Los cambios referente en la edad con el sistema inmune contribuye a aumentar la susceptibilidad en personas mayores a enfermedades por infección, fracaso en vacunas y posiblemente autoinmunidad y cáncer.
Enviado por Eyre Freites • 8 de Marzo de 2017 • Reseña • 3.122 Palabras (13 Páginas) • 515 Visitas
BIOLOGIA DEL ENVEJECIMIENTO
Los cambios referente en la edad con el sistema inmune contribuye a aumentar la susceptibilidad en personas mayores a enfermedades por infección, fracaso en vacunas y posiblemente autoinmunidad y cáncer. La inmunoescencia afecta a tipos celulares tanto en la medula ósea como en el timo, maduración de los linfocitos en la sangre periférica y órganos secundarios linfáticos, como también en elementos en el sistema inmune innato. El sistema inmune se puede dividir en 2 grandes grupos: un grupo innato que consta de monocitos, natural killers y células dendríticas, mientras que el otro grupo que se considera un grupo adaptativo está compuesto de los linfocitos B y T. Generalmente ambos grupos son afectados por el proceso de envejecimiento pero se ha demostrado que el grupo adaptativo es aquel que sufre un mayor detrimento dependiente de la edad.
ENVEJECIMIENTO EN EL COMPARTIMINETO DE CELULAS PROGENITORAS O STEM CELL HEMATOPOYETICAS Y CELULAS PROGENITORAS LINFOCITICAS
Las células del sistema inmune se encuentran en constante renovación por parte de las stem cell del sistema hematopoyético pero su capacidad de renovación y cantidad total de tejido hematopoyético va disminuyendo a medida que se avanza en edad. La habilidad de las stem cell humanas de proliferar se encuentra inversamente proporcional con la edad, ya que posiblemente exista un acortamiento de los telómeros a medida que pasa el tiempo. De manera interesante, el aumento en la edad no afecta a las células progenitoras de los linajes mieloides y eritroides pero si afecta de manera significativa al desarrollo de las células B, ya que se observa una poca cantidad de células pro-B generadas y solo algunas de ellas logran los siguientes estadios de diferenciación y maduración trayendo como consecuencia un disminuido número de células B maduras en la medula ósea. Por otra parte, los precursores de los linfocitos T derivados de la medula ósea y que migran hacia el timo para su maduración se ven menos afectados por el proceso de envejecimiento pero su disminución en cantidad a medida del paso del tiempo no se encuentra realmente relacionado con una disminución en su proceso de maduración per se sino mas bien por una involución del Timo con respecto al envejecimiento del organismo.
ENVEJECIMIENTO DEL SISTEMA INMUNE ADAPTATIVO
LINFOCITOS T
La maduración de los Linfocitos T se da en el Timo, el cuan está conformado por una serie de lóbulos que presentan una corteza externa densamente constituida por timocitos y una medula que presenta poca cantidad de timocitos. Durante la diferenciación estas linfocitos T migran desde la corteza hacia medula para luego salir del timo hacia la sangre periférica. Uno de los cambios más drásticos en la inmunoescencia es la involución de Timo, el cual esta caracterizado por una disminución en el tamaño del órgano y el reemplazo de la corteza y medula del mismo por grasa. También el espacio perivascular del timo disminuye en volumen y por tanto la timopoyesis decrece. Estos cambios observados en el órgano comienzan a temprana edad y se ven finalizados alrededor de los 40 o 50 anos, y como consecuencia el número de células T disminuye. Por otra parte, diversos compartimientos de células T CD 4+ nativas son mantenidos por décadas a pesar de la atrofia del órgano y su decaimiento en cantidad se ve a partir de los 70 anos. Lo mismo se observa en la subpoblación de CD 8+ pero su disminución si se observa edades un poco más tempranas. Por definición, las células T nativas deben proliferar por estimulación de las células dendríticas en combinación con antígenos. En personas mayores, estas células nativas presentan una gran cantidad de defectos funcionales, como: telómeros más cortos, una pequeña cantidad de receptores, producción reducida de interlukina 2 (IL-2) y una discrepancia entre expansión y diferenciación a células efectoras. Es por ello, que una respuesta inmune ante nuevos antígenos se encuentra disminuida.
Alrededor del 30% de las personas mayores sanas, una población de células T no regulatorias de CD8+CD45RO+CD25+ producen IL-2 y una gran cantidad de receptores, los cuales comparten características fenotípicas y funcionales con células T nativas de personas más jóvenes. Es por ello, que estas células T CD8+CD45RO+CD25+ compensan la falta de funcionalidad de las células T nativas en edades muy adultas y representan un buen biomarcador de competencia inmunológica en personas mayores.
La relación entre la disminución de células T nativas y la edad está asociado con el incremento en el número de células de memoria (memoria a un antígeno en particular) y las células efectoras. La generación defectuosa de niveles de anticuerpos luego de una vacuna en edades mayores se correlaciona con la acumulación de células T CD8+ efectoras. Estas células desarrollan cambios fenotípicos como la perdida de moléculas CD28 coestimuladoras (CD28¯), el cual es factor predictivo de incompetencia inmune. En el caso de células T CD4+ esta deleción de la molécula CD28 ocasiona un defecto en la expresión de CD40L, el cual le confiere en circunstancias normales a esta célula la capacidad de ayudar en la proliferación de las células B y producción de anticuerpos. Las células CD28¯ en general producen citoquinas proinflamatorias, a demás presentan una capacidad proliferativa limitada, telómeros cortos y una alta resistencia a la muerte celular programada y diversidad restringida de células T.
Factores que aceleran el envejecimiento en las células T
Exposición repetida a antígenos modela el pool de células T. Muchos virus han desarrollado estrategias para poder coexistir con sus hospederos y establecer una infección permanente en los humanos. Como ejemplo de esto tenemos al Citomegalovirus (CMV), el cual es un virus herpes que infecta entre el 60 y 100% de la población humana y se mantiene persistente. La infección primaria como la latencia se caracterizan por presentarse como asintomático en hospederos inmunocomprometidos. En el caso de personas Cero-Positivas y en pacientes inmunosuprimidos debido a un trasplante, el balance entre el sistema inmune y el virus se ve alterado dejando que la reacción viral y la enfermedad aumente en probabilidad y por tanto ocasiona una alta tasa de morbilidad. Esto es porque las células T se encargan del control en la replicación viral, diseminación y enfermedad.
Tanto el CMV como el envejecimiento conllevan a cambios en las características de las células T CD8+ y en la acumulación de células T CD8+ efectoras con fenotipo CD28¯.
Existen numerosos patógenos humanos que se mantienen luego de la primera infección pero la familia de patógenos mas asociada con la expansión de células T en personas mayores es la familia Herpesviridae, siendo los más importantes: el Herpes Virus (HSV), Virus Epstein-Barr (EBV) y Citomegalovirus (CMV). De todos ellos, es el CMV el que se destaca ya que este tipifica aquellos factores que contribuyen con el envejecimiento de las células T.
...