Química verde la prevención y el tratamiento de los desechos humanos para reducir la contaminación con soluciones sostenibles

QUÍMICA VERDE: LA PREVENCIÓN Y EL TRATAMIENTO DE LOS DESECHOS HUMANOS PARA REDUCIR LA CONTAMINACIÓN CON SOLUCIONES SOSTENIBLES

Sigla y curso: RP-3204 Técnicas de Investigación Documental.

RESUMEN

Desde la invención del plástico y diversos polímeros pasando por su proceso de manufactura, la contaminación ha venido en un crecimiento exponencial, viéndose reflejada en aumento de la temperatura global, poca densidad de bosques, etc.

Sin embargo, contrario a lo que la población racional podría creer, la educación ambiental es un tema que ha avanzado a pasos muy cortos en comparación con el ritmo de contaminación actual, probablemente debido a diversas malas prácticas que se han heredado al pasar las generaciones, es por lo que el presente trabajo tiene como objetivo evaluar la prevención de la huella humana y posibles alternativas más amigables con el ambiente.

PALABRAS CLAvE

Química verde, huella humana, contaminación, calentamiento global, reciclaje, materia orgánica.

1. iNTRODUCCIÓN

Desde el punto de vista actual, podemos ver las huellas que ha ido dejando el ser humano en el sendero de la historia terrestre, huellas marcadas con la desaparición de acres, extinción de especies, desnaturalización de las aguas, entre otras.

La contaminación, es un problema que se ha acarreado por generaciones, esta varia en las áreas que puede llegar a afectar, sin embargo, todas llegan hasta cierto punto a dañar a una población en específico, por ejemplo: La contaminación del aire es una de las consecuencias de la creciente industrialización y del desarrollo económico asociado con más vehículos, más bienes materiales y más espacio dedicado a las zonas urbanas. (Echeverri Londoño, C. A., 2019., p.87). Esta acelerada contaminación se ha visto impulsada por una creciente población que agota los recursos naturales sin renovarlos, afectando el ambiente en el cual se desarrollan los seres vivios incluyendo la raza humana.

¿Qué hemos hecho mal como especie? ¿Por qué un ecosistema solo se mantiene en equilibrio cuando los humanos no interfieren? Es claro que se han cometido errores a la hora de explotar los recursos, sin embargo, la ciencia y tecnología (piedra angular del futuro), se ha metamorfoseado exponencialmente desde comienzos del siglo pasado trayendo solución a problemas de la vida cotidiana es decir, desde la tercera revolución industrial, junto con la implementación de la producción en serie, se han logrado pasos grandes y más eficientes con relación al desarrollo pero al costo de un desgaste ambiental, por lo que con la llegada del siglo XXI nos planteamos la pregunta, ¿a dónde vamos?.

Nuestro hogar, al no interactuar con otro cuerpo más allá que el mismo se considera un cuerpo cerrado, como bien nos menciona Brown, la tierra en gran escala, es un sistema cerrado, uno que intercambia energía, pero no materia con su ambiente (Brown., et al., 2014., p.771).

Una forma de verlo sería imaginar una célula animal, por ejemplo, esta interacciona en el medio que se encuentra a través de su membrana celular, permitiendo así el intercambio de “nutrientes”. Sin embargo, la Tierra no posee otra fuente externa más que la energía lumínica del sol,

por lo que este sistema se encuentra en un ciclo contante. Dichas fases regulares se han visto alteradas por diversos factores, dentro de los más evidentes; nuestras huellas.

Por consiguiente, para contrarrestar dicho daño aparece el concepto de “Producción Más Limpia”, internaliza la variable ambiental como parte de una estrategia de gestión empresarial preventiva aplicada a productos, procesos y organizaciones del trabajo. (Arroyave, J, & Garces, L, 2012, p.3) que, de la mano con la química verde, promueve una iniciativa en el diseño y la aplicación de productos y procesos químicos que sean compatibles con la salud humana y que preserven el ambiente. (Brown., et al., 2014., p.771).

En el año 2015, los países miembros de la Organización de las Naciones Unidas adoptaron una serie de ideales a cumplir para el año 2030 con el fin de frenar el aumento de temperatura en el planeta, rectificar las malas practicas que han marcado el medio ambiente y propiciar un desarrollo sostenible en múltiples ámbitos, nos centraremos en el objetivo 13: acción por el clima.

1. METODOLOGÍA

La ciencia en general, como la conocemos actualmente, es relativamente infalible debido al método científico, esta se suele divulgar en diferentes fuentes de información, dentro de los cuales podemos rescatar los libros y artículos científicos.

Sin embargo, no toda la información disponible es de “lectura casual” ya que ciertos temas a tratar requieren de un conocimiento técnico previo, esto tal vez una de las mayores limitantes, seguido de que la publicación de mucha de la información se suele realizar en un idioma impropio al español.

1. DESARROLLO

1. DESECHOS HUMANOS; UNA PROBLEMÁTICA ACTUAL

Como se mencionó anteriormente, la producción en serie con la revolución industrial ha permitido dar grandes pasos en el desarrollo, pasamos de usar caballos para transportarnos en automóviles que funcionan con combustibles fósiles y más recientemente algunos con energía.

        Lamentablemente, no existe un equilibrio dentro de lo que tomamos de la naturaleza y lo que reponemos, por el contrario, al explotar por ejemplo las reservas de petróleo causamos cierto daño reflejado en el porcentaje de dióxido de carbono presente en la atmosfera, somos conscientes que, desde un punto de vista técnico, casi todos los productos químicos y materiales derivados del petróleo podrían ser sustituidos por sus homólogos de origen vegetal. Sin embargo, el coste de producción es mucho mayor a la petroquímica (Chemat, F. Maryline, M., & Ravi, H, 2021, par.3).

Tomando en cuenta que una corporación siempre va a buscar el máximo provecho al menor costo, una vía amigable con el ambiente en la mayoría de las ocasiones no es tomada en cuenta con la tecnología actual. Es por lo que, hasta que no haya un cambio, la contaminación acelerada seguirá en un aumento constante, causando daños al ecosistema algunos de ellos sin vuelta atrás.

No toda la responsabilidad recae sobre las gigantescas compañías, muchas veces el cambio comienza por lo más básico, la educación ambiental es una formación poco común en muchas familias, ya que se cree equívocamente que este no es un tema de relevancia, además por cultura se creció en un ambiente donde se cree que todos los desechos del hogar deben de ir confinados en un mismo recipiente.

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