Perri El Ornitorrinco

Por parte de los padres de familia, existe el apoyo constante en actividades de la institución, todos los días llega a la institución un integrante del comité de padres de familia para apoyar al director de la escuela en la instalación del sonido, revisar que las aulas estén limpias, los baños cuenten con agua y/o atender alguna petición o tarea de parte del director.

Además de pasar lista en todos y cada uno de los salones de la institución para revisar que todos los niños hayan asistido a clases, si no es así, se multa a los padres de los niños que no asistieron; este acuerdo se tomó en una asamblea de padres de familia, comento el director.

El punto anterior se me hace importante mencionarlo, porque la deserción o la falta constante de los alumnos a la escuela, es una problemática que aqueja a muchas escuelas y representa todo un impedimento para cumplir con los objetivos y propósitos que tiene la Escuela Primaria; esta problemática queda totalmente resuelta, gracias a las medidas que ha tomado el comité de padres de familia en esta institución, durante mi estancia en la escuela solo falto una niña en dos días pero por motivos de salud.

Quizá en el único aspecto en el que los padres podrían tener mayor atención, es revisar todos los días que sus hijos asistan a la escuela con el material básico para trabajar: lápiz, goma, sacapuntas (nota núm. 12). Muchas veces los niños no tenían con que trabajar y era un problema de todos los días, que no solucione al regalarle lápices a todos, porque al día siguiente era la misma situación, convirtiéndose en una problemática real para el desarrollo eficiente de las actividades.

Un aspecto curioso, que no había vivenciado y que me gustaría mencionar, es que en la escuela primaria no se vende ningún tipo de alimento durante el recreo, sino que las madres de familia llevan el desayuno para sus hijos, lo cual me parece perfecto ya que los alimentos que consumen son preparados en casa y son nutritivos para los niños.

En esta jornada de prácticas, tuve la suerte de trabajar con 19 alumnos con disposición al trabajo, niños alegres, participativos, nadie guardaba una duda comentario o petición, todo lo externaban en el momento adecuado, respetando la participación de cada uno de los compañeros (nota núm. 6).

La apatía hacia el trabajo y las actividades nunca fue ni represento la mínima problemática. Los niños de segundo grado al tener un grado más avanzado y con cualidades muy amplias, no fueron el centro de mi atención en cuando a identificar problemáticas.

Con ellos solo bastaría decir que las pequeñas problemáticas que presenta, serán resueltas con el ejercicio y estudio de temas como el uso correcto de las mayúsculas, signos de puntuación y demás aspectos de ortografía; con este grupo cabria mencionar que, las actividades casi siempre resultan exitosas ya que coopera en todas las tareas

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