¨El aparato respiratorio¨.

Instituto San José

• Integrantes: Christian Castro.

                       Danna Garcia.

                       Estephani Peña.

                       Gabriela Cantillano.

• Maestra: Lic. Mayra Corea.

• Asignatura: Biología humana.

• Tema: ¨El aparato respiratorio¨.

• Fecha: 18 y 19 de Julio, 2016.

Introducción

Una de las funciones más importantes del tórax es la respiración. El tórax no sólo contiene los pulmones sino que también proporciona la maquinaria necesaria, el diafragma, pared torácica y las costillas, para una movilización efectiva de aire hacia dentro y fuera de los pulmones. Los movimientos hacia arriba y abajo del diafragma y los cambios en las dimensiones lateral y anterior de la pared torácica, producidos por los movimientos de las costillas, modifican el volumen de la cavidad torácica y son elementos fundamentales para la respiración.

Concretamente y sabiendo lo anterior, contamos con varios sistemas en los cuales los humanos podemos ser dependientes; sistemas: muscular, respiratorio, circulatorio y óseos se ven en estos procesos. Tanto el diafragma como los músculos propios de la respiración como los que ayudan forman parte del sistema muscular respiratorio. Circulatorio cabe dentro del movimiento de los músculos, con su irrigación y el intercambio gaseoso, y óseo por las costillas y sus funciones de protección y movimiento.

Objetivos

• Identificar los órganos que conforman el sistema respiratorio.

• Explicar las funciones generales de cada órgano identificado.

• Conocer algunas enfermedades comunes que afectan éste sistema.

• Mencionar algunas medidas de cuidado para el sistema así como para cada órgano que lo compone.

• Incentivar del cuidado de éste sistema a través de las medidas de cuidado antes expuestas.

Anatomía del aparato respiratorio

Sistema muscular respiratorio

Músculos de la respiración

• Intercostales
• Subcostales
• Esternocleidomastoideo
• Escaleno
• Diafragma

Todos rodeando la caja torácica. El diafragma es un musculo-tendinoso que sella la abertura torácica inferior. Generalmente, las fibras musculares del diafragma se dirigen desde los bordes de la abertura torácica inferior y convergen en un centro tendinoso.

Debido a la posición oblicua de la abertura torácica inferior, la inserción posterior del diafragma es inferior a la inserción anterior. El diafragma no es plano; por el contrario, se abomba superiormente, tanto en el lado derecho como en el izquierdo, para formar las cúpulas.

Vías respiratorias

Cavidades nasales

Las dos cavidades nasales son las partes más superiores del tracto respiratorio y contienen los receptores olfativos. Son espacios alargados con forma de cuña con una base inferior grande y un vértice superior estrecho. Una estructura esquelética que consiste principalmente en hueso y cartílago sujeta las aberturas. Las aberturas anteriores de las cavidades nasales son las narinas, que se abren en la superficie inferior de la nariz. Las aberturas posteriores son las coanas, que se abren en la nasofaringe. Separadas por un tabique nasal, tienen a sus lados espacios llamados cornetes y senos paranasales que tienen sus propias funciones, también aquí drenan las lágrimas excedentes.

Son tres cornetes, siendo estos lugares específicos para algunas funciones como ser: circulación venosa, siendo esta quien sufre al momento de sangrar la nariz, entre otras funciones.

Las cavidades nasales son importantes para su salud. Esta filtra el aire que respira, eliminando el polvo, los gérmenes y los irritantes. Calienta y humedece el aire para evitar que los pulmones y los tubos que conducen a ellos se resequen. Las cavidades nasales también contienen células nerviosas que ayudan al sentido del olfato. Cuando existe un problema en la nariz, todo el cuerpo puede sufrir. Por ejemplo, la nariz tapada por un resfrío puede dificultar la respiración, el sueño o el bienestar general.

Además del resfrío, muchos otros problemas pueden afectar las cavidades nasales. Entre ellos:

• Tabique nasal desviado: es un desvío de la pared que divide la cavidad nasal en mitades
• Pólipos nasales: masas blandas que se desarrollan en la mucosa nasal o de los senos paranasales
• Hemorragias nasales
• Rinitis alérgica: inflamación de la nariz y de los senos paranasales, a veces causado por alergias. El principal síntoma es la secreción nasal.
• Fracturas

Faringe

La faringe es un hemicilindro muscular que une las cavidades oral y nasal, en la cabeza, con la laringe y el esófago, en el cuello.

La cavidad faríngea es una vía común para el aire y el alimento. La faringe está unida por arriba con la base del cráneo y continúa hacia abajo hasta la separación por la glotis, quien originara la tráquea y el esófago. Las paredes de la faringe se unen por delante con los límites de las cavidades nasales, la cavidad oral y la laringe. Basándonos en estas relaciones anteriores, la faringe se subdivide en tres regiones: nasofaringe, orofaringe y laringofaringe:

■ Las aberturas detrás de las cavidades nasales (coanas) se abren en la nasofaringe.

■ La abertura posterior de la cavidad oral (istmo de las fauces) se abre en la orofaringe.

■ La abertura superior de la laringe (entrada de la laringe) se abre en la laringofaringe.

 Además de estas aberturas, la cavidad faríngea se relaciona por delante con la lengua y con la parte de atrás de la laringe. Las trompas auditivas se abren en las paredes laterales de la nasofaringe, siendo estas las que se tapan ante las alturas y provocan sensación de sordera. Las amígdalas forman parte de la orofarínge.

Pero, ¿de qué está hecha la faringe?

La pared faríngea está formada por músculos esqueléticos (significa que están en control de la conciencia, o sea son músculos voluntarios); proporcionan vías para las estructuras que pasan a través de la pared.
Los músculos de la faringe se organizan en dos grupos que se basan en la orientación de las fibras musculares. Las fibras de los músculos constrictores se orientan en dirección circular con respecto a la pared faríngea haciendo una función de ¨apretar¨, mientras que las fibras de los músculos longitudinales se orientan verticalmente para elevar la faringe y cerrar el istmo de las fauces.

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