Macroentorno

Macroentorno:

El nivel de la ciencia, tecnología e innovación en el Perú en insuficiente debido principalmente porque el Estado no tiene como prioridad invertir en este sector, del mismo modo los principales empresarios no están interesados en este mercado. Esta es una de las razones fundamentales por las que Perú está a la zaga en relación a otros países vecino de Sudamérica.

El país que más invierte en Latinoamérica es Brasil, con un presupuesto de $24210 millones de dólares, seguida por México, con $5839 millones, Argentina, con $3840 millones y Chile con 965 millones. En este contexto, Perú solo invirtió 240 millones de dólares, uno de los más bajos capitales.

El Consejo Nacional de Educación, encargada de mejorar la investigación, el desarrollo e innovación en el país, pone como primera propuesta para combatir esta realidad de poca inversión en tecnología, otorgar becas de pre y postgrado para carreras de ingeniería y ciencias, además de incentivos que haga atractiva las actividades de investigación. De otro lado, incentivar a los empresarios para la inversión en investigación con facilidades tributarias. De otro lado, una propuesta de valor sería la creación del Ministerio de Ciencia y Tecnología, cuyo proyecto ya está en el Congreso Nacional, pero que necesita financiamiento.

De cualquier modo, según Montero (2013) “Perú ha subido tres puestos en el ranking mundial de la Sociedad de la Información (NRI), que anualmente elabora el World Economic Forum, pero aún se encuentra bastante rezagado respecto a los países líderes de Latinoamérica, principalmente porque no puede superar las dificultades para dar acceso a la población a contenidos digitales y por la excesiva regulación en el sector.”

Podemos observar de este modo, que aunque el nivel de tecnología en Perú es bajo, no se debe al poco interés del mercado, sino a la excesiva regulación de este mercado y las excesivas tarifas para acceder a él.

Microentorno

El mercado al que se apunta según nuestra investigación se consideraría como mercado del consumidor final; por lo tanto es importante conocer el comportamiento de nuestros potenciales clientes. La demanda es latente pues una parte importante del mercado tiene la necesidad intensa de encontrar un cargador inalámbrico. El producto pertenecería al segmento movilidad. De otro lado, nuestra investigación apunta a que la tecnología de transmisión de información y otras tecnologías van a ir creciendo así como su popularidad y su uso.

Creemos que así como Intel está desarrollando este tipo de tecnología podríamos desarrollarla también, quizá de manera más rustica pero sencilla y fácil de adquirir. Este producto sin duda hará una gran revolución en lo que es cargas de batería y energía.

Las reconocidas marcas Nokia, Google y Samsung tienen su propio cargador inalámbrico. Nokia fue de los primeros

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