ELEMENTOS BASICOS PARA LA ELABORACION DE UN PROGRAMA DE CONTROL O ERRADICACIÓN DE ENFERMEDADES

ELEMENTOS BASICOS PARA LA ELABORACION DE UN PROGRAMA DE CONTROL O ERRADICACIÓN DE ENFERMEDADES

INTRODUCCIÓN.

La programación debe ser considerada una técnica, un método de trabajo destinado a orientar la búsqueda de resoluciones que en mayor medida se aproximen a la más deseable.

La programación, pues, es aplicada a cualquier disciplina, y en particular, como es el caso de la salud pública y la sanidad animal, por la complejidad y variabilidad de sus causa y efectos, que implican una ardua tarea de organización y los ingentes recursos que es necesario utilizar.

En salud pública o en sanidad animal la elaboración de un programa o proyecto nace como consecuencia de la necesidad de provocar cambios en relación al estado en la conducta sanitaria de la población humana o animal. Dado que dicha conducta no es estática, sino que varía en virtud de un complejo de factores que interactúan en forma permanente, lo que en realidad interesa provocar son cambios diferentes a los que corresponderán como consecuencia de actividades ya decididas anteriormente y que continuarán actuando en el futuro. (2) en este orden de ideas, los programas de control y erradicación de enfermedades surgen de la necesidad de modificar la conducta lesiva de éstas, no solo desde el punto de vista de la salud misma de la comunidad humana o animal; sino también de los diferentes factores socioeconómicos entre los que se desenvuelve la vida del hombre cuyo bienestar es el fin último de las acciones de  salud.

La presente entrega pretende dar una visión resumida, clara y sencilla de los diferentes componentes que debe contener cualquier programan de control o erradicación de una enfermedad.

Aún cuando la ejemplificación utilizada esta encaminada a sanidad animal, es claro que los conceptos son válidos para programas en poblaciones humanas o animales.

Es evidente que antes de decidir montar un programa de control o erradicación de una enfermedad se debe tener un conocimiento claro de la situación de salud de la comunidad a quien va a estar dirigido.

Generalmente el punto de partida de todo programa de salud (salud pública, veterinaria o salud animal), como producto de políticas y planes establecidos, suele ser un estudio epidemiológico de la naturaleza y la magnitud del problema y los diferentes factores que lo están determinando, así mismo, los recursos disponibles tanto por parte del programador como por parte de la comunidad, así como el grado de aceptación por parte de  ésta última, pues en la medida en que se de la participación activa de ella se estará dando el éxito o el fracaso del programa. Es decir, una de las bases fundamentales para el establecimiento de cualquier programa de control o erradicación de una enfermedad es el desarrollo de un adecuado diagnóstico de la situación existente.

Obviamente, todo el programa de control o erradicación de una enfermedad debe tener un NOMBRE en el que se especifica claramente, la característica del mismo (control o erradicación, o ambas) la entidad patológica a controlar o erradicar, el ámbito geográfico o el espacio que abarca (nacional, estatal, regional, municipal, etc.), la especie a la cual está dirigido (bovinos, porcinos, etc.) en salud pública se sobreentiende que las acciones van dirigidas a una comunidad humana.

El nombre nos ubica rápidamente y en forma clara sobre las características, el contenido y el objetivo último del programa (14).

PARTES DEL PROGRAMA

1.- INTRODUCCIÓN

Consiste en exponer el problema y puntualizar su importancia en el área de influencia así como la manera en la cual el programa puede contribuir a la solución del problema de salud existente.

2.- ANTECEDENTES

Comprende la descripción y el análisis historiográfico de la magnitud y la naturaleza del problema. Es decir, implica el conocimiento claro y la cuantificación de la frecuencia y tasas de presentación de la enfermedad y su distribución en la población por sexo, edad, especie; su distribución geográfica, en el tiempo y, los demás factores asociados tanto al hospedador, como el agente y al medio (susceptibilidad, resistencia, modo de transmisión; vulnerabilidad, invasibilidad, patogenicidad; reservorios, clima, flora, fauna, etc.) su trascendencia social y económica.

En oportunidades este capítulo se confunde o se maneja incluyendo en él los planteamientos introductorios, mecánica que modifica en algo la forma de presentación del programa del programa pero no lesiona en nada su contenido y su esencia. Está definido pues, por el estilo propio del programador. (9,14)

3.-JUSTIFICACIÓN

El diagnóstico suministra los elementos necesarios y suficientes para establecer los razonamientos bajo los cuales se justifica la necesidad de llevar a cabo el programa.

Un programa de control o erradicación de una enfermedad no solamente esta justificado por la sola presencia de la enfermedad y el daño ocasionado directamente sobre el hospedador (morbilidad, mortalidad); también hay que tener en cuenta la trascendencia de la presencia del factor y sus implicaciones en el bienestar de la comunidad desde el punto de vista social y económico y, además la disponibilidad de los recursos necesarios y suficientes.

Estos razonamientos pueden ser descritos en tres rubros: de carácter técnico-sanitario y de carácter socioeconómico.

3.1 Técnico sanitario.

Hace referencia a la cuantificación del daño general a través de tasas de morbilidad (incidencia y prevalencia) y de mortalidad y su distribución por variables de persona (o animal) tiempo y lugar, cómo su persistencia puede llegar a afectar a la comunidad sana; cuantificación de recursos técnicos (disponibilidad); infraestructura constituida por laboratorios de diagnóstico, equipo, reactivos, personal capacitado (profesional y técnico). En este orden de ideas y teniendo un conocimiento claro del factor de riesgo y su vulnerabilidad podemos llegar a establecer las técnicas a emplear ya sea de control o erradicación, definiendo así mismo el tiempo necesario y estableciendo las necesidades en cantidad y/o en calidad del recurso a utilizar.

3.2 Socio económica.

Se refiere a las implicaciones que la presencia de la enfermedad está teniendo y puede tener sobre la situación socioeconómica de la comunidad en general, es decir, el costo social y económico de la enfermedad, la invalidez o la muerte: marginación social, hambre, desnutrición, desempleo, incapacidad, disminución de la producción (de leche, carne, derivados y subproductos por enfermedad o muerte de animales, de estos y otros renglones por incapacidad o disminución en mano de obra), de exportaciones, de inversiones, etc.

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