Enriquecimiento Ambiental En Yaguareté (Panthera Onca): Una Herramienta Fundamental Para Su Bienestar En Cautiverio

El ritmo natural de vida de los animales que se encuentran en estado controlado se ve alterado ya que estos se enfrentan a una rutina con condiciones ambientales estables, lejos de lo que sería una realidad salvaje llena de estímulos, donde la exploración del territorio y la búsqueda de alimento, refugio y pareja abarcarían gran parte de su tiempo.

De este modo, el Enriquecimiento Ambiental (E. A.) surgió como un principio de manejo animal para mejorar la calidad del cuidado de animales cautivos mediante la identificación y provisión de estímulos ambientales necesarios para lograr condiciones óptimas de bienestar físico y psicológico.

Enriquecimiento Ambiental (E. A.) entonces, es el conjunto de técnicas que se utilizan para estimular el desarrollo de comportamientos típicos de cada especie y promover el bienestar animal a través de actividades, estructuras complejas y oportunidades sociales (F. Presa, com. pers. 2008).

Mediante la implementación de un programa de Enriquecimiento Ambiental (E. A.) que fomente el desarrollo de conductas propias de la especie y la disminución en los niveles de estrés, se logra a su vez alentar el éxito reproductivo y así contribuir a su conservación ex situ. También se genera una mayor actividad en el animal, menor número de incidencia de enfermedades y mayor longevidad, dado que en “cualquier caso el mantenimiento de los estereotipos más allá de un tiempo razonable lleva no solamente a la aparición de diferentes cuadros clínicos, sino también a un desgaste energético excesivo, a la fijación de estos comportamientos y al agotamiento del animal” (Mateos, 1994).

Se producen de esta forma ambientes mucho más atractivos a la vista del público en general, con animales más saludables y con mayor actividad, logrando que el mensaje de bienestar y conservación que se desea transmitir, llegue correctamente a los visitantes.

YAGUARETÉS EN CONDICIONES CONTROLADAS

Como muchas otras especies, los yaguaretés que viven en cautiverio suelen habitar en dos tipos de recintos, uno interno (brete o zona de espera/encierro) al cual exclusivamente puede acceder el personal autorizado, y es donde los animales son en su mayoría “guardados” o alojados luego que cierra el Parque para pasar allí toda la noche y otro externo (exhibidor o recinto/solarium) en el cual permanecen durante el día, permitiendo que los visitantes puedan observarlos.

En los bretes, los yaguaretés quedan bajo condiciones de mayor control, aumentando así la seguridad tanto del animal como del personal, a su vez estos sirven para contener a los animales mientras se procede a la limpieza diaria de los exhibidores, a la puesta de los enriquecimientos y ambientaciones o bien cualquier otro mantenimiento, facilitando además el manejo veterinario. Estas zonas de espera suelen tener rejas y suelo de cemento, a diferencia de los exhibidores que muchas veces presentan mayor tamaño y sectores con diferentes sustratos.

Muchos zoológicos cuentan con edificaciones y recintos antiguos, generalmente muy pequeños y húmedos, los cuales son conservados como patrimonio histórico cultural y no pueden ser modificados, por lo tanto los animales y el personal tienen que amoldarse a los mismos. Es en estos sitios donde el Enriquecimiento Ambiental comienza a jugar un papel fundamental.

COMO COMENZAR

Historia Natural

En primer lugar se debe colectar la mayor información posible de la especie, identificando y aprendiendo sobre sus comportamientos y necesidades que se presentan en la naturaleza.

También es necesario tener información previa de los individuos particulares con los que vamos a trabajar, como por ejemplo su historia de vida, la cual se puede solicitar tanto a antiguos como presentes cuidadores, personal veterinario o del área de biología o, en el caso de ser un ejemplar proveniente de otra Institución, solicitando dicha información a la misma.

Es importante a la hora de idear y planificar un programa de enriquecimiento tener en cuenta dicha información, dado que con ella se van a identificar las necesidades básicas del animal y así, luego se podrán tomar decisiones acertadas en cuanto a que Enriquecimiento Ambiental (E. A.) implementar, refiriéndonos a E. A. tanto en lo que respecta a las actividades de enriquecimiento como a las ambientaciones a realizarse en el recinto.

En el caso particular del yaguareté, sus hábitos mayormente nocturnos se ven alterados ya que, como anteriormente se mencionó, en condiciones controladas suelen tener acceso a los exhibidores solo durante el día, a su vez, estos animales también de costumbres solitarias a veces son confinados a compartir pequeños recintos con otros congéneres. Estas, como otras alteraciones con respecto a su ambiente natural hacen que los felinos en condiciones controladas suelan presentar comportamientos estereotipados, entendiendo a estos como “una secuencia de movimientos repetida y relativamente invariable, que se realiza sin ningún propósito aparente” (Fraser y Broom, 1990), conductas autodestructivas o anormales, entre las que se destacan:

- Altos niveles de inactividad.

- “Pacing” es decir caminatas por circuitos definidos. Si uno se detiene a observar los recintos muchas veces se logran identificar dichos “caminos” marcados en el sustrato.

- Revoleos de cabeza.

- Lamido o acicalamiento excesivo de ciertas zonas de su

El yaguareté “José” en su brete del Zoo de Córdoba. Fotos: Gentileza Área de Enriquecimiento del Zoológico de Córdoba. (Izq.: Analía V. Frandino, Der.: Giselle Peñaloza).

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REPORTESTIGREROS SERIE INVESTIGACIÓN 3

Septiembre 2010

Enriquecimiento ambiental en yaguareté (Panthera onca): Una herramienta fundamental para su bienestar en cautiverio.

cuerpo.

- Obesidad y/o trastornos alimenticios.

Pequeños recintos sin ambientaciones adecuadas, ruidos constantes y la carencia de estímulos novedosos en el ambiente pueden contribuir a que se manifiesten estos comportamientos, como así también las alimentaciones programadas, donde se alimenta al animal todos los días en un mismo horario, generando de esta forma “expectativa” en el individuo haciendo que el mismo se condicione esperando que se le alimente a cierta hora y provocando muchas veces estereotipos en zonas cercanas a donde se lo alimentaría.

Observación

Una vez incorporada esta información es fundamental pasar a la primera etapa de recolección de datos, comenzando con la observación del o los individuos con los que se va a trabajar, registrando y tomando nota de todos sus comportamientos

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