La historia una nueva perspectiva

LA HISTORIA UNA NUEVA PERSPECTIVA.

Dentro de las lecturas estudiadas, ¿Qué es la historia ahora?, los caminos de Clio y pensar históricamente vamos comprendiendo que la historia la formamos día a día y todos los sucesos se convierten en importantes ya que forman parte del pasado. Comenzaremos por definir que es la historia, podemos decir que es la ciencia que trata de comprender como fue realizado este mundo y se dedica a su estudio.

Al ir trazando nuestra vida vamos dejando huellas, a través de las cuales el historiador puede ir recuperando las acciones sucedidas. Por lo que su campo de estudio es el pasado, en concreto el pasado del hombre. Sin embargo la Historia fue elaborada para el análisis de las acciones del ser humano en el pasado. Pero esta no es una simple reunión de datos adquiridos. ¨La historia es la experiencia acumulada de la humanidad¨.

En el texto ¿Qué es la historia ahora? El autor E. H. Carr pasó por muchos campos y diferentes temas como el diálogo continuo y constante al considerarlo importante, para en un momento poder mejorar el futuro. Richard J. Evans hace énfasis en lo siguiente: “Para Carr, el objetivo de tal proyecto era ayudar a la sociedad humana a comprender el presente y moldear el futuro. El pasado sólo interesaba en la medida en que contribuía a esa tarea.” El libro de Carr despertó la expectación y la inquietud en la generación del baby-boom que vio en la historia una esperanza para luchar y avanzar hacia un futuro mejor. Como todo pensamiento pasó, por decirlo así, a la historia en la época de los 80 en el tiempo que el comunismo sufrió un colapso. “Estos hechos destruyeron no sólo las grandes teorías y teleologías que Carr había incitado a los historiadores a adoptar, sino también cualquier idea mediante la que pudiera considerarse que la historia tenía una única dirección y un único propósito”.

Se piensa que la historia no tiene por qué tener una única dirección, ni seguir una guía o un propósito ya que todo tiene diferente final y al fin y al cabo todo tiempo que pasa es historia, hasta lo más simple.

Podemos decir que otra de las ideas es la de las nuevas tecnologías en el estudio que viene surgiendo del siglo XXI. Las nuevas tecnologías como el internet ha permitido el acceso a la información, aunque a veces no sea la correcta, es un avance que en tiempos del autor Carr no existía. También tenemos la radio, la televisión y también el cine que son medios de comunicación, en el cine tenemos claros ejemplos de historia ya que muchas veces se utilizan para hacer películas de tiempos pasados. Como indicaba Evans “El auge actual de la historia en los medios de comunicación puede que esté cambiando por fin esta tendencia a la baja”, el desinterés de la gente hacia la historia es muy evidente y al contrario de lo que piensa Evans, a pesar de haber un poco de interés al incluir películas de temas históricos si no ven acción en dichas películas no les llama la atención. Evans se pregunta si este modelo de ver la historia es semejante a como la veía Carr, podemos decir que no, ya que en los tiempos de Carr no existían los avances que vemos hoy en día y no se planteó la historia vista de esta manera.

Otra de las ideas sobre las que hace referencia Evans en las subdisciplinas al igual que Carr es la historia social como una manera general de hacer la historia, algunos historiadores lo consideraban así pero en la actualidad se ha perdido ese concepto y en su lugar los historiadores sociales se han establecido como subespecialidad dentro de la disciplina

Igual que ha pasado con la historia social ha pasado con las demás subdisciplinas y al final la historia ha quedado dividida en un montón de especialidades que sólo se centran en ellas mismas, no colaboran y deberían ir relacionas de la mano una con otras.

Otra de las idea que podemos destacar y que consideramos de importancia es que todos los cambios que han producido las nuevas tecnologías y la evolución del siglo XXI han llevado a los historiadores a retomar la historia de los pueblos que durante años han estado sumergidos en las sombras de los grandes acontecimientos y los grandes personajes, como dice Felipe Fernández-Armesto. “Gracias, entretanto, a la revolución cultural y demográfica los historiadores se han sentido liberados y equipados para acometer algunas de las nuevas exploraciones que Carr previó y a las que dio la bienvenida: estudiar la historia de los pueblos que antes se consideraban “sin historia”. Destacar la historia como algo que nos afecta a todos, a toda la sociedad e individuos, es algo que ha formado, forma y formará parte de nuestra vida, la historia la construimos nosotros con cada paso que damos y eso es algo que no debemos olvidar. Porque la historia no solo está presente en aquel que trabaja si no en cada uno de los días que vivimos a diario, Según Fernández-Armesto, “Ya no sé lo que es ser joven, pero es maravilloso estar vivo en un amanecer como el nuestro, cuando ser historiador es ser parte de una comunidad productiva de eruditos sin precedentes”, porque no debemos olvidar que ser historiador no es una profesión vana en nuestro tiempo, porque no nos debe de importar lo que fue o es ahora la historia, nos debe de importar que siempre será historia. Decimos entonces que el preguntarse ¿qué es la historia? Tiene que ser una pregunta para todos no sólo para los profesionales, “la historia es algo que abarca todo, sin reservas, es la más abierta y accesible de las disciplinas académicas”.

Dentro de la historia se puede encontrar diferentes tipos de la historia misma como:

La historia de bronce, que decimos que divide a los actores sociales en buenos y malos que intervienen en los hechos significativos. Es la preferida por las instituciones gubernamentales, haciéndolo oficial, ya que ayuda a mantener el sistema de poder establecido y a manejarse como instrumento ideológico que justifica la estructura dominante.

También podemos hablar de la historia cuantitativa ésta se auxilia de la economía y la estadística, generando listados que ofrecen datos numéricos, aunque deja de lado variantes del orden cultural. La historia crítica Identifica los intereses de grupos definidos, este tipo de conocimiento intenta romper formas de dominio de un grupo sobre otro y se relaciona con el proceso científico de investigación.

Se considera de igual manera importante en la historia la anticuaria como un relato con pretensión científica, colindando con una narración de tipo literaria, manejada por los cronistas

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