KARL MARX Y EL SOCIALISMO CIENTÍFICO

KARL MARX Y EL SOCIALISMO CIENTÍFICO

En Treveris, Prusia en 1818, era hijo de unos padres judíos de la clase media que se habían convertido al cristianismo; a la edad de diecisiete años, el joven Marx ingreso en la universidad de Bonn como estudiante de derecho. El padre de Marx lo saco de la escuela al año siguiente y lo matriculo en la universidad de Berlín, durante el tiempo de su formación en Jurisprudencia y economía política cayó bajo la influencia de Hegel y Feuerbach, cuyas ideas contribuyeron a conformar sus propias visiones de la historia, la religión y la sociedad.

En 1842 asumió el puesto de editor de la Reinische Zeitung, fue a parís donde comenzó a estudiar economía sistemáticamente en especial a Smith y Ricardo. Entre tanto Marx era deshonrado en su propio país, el gobierno prusiano le declaró culpable de traición en 1844, impidiéndole el regreso a su país natal. Marx y su familia se establecieron en Londres donde iba a permanecer durante el resto de su vida, los detalles de la vida personal de Marx revelan el desconsuelo de toda clase de advertencia incluyendo la pobreza más abyecta y el atormentante exilio político.

Lo que se encuentra en el pensamiento maduro de Marx, es una teoría de los procesos históricos, basada en las fuerzas económicas y materiales y que culmina en el cambio económico y social del orden existente. Marx consideraba que el primer motor de la historia es la manera como los individuos s buscan la vida, esto es la manera en que satisfacen sus necesidades materiales, “los hombres deben poder vivir para hacer historia”, por lo tanto el primer acto histórico es la producción de los medios para satisfacer estas necesidades la producción de la propia vida material. La producción por su puesto no es solo un acto histórico, sino también un acto económico y forma parte de la unicidad de Marx, que el comprendió claramente apreciado las interrelaciones entre economía e historia, la identificación que estableció Marx, y su exposición de la producción como la fuerza central y motriz de entre las fuerzas mutuamente condicionantes de la producción la distribución, la economía se convierte en la ciencia de la producción. Marx afirmaba que los métodos de producción contribuyen a conformar la propia naturaleza humana.

Los individuos son tal y como manifiestan su vida. Lo que son los individuos coincide con lo que producen como con el modo como producen. Lo que los individuos son depende por tanto de las condiciones materiales de producción. Marx reconocía que el desarrollo de las fuerzas productivas en toda economía depende del grado alcanzado por la división del trabajo, pero Marx vio un conflicto de intereses como resultado lógico de la progresiva división del trabajo. Así pues surge un nuevo conflicto, los intereses individuales se oponen a los intereses comunitarios y todo trabajador viene a estar encadenado a un puesto de trabajo específico, con el tiempo el trabajo de los humanos se convierte en un poder ajeno que se opone a ellos y los esclaviza. El estado debe su existencia a las clases sociales ya determinadas por la división del trabajo.

La situación se hace intolerable cuando se cumplen dos condiciones, primera la gran masa de la humanidad tiene que ser desposeída de la propiedad mientras que la simultáneamente se enfrenta con la contradicción de la existencia de un mundo de riqueza y cultura. Segunda el desarrollo de las fuerzas productiva tiene que ser universal.

Las fuerzas productivas desarrolladas por medio de la división del trabajo capital y tecnológico casa una de las cuales está cambiando constantemente en cantidad o calidad como resultado de los cambios en la población. Los descubrimientos en el curso de la producción de su vida social, los humanos entran en ciertas relaciones definidas que son indispensables e independientes de voluntad relaciones de producción que correspondan a una determinada etapa del desarrollo de sus fuerzas productivas materiales. Estas reglas de juego capitalista son esencialmente estáticas y son de dos tipos las relaciones de propiedad y las relaciones humanas. Es la suma total de estas relaciones lo que constituyen la estructura económica de la sociedad sobre la cual se sobrepone una superestructura política y legal que corresponde a unas formas definidas de conciencia social. Las fuerzas dinámicas de la producción entran en conflicto con las relaciones estáticas de producción, cuando este conflicto alcanza un punto suficiente se producen la lucha de clases y la revolución y la pirámide de la sociedad de invierte, desde su vértice superior hasta su base. El modo de producción de la vida material condiciona el proceso de la vida social política e intelectual en general, la realidad social en la que determina su conciencia. Una sociedad no desaparece nunca antes de que sean desarrolladas todas las fuerzas productoras que pueda contener. La obra más grande de Marx el capital es claramente de un análisis del capitalismo.

Marx ya expresaba en sus manuscritos la idea de que el trabajo es la fuente de toda riqueza, el trabajador obtiene solo una pequeña parte de esta riqueza, apenas suficiente para continuar trabajando. La parte de león del producto del trabajo ya al capitalista. En el capitalismo el trabajo se convierte en una simple mercancía y todas las relaciones humanas se reducen pronto a las relaciones monetarias, en estas relaciones el capitalista enriquece inevitablemente a expensas del trabajador, que vive a un nivel de subsistencia. Marx advertía una tendencia hacia la concentración monopolística del capital en un número de manos cada vez menor; esta tendencia lleva a un aumento de los beneficios totales y aun aumento de la miseria global de la clase trabajadora. Con el tiempo las contradicciones internas del sistema capitalista llevarían a su liquidación criticaba a los economistas por no explicar las causas subyacentes del capitalismo, y es preciso también como se llega al mecanismo del mercado y hacia dónde va este, le parecía esencial aprehender la relación. La devaluación de los trabajadores se produce en proporción directa al valor creciente de las mercancías y en el proceso los trabajadores se enfrentan con los objetos de su trabajo (mercancías) como son cosas exteriores así mismos cosas sobre las que, una vez, acabadas, ellos ya no pueden ejercer ningún control ni poseer, ninguna propiedad; en tanto que cosas ajenas se han convertido en un poder independiente de su productor. Criticaba la economía por ocultar la alineación inherente a la naturaleza del trabajo, por no considerar la relación directa entre el trabajador y la producción, esta relación es el sello de la economía marxiana y la característica que la distingue de la economía clásica. Marx criticaba

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