La sombra detrás de la estructura del ADN.

UNIVERSIDAD COLEGIO MAYOR DE CUNDINAMARCA

BACTERIOLOGÍA Y LABORATORIO CLÍNICO

La sombra detrás de la estructura del ADN

Presentado por

Natalia Bastidas Herrera

15- 02 - 2017

La sombra detrás de la estructura del ADN.

Uno de los grandes momentos de la historia de la ciencia y la genética, fue el descubrimiento de la estructura del ADN. Donde en 1953, el bioquímico estadounidense James Watson y el biofísico británico Francis Crick publicaron en la revista NATURE la primera descripción de la estructura del ADN, proponiendo que se disponía en forma de una hélice doble; describiendo textualmente: “No se nos escapa que el emparejamiento específico que proponemos surgiere de manera inmediata un posible mecanismo de copia del material genético” (Watson & Crick, 1953); señalando la posibilidad de que parcial o total la información genética de cualquier organismo está ubicada en los ácidos nucleicos, generalmente en el ADN.

Es preciso aclarar que encontrar la estructura del ADN no fue un proceso sencillo ni que fue obra solamente de los estudios de estos dos investigadores, gracias al aporte de otros hombres de ciencia se logró llegar a esta estructuración tridimensional que conocemos el día de hoy. Es allí donde la frase de Isaac Newton en su carta a Robert Hooke en 1676 cobra sentido, si he visto más lejos es porque esto sentado sobre los hombres de gigantes.

En 1950, a Rosalind Franklin le fue concedida la beca “Turner y Newall” para trabajar en la Unidad de Biofísica en el King´s College de Londres; por indicaciones del jefe del laboratorio, Maurice Wilkins, Franklin inicio una investigación sobre el ADN con el doctorando en ese momento Raymond Gosling; generando malentendidos y una relación deteriorada entre Wilkins y Franklin tan solo llevando 6 meses de trabajo en 1951.

 Franklin, física -química y cristalógrafa especializada en la difracción de rayos X que trabajando con Gosling fue tomando fotos de difracción de rayos X del ADN cada vez más nítidas, cuya contribución fue la famosa fotografía 51 que mostraba la dispersión de los rayos X producidos por el ADN, revelaban dos estructuras de formas- seca (A) y la hidratada (B)-  se dio cuenta que la forma B era posiblemente una estructura helicoidal pero su análisis matemático de la forma A no indicaba lo mismo. A su vez, Franklin se aupó a hombros de otro gigante, Willian Astbury.

Fue en 1937 cuando W. Astbury físico inglés y biólogo molecular introdujo el uso de la técnica de difracción de rayos X para sondear la estructura de macromoléculas biológicas y realizo los primeros estudios en el ADN. Alcanzo el éxito de su investigación en 1951: su equipo obtuvo fotografías con esta técnica del ADN que mostraba un patrón cruciforme, pero sin gran nitidez que, dos años después, sería un gran descubrimiento en la historia de la ciencia.

James Watson en el año de 1952, asistió a una conferencia de M. Wilkins celebrada en Nápoles, donde Wilkins mostro una seria de fotografías que recogía los motivos generados cuando las moléculas de ADN dispersaban haces de rayos X. Tal regularidad lo convenció de que en esa estructura estaba la información genética.

De esta manera comenzó a trabajar en Cambridge con F. Crick en el laboratorio a cargo de Lawrence Bragg, construyendo modelos hipotéticos de una molécula de ADN. Watson y Crick deseosos de averiguar cuanto pudiesen de los descubrimientos en el King’s College, se comunicaban frecuentemente con Wilkins. Y enterados de la publicación por Linus Pauling de un modelo de tres hélices, uno de sus más grandes rivales en la ciencia, decidieron que iban a resolverlo antes de que Pauling o cualquier otro lo hiciese; empezando con la carrera por la doble hélice.

Watson deja claro en su libro de autobombo (“La doble hélice”) de 1968, que una tarde a mediados de enero de 1953 Wilkins no solo le comentó los resultados de Rosalind Franklin, sino que le mostró la foto 51, sin que ella tuviera el conocimiento de esto. Watson y Crick también conocían un informe sobre la forma B que Rosalind había enviado para una evaluación, algo que debiera ser confidencial, pero que Max Perutz miembro del comité del MRC (Material de Referencia Certificado) que evaluaba el trabajo en el laboratorio de Randall de King´s College debió filtrar sin muchos miramientos.

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