Experimentos De Pasteur

Pasteur:

Estudios sobre generación espontánea

Cap. II:

Experimento para probar que hay muchos y muy variados microorganismos en el aire (fig. 1, pág. 43):

• Filtrar un volumen de aire determinado a través de algodón pólvora, soluble en una mezcla de alcohol y de éter.

• Las fibras de algodón detienen las partículas sólidas.

• Luego de un reposo prolongado (un día), las partículas sólidas caen al fondo del licor.

• Se las somete a algunos lavados (por decantación). Entre cada lavado, debe haber un reposo de 12 a 20 horas.

• Se las observa en el microscopio. Se pueden utilizar distintos reactivos.

• Hay constantemente en el aire común un número variable de corpúsculos, cuya forma y estructura denota que son organizados. Son diversos, por lo tanto pertenecen a distintas especies.

Resultado: un pequeño taco de algodón expuesto durante 24 horas a la corriente de aire de la calle, tomada a algunos metros de distancia del suelo, reúne varios millares de corpúsculos organizados, con una aspiración de un litro de aire, aprox., por minuto.

Cap. III:

Experiencias con el aire calcinado (experimento de Schwann; fig. 10, pág. 54):

• En un matraz de 250 a 300 cm3, introducir de 100 a 150 cm3 de un agua azucarada albuminosa.

• Se hierve el líquido durante 2 o 3 minutos.

• Se lo deja enfriar por completo.

• Se lo llena de aire ordinario a la presión de la atmósfera.

• Se cierra con la lámpara el cuello del matraz.

• Se lo coloca en una estufa a 30°.

• Sus características permanecen inalterables: limpidez, olor, acidez débil.

• Con el tiempo, su color se oscurece debido a la oxidación del agua albuminosa.

• Si se abandona la mezcla al aire ordinario en vez de calentarla, después de un día o dos, se encuentra en vías de alteración manifiesta, y aparece llena de bacterias, vibriones o cubierta de mucores.

Resultado: el agua azucarada, alterable al contacto con el aire ordinario, puede mantenerse intacta durante años enteros, cuando es expuesta a la acción del aire calcinado, después de haber sido sometida a la ebullición durante 2 o 3 minutos.

Cap. IV:

Experimento para demostrar que los microorganismos presentes en el aire son fecundos (fig. 12, pág. 64):

• Se toma el matraz que contiene agua de levadura azucarada y aire calcinado, que estaba en la estufa a 25, 30°, sin haber sufrido alteración, desde hace un mes o dos.

• Se adapta la punta del matraz a un determinado aparato.

• Cuando el tubo de platino se pone al rojo por el calorífero de gas, se hace el vacío, después de haber cerrado la llave que conduce al tobo de platino.

• Esa llave se abre después para dejar entrar poco a poco en el aparato de aire calcinado.

• Este mecanismo es repetido entre 10 a 12 veces alternativamente (vacío y entrada de aire calcinado).

• Romper la punta del matraz, sin desanudar los cordoncillos.

• Hacer que se deslice el pequeño tubo de los polvos en el matraz.

• Cerrar con la lámpara el cuello del matraz, que es colocado nuevamente en la estufa.

• Comienzan a aparecer producciones en el matraz después de 24, 36, hasta 48 horas después (mismo tiempo necesario para que aparezcan esas mismas producciones en el agua azucarada cuando se deja expuesto al aire común).

• Reemplaza en el experimento el algodón por amianto, que ha dado los mismos resultados.

Resultados: todas las producciones organizadas que se forman con el aire ordinario en el agua azucarada albuminosa, previamente sometida a la ebullición, tienen por origen las partículas sólidas que se encuentran en suspensión el aire.

Además, si el aire calentado puesto en presencia de una conserva de Appert formada por el agua azucarada albuminosa no se altera, como ha comprobado el doctor Schwann, es que el calor ha destruido los gérmenes que dicho aire acarreaba.

Cap. V:

Mismo experimento que el capítulo IV realizado en otras sustancias (orina y leche):

Leche (agua azucarada albuminosa con carbono de cal):

• Se prepara un matraz de leche.

• La ebullición

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