La teoría del Conocimiento.

     Desde hace varios siglos se han manifestado una serie de controversias frente al problema de la intuición. Se observa que en la filosofía contemporánea se ha generado discrepancia y tal es el caso del Neokantismo, el cual toma una ruda repulsión. La opinión de Hermann Cohen, fundador de la escuela de Marburgo y líder del Neokantismo,  fue que la intuición era una ilusión y, por ende, la viva contradicción del pensamiento científico. Según su criterio, nunca se debía de tomar en consideración como un medio metódico de conocimiento. La opinión del realismo crítico frente a la intuición también se señala como  negativa, desde la perspectiva de Joseph Geyser era un concepto sumamente equívoco y por ello defendía que el conocimiento se fundamenta en una intuición racional. En contraparte, representantes del mismo realismo crítico hicieron a la intuición mayor aprobación como  August Messer quién sostuvo que  aprehendemos de un modo inmediato, intuitivo, no solamente los valores estéticos, sino también los éticos. Del mismo modo para Henri Bergson “el intelecto es incapaz de penetrar en la esencia de las cosas. Sólo puede aprehender la forma matemático‐mecánica de la realidad, no su núcleo y contenido íntimo. Sólo la intuición puede aprehender éste.”

     La forma en cómo se piense del hombre dependerá en admitir o no un conocimiento intuitivo junto al discursivo-racional, en este sentido si se contempla al hombre como un ser teórico, cuya principal función es el pensamiento este sólo admitirá un pensamiento racional, en cambio quien ponga el centro de gravedad del hombre en el lado emocional  y volitivo tenderá a reconocer en el hombre otras clases de aprehensión de objetos. Por consiguiente el centro de gravedad del ser humano no reside en las fuerzas intelectuales sino en las emocionales y volitivas. Es por esto que Wilhelm Dilthey atacó con energía al racionalismo e intelectualismo y coloca al lado del conocimiento discursivo-racional otro al que denominó intuitivo-irracional. Un punto donde la intuición es menos discutida es en la esfera estética, es decir, la intuición estética. Ésta no puede   percibirse intelectual ni discursivamente sino sólo emocional e intuitivamente, de cualquier otra forma sería un fallo.

     Pese a la existencia de dos conceptos claves de la verdad, denominados concepto transcendente y concepto inmanente. El primero, es el aceptado por el realismo y dice: la verdad del conocimiento consiste en la concordancia del contenido del pensamiento con el objeto. El segundo está fundamentado en el idealismo y por ello es rechazado ya que los planteamientos están a favor del realismo. El criterio de la verdad tiene correlación con el concepto de la verdad y puede evidenciarse si examinamos el idealismo lógico ya que su concordancia está en la ausencia de contradicción y es por ello obliga necesariamente a la admisión de la ausencia de contradicción como criterio único de verdad.

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