TÉCNICAS TERAPÉUTICAS QUE SE APOYAN EN LA RELAJACIÓN

TÉCNICAS TERAPÉUTICAS QUE SE APOYAN EN LA RELAJACIÓN

Las técnicas terapéuticas de relajación se enmarcan dentro de las formas de psicoterapia no descubridora o encubridoras y comprende unas técnicas de ejercitación física, cuya aplicación se apela a la colaboración del paciente.

Las técnicas no descubridoras o “recubridoras” se dirigen exclusivamente a la sintomatología, no interesándose por la etiología, la causa de la enfermedad.

Es un hecho comprobado por la psicofisiología que toda tensión emocional, se traduce en una contracción muscular. El sistema muscular refleja, al igual que el aparato digestivo o la presión sanguínea, las variaciones de la tensión emocional.

Es interesante observar que el lado somático del proceso de la ansiedad, es la rigidez de la musculatura; a su vez, este estado de contracción muscular mantiene la angustia. De allí que la tensión muscular sea responsable, no solamente de los síntomas que se derivan directamente de ella, sino también, parcialmente, de la cronificación de la sintomatología neurótica en general.

La vivencia de relajamiento muscular corre pareja con la aparición de la vivencia de relajación, y el estado relajado fomenta la aceptación de sugestiones. No interesa tanto lo que el paciente entienda por “relajarse”. Lo que importa es que viviese la relajación y el estado relajado.

La vivencia de relajación y el estado relajado por parte del paciente está condicionada, por las representaciones directrices del terapeuta acerca de la naturaleza de estos fenómenos.

 Debe indicarse en qué estado, se produce un descenso de nivel de conciencia en la que el individuo es accesible en alto grado, al influjo autosugestivo.

Lo esencial del estado relajado, es una modificación en el modo vivencial del individuo.

Dentro de las técnicas de Relajación, revisaremos sucintamente:

1. La relajación.
2. La relajación progresiva de Jacobson.
3. La relajación Muscular basada en Jacobson y modificada por Wolpe.
4. El entrenamiento Autógeno de Schultz.
5. La Hipnosis.

LA RELAJACIÓN:  La relajación significa “liberar la energía que se vuelva contra nosotros cada vez que estamos contraídos”.

Esa energía va a estar localizada en la tonicidad de los músculos, en las diferentes posturas y va a variar, según se esté despierto o dormido, variará también según el tipo de sistema nervioso que se tenga.

La tonicidad también será influida por los mensajes que provienen del exterior y por los propios movimientos interiores (cada pensamiento,  cada emoción, se traducirá en un ligero suplemento de tonicidad).

Este aparato delicado, este sistema muscular, estará controlado por mecanismos complejos que se distribuyen a lo largo de la columna vertebral, en el cerebro y específicamente en el córtex.

La relajación es ante todo una técnica y como técnica de ver a poco a poco perfeccionarse, a reproducirla espontáneamente, cada vez que se siente la necesidad de emplearla.

La tonicidad no es únicamente física.  Es una fuerza a veces física y aveces mental. Cada movimiento de nuestra mente se traduce por contradicciones en alguna parte de nuestro cuerpo. En los momentos de alegría, de euforia, el cuerpo está perfectamente relajado. En cambio, si se está preocupado o inquieto, en seguida se reacciona con una serie de contracciones. Lo mismo ocurre, si los pensamientos son agradables o si son tristes, estos últimos pueden traducirse en contradicciones permanentes de los músculos, hecho que puede observarse en los gestos.

El gesto natural es siempre  equilibrado y armonioso. Sin embargo, el hecho de refrenar los gestos crea un constreñimiento y una tensión, por decir, es un antigesto. Cuando este antigesto llega a convertirse en costumbre, en hábito, la tensión se vuelve permanente y se vuelve habitual, de allí que se observen ciertas posturas como apretar las mandíbulas, cerrar los puños, meter la cabeza entre los hombros, encorvar la espalda, etc, etc.

De todo enunciado concluimos, que ciertos estados de tensión pueden ser eliminados en base a la relajación y que debe ser conocida y fundamentalmente practicada Esta técnica para inferir sus beneficios.

1.1 ¿NECESITA RELAJARSE? PRUEBA DE CONTROL.

      Recomendaciones: ejecute los ejercicios lentamente y sin hacer esfuerzo.

1. ¿Puede usted tocar un objeto elevado a 55 centímetros encima de usted?, sencillamente poniéndose de puntillas?
2. Si está de pie, ¿ puede recoger un objeto del suelo sin doblar las rodillas?
3. ¿Puede sentarse en un sofá doblando una pierna delante de usted?
4. Se puede sentar de cuclillas… con el peso descansando sobre los dedos del pie?
5. Puede usted sentarse sobre los talones…, pero estirando un pie?
6. Una vez sentado sobre los talones, ¿ Puede inclinar el pecho hacia adelante y tocar el suelo sin levantarse?
7. De puede sentar con los sastres con las piernas cruzadas?
8. Y luego levantarse sin apoyarse en el suelo?
9. Ver los ejercicios en las páginas siguientes.

Si dichos ejercicios le parecen difíciles o no los pueden realizar, significa que los músculos han perdido su elasticidad, ha dejado que su cuerpo se “oxide”. En consecuencia necesita:

RELAJARSE:

1.2 PRUEBA PARA DETERMINAR LA CONCIENCIA DEL CUERPO Y EL EQUILIBRIO DE LA PERSONALIDAD (Esquema corporal e imagen de nosotros mismos)

1. Échese al suelo.

            Las piernas ligeramente separadas, con la punta de los pies hacia afuera.

            Los brazos separados.

            Dejé suelto su cuerpo sobre el suelo que lo sostiene.

               ( imagen)

     2. Ahora usted va a guardar silencio en sí mismo…  y pasearse en mente por el interior.   de su cuerpo. Concentre su atención en una mano.

Estírela.

Déjala completamente inmóvil.

Le parecerá tan pesada, tan densa que la hará falta un esfuerzo para levantarla.

Siga con este ejercicio visitando sucesivamente cada una de las partes de su cuerpo.

Llámelas cada una por su nombre: esto, la ayudará a fijar su mente.

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