hecho de saber qué pasa en sus vidas y es que a decir verdad esto es un hecho que nos entretiene como si se tratará de un espectáculo. Tenemos la mala costumbre de que cuando sabemos que a alguien le pasa algo nos sentimos con todo el derecho de juzgar y opinar sin ponernos a reflexionar en lo que esa persona está pasando, o mejor dicho, experimentando. La pregunta es ¿qué pasa cuando nosotros estamos pasando por un problema o situación difícil? Los papeles cambian, es así como pasamos de ser los espectadores a los que crean el show.

El momento de la reflexión en un espejo se convierte en un momento muy peculiar o crítico porque es ahí donde nos damos cuenta de que la respuesta se encuentra frente a nosotros mismos. Encontramos un ángulo que nos muestra nada más y nada menos que la verdad. La auto-reflexión se convierte en el único acto que nos da la oportunidad de descubrir que todos aquellos actos u acciones que juzgamos a diario de los demás son tan reales y nítidos como lo que nosotros hacemos, no somos perfectos.

La existencia humana es un escándalo, cada experiencia que vamos llevando a cabo se convierte en un escándalo para los espectadores pero uno de los peores es el ignorar todo lo que podemos hacer o hacemos. El libro habla en forma directa en cuanto porque nos resulta tan difícil el poder hacer una auto-crítica y es que la respuesta recae en que el descubrir qué es lo que hacemos mal o bien nos causa una sensación vertiginosa, nos da miedo o pena descubrir la verdad de los hechos.

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