Para poder hablar de los animales, tenemos que empezar nombrando a los seres vivos y para poder distinguir a un ser vivo de algo que no lo esté

Introducción.

Para poder hablar de los animales, tenemos que empezar nombrando a los seres vivos y para poder distinguir a un ser vivo de algo que no lo esté tenemos que tener en cuenta ciertas características como por ejemplo las respuestas a estímulos, que cuenten con una o más células, que se reproduzcan, que se alimenten de otro organismo vivo, que se adapten al ambiente y otras más.

Podemos dividir a los seres vivos en 5 grandes grupos, animales, plantas, hongos moneras y protistas, aunque los últimos dos pueden juntarse en un grupo llamado microorganismos.

Aunque podríamos definir y dar características de cada uno de los grupos, solo vamos a hablar del reino animal. Los animales pueden ser agrupados también  según su reproducción, su pelaje, o su respiración, pero  lo primero que hay que tener en cuenta para agruparlos es la presencia o ausencia de la columna vertebral. Esta es un largo eje que corre el cuerpo y está formada por varias piezas llamadas vertebras. Esta columna vertebral forma parte del esqueleto, y sostiene a algunos animales. Entonces teniendo en claro lo que es la columna vertebral estamos dispuestos a dividir a los animales en vertebrados, poseen columna vertebral, y los invertebrados, carecen de ella.

Estos a su vez se subdividen, por ejemplo, los invertebrados se dividen en 7 grupos, los poríferos, como las esponjas, los cnidarios que incluye a los corales, los platelmintos un claro ejemplo es la lombriz solitaria, los anélidos que incluye a la lombriz, los moluscos como por ejemplo el caracol, los artrópodos como lo es el cangrejo y por último los equinodermos que incluye al  erizo o estrella de mar. En cambio, los vertebrados se dividen en 5 grupos, los peces, el tiburón es uno de ellos, los anfibios que incluyen las ranas, los reptiles como las víboras, las aves como el loro y por último los mamíferos que nos incluye a nosotros.

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Invertebrados.

Los animales que no poseen un esqueleto interno de hueso o cartílago  reciben el nombre de invertebrados. Considerando sus diferencias, los animales sin estructura de sostén se pueden clasificar en 7 subgrupos.

1. Poríferos: las esponjas, o poríferos, son organismos muy sencillos que habitan el planeta tierra desde hace miles de millones de años. El cuerpo de estos animales tiene la forma de un saco. Se alimentan filtrando alimentos del agua que pasa por sus cuerpos a través de pequeños poros o agujeros. Todos los representantes de este grupo son acuáticos.  Básicamente constan de una cavidad interna que comunica al exterior por un conjunto de poros (de ahí su nombre de poríferos) y por una abertura mayor llamada ósculo. Las esponjas se reproducen asexual o sexualmente. La reproducción asexual se realiza por gemación, es decir, una pequeño yema se diferencia en el cuerpo de la esponja parental para desarrollarse y formar una esponja joven, que puede crecer independientemente o permanecer unida a la esponja como un nuevo miembro de la colonia. Ejemplo: esponjas.

1. Cnidarios: son un filo de animales invertebrados relativamente simples que viven en hábitats acuáticos. El término alude a la presencia de cnidocitos, unas células exclusivas de estos animales que utilizan normalmente para atrapar a sus presas y que son capaces de causar irritación en otros animales. En este grupo se encuentran las medusas, los corales y las anémonas. Las medusas son animales marinos móviles con cuerpo en forma de paraguas y largos filamentos o tentáculos. Los corales y las anémonas son animales sésiles, es decir, inmóviles, que pasan sus vidas adheridos a rocas o al suelo marino. Ejemplo: corales.

1. Platelmintos: estos son aplanados dorsiventralmente y tienen simetría bilateral, su cuerpo es blando y no presentan segmentación. La mayoría de ellos tienen un tamaño microscópico y los que son más grandes son extremadamente finos. El espacio entre la piel y los pocos órganos de que disponen está llenado con tejido mesodérmico conocido como mesénquima, un tejido conectivo lleno de células y de fibras de colágeno. Los platelmintos presentan diferencias morfológicas y fisiológicas dependiendo del medio que habiten ya que sus cuerpos están totalmente adaptados a los diferentes hábitats. Se distinguen dos tipos formas de vida: los de vida libre y los parásitos.

1. Anélidos: Su nombre procede de la característica más llamativa de su cuerpo, los anillos. Cada uno de estos anillos es en realidad un metámero, un segmento del cuerpo que se repite a lo largo de todo el organismo y que contiene todos los órganos mesodérmicos. Pueden vivir en medios acuáticos y en medios terrestres. Ejemplo: lombriz.

1. Moluscos: Los moluscos presentan unos sistemas relacionados con la nutrición bastante más complejos que la mayoría de invertebrados inferiores. Destaca especialmente el cerebro de los cefalópodos que es el más complejo de todos los animales invertebrados. Tienen el cuerpo dividido en varias partes: pie musculoso; masa visceral, donde se alojan los órganos internos; manto; y una cavidad paleal, donde se localizan los órganos respiratorios. Viven en ambientes acuáticos o terrestres muy húmedos. Se dividen en gasterópodos (caracoles), bivalvos (mejillón o almeja), y los cefalópodos (sepia, pulpo y calamar).

1. Artrópodos: tienen esqueleto externo. Los artrópodos tienen antenas, patas o piezas bucales. El cuerpo está segmentado y rodeado de un exoesqueleto de quitina. Viven en ambientes tanto acuáticos como terrestres. Agrupa al mayor número de invertebrados. Se dividen en:

• Arácnidos: el cuerpo está dividido en cefalotórax y abdomen. Carecen de antenas poseen cuatro pares de patas y dos ganchos cerca de sus bocas llamados quelíceros. Las arañas, las garrapatas y los escorpiones permanecen a este grupo.
• Insectos: son el subgrupo más diverso de artrópodos. El cuerpo se divide en cabeza, tórax y abdomen. Todos poseen tres patas y un número variado de antenas, algunos tienen alas y vuelan, otros no. Se incluyen las mariposas, los escarabajos, las moscas y las hormigas entre otros.
• Crustáceos: El cuerpo está dividido en cefalotórax y abdomen. Tienen al menos cinco pares de patas y dos pares de antenas que en algunos casos están modificadas formando piezas. La mayoría como el langostino y el cangrejo son acuáticos. Los bichos bolita son los únicos crustáceos que pueden vivir en tierra firme.
• Miriápodos: su cuerpo se encuentra dividido en cabeza, con un par de antenas, y tronco, con numerosos anillos. Cada anillo presenta uno o dos pares de patas. Habitan ambientes aeroterrestre, muy húmedos. Dentro de este grupo se distinguen dos grupos según el número de patas que salen de cada uno de los segmentos del cuerpo: un par en los ciempiés y dos pares en los milpiés.

1. Equinodermos: Se encuentran solo en los mares. Tienen el cuerpo áspero con simetría radial.  Tienen dos lados bien definidos, uno en la parte inferior donde está su boca, y el otro el parte superior más duro.
   El cuerpo de una estrella de mar está dividido en cinco regiones que se disponen alrededor de un disco central. Si uno de sus brazos se rompe, fácilmente se regenera. Los erizos tienen el cuerpo más redondo y está cubierto de espinas o púas. La respiración se efectúa a través de branquias.  Los equinodermos se reproducen sexualmente, mediante fecundación externa. Las hembras expulsan al agua los óvulos, y los machos, los espermatozoides; estos (óvulos y espermatozoides) se unen en el agua y forman unos huevos. De ellos nacen pequeñas larvas que sufren varios cambios (metamorfosis) y después se transforman en adultos. Algunos equinodermos son hermafroditas, es decir, un mismo individuo puede producir espermatozoides y óvulos.

Vertebrados.

Peces.

Cuando hablamos de peces, nos referimos a los primeros vertebrados en aparecer. Estos son característicos de la vida acuática, se encuentran distribuidos en casi todos los hábitat acuáticos: en los mares polares, en donde algunos peces del Antártico viven a temperaturas de -2°c, debido a que el agua no se congela por su elevado contenido en sal y los peces logran sobrevivir porque su sangre contiene una forma de anticongelante biológico, en aguas poco profundas y cálidas de los mares tropicales, en estanques naturales, etc. Llegando a la conclusión, la mayor parte de los peces tienen adaptado sus sistemas homeostáticos para vivir en aguas dulces o saladas.

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