Vinculo sin vinculo

 -Vínculos sin vínculos-

“Trabajar con la diversidad significa integrar las diferencias sin olvidar nunca que la escuela asume la responsabilidad de garantizar un horizonte de igualdad para todos (…) Diversidad e igualdad dialogan mutuamente: para garantizar la igualdad de oportunidades, la escuela ofrece a cada uno lo que necesita en relación con su singularidad.”^[1]

A comienzos de mayo empecé a realizar suplencias como Maestra de sección en escuelas de gestión pública, el primer jardín es un Maternal ubicado en el barrio de Flores. El cargo era para cubrir la sala de deambuladores, compuesta por 25 niñes. A lo largo del año fui realizando varias suplencias en la misma y en la institución.

La sala tiene cuatro secciones, es decir hay cuatro docentes a cargo del grupo en distintos horarios, entre las 7 y 8 de la mañana ingresa un grupo de 13 niñes, y a las 10,30 ingresa el segundo grupo conformado por  12 niñes.

Para comenzar quiero citar a la autora Sandra Carli, “No se carece de niños, sino de un discurso adulto que oferte sentidos a una infancia en nuevas condiciones históricas.”^[2] Pienso que es una frase acertada para comenzar a pensar la infancia como una construcción social, la cual es determinada por su contexto, en este caso es entre dos instituciones primordiales, la Familia y la Escuela.

El primer día se me “advirtió” del comportamiento de Ceci, que había que tenerlo vigilado debido a su comportamiento. Decidí dejar en suspenso esta orientación hasta conocer el grupo por mí misma.  Pude observar que si bien era un niño inquieto, solo había que tenerle paciencia y los primeros días pude relacionarme de buena manera con él, logrando un buen vínculo.

La otra maestra de la sala también me “advirtió” sobre Ceci. Con los días fui conociendo más de su vida, que vive con sus padres y su hermana, que su mamá es psicomotrisista, que su hermana sale del colegio a las 16:15, el cual se encuentra a la vuelta del jardín pero nunca pasan antes de las 17hs por Ceci.

Ceci asiste de 10:30 a 17:00 hs, siempre que ingresa a la sala lo hace de manera enérgica, enseguida toma los objetos que están puestos en el espacio. A lo largo de la jornada se le presta una atención extra, ya que, se lo ve en situaciones de conflicto, ya sea hacia sus compañeros o el mismo; saca objetos a los compañeros, golpea y muerde, se lleva a la boca cosas sucias y peligrosas como tierra o revoque. Durante los momentos  de comida y sueño suele molestar a sus compañeros, les quita el vaso o plato, o al momento de acostarse suele agarrar al compañero de al lado.

Pude notar que Ceci era tema de conversación en la institución, las docentes, el equipo de conducción, y el personal no docente sabían de su comportamiento, todos hacían comentarios al pasar siempre que ocurría una situación. “En nuestras sociedades, aquel que se aparta de la norma, o que la transgrede, pierde sobre todo sus derechos en el dominio privado y del secreto. Dicho de otro modo, el derecho a una cierta no-visibilidad, el derecho a una opacidad privada se asocia a un privilegio, es un derecho que debe ser merecido y que se puede perder desde el momento en que uno se aparta, de un modo u otro, de la norma social.”^[3] Cargar con una etiqueta, más siendo tan chico y sin saber que la tiene, es algo desastroso, la mayoría de las docentes ya hablan que en los próximos años será un niño derivado si no se hace algo pronto.

En cada semana me enteraba un poco más de la vida de Ceci fuera del jardín, al parecer en la casa era igual de inquieto que en la sala, y al parecer la hermana es igual, para lo cual la llevan a distintas actividades extracurriculares. Durante el receso escolar trabaje en la institución, Ceci asistió toda la semana completa, cada vez que lo traían a la mañana estaba acompañado por su hermana que siempre comentaba que tenía planes, un día la vicedirectora le comenta amablemente si no llevaba al hermano con ella, a lo que respondió que no porque molestaba. Otra semana pudimos ver que estaba teniendo unos días difíciles, más de lo común, se le pregunto al padre si había cambiado algo o estaba sucediendo algo, a lo que contesto que, el fin de semana habían salido de urgencia a cuidar al abuelo materno, quedando Ceci al cuidado del abuelo paterno, recién el martes a la mañana habían vuelto a la casa y lo llevaron directo al jardín. En ningún momento la familia se comunico con la institución para comentar que estaban pasando por una situación difícil.

Cada vez la situación era peor, el ambiente estaba cada vez más tenso, las docentes cada vez tenían menos paciencia hacia Ceci, lo que genera que actué de manera más desafiante, generando situaciones incomodas.

En reiteradas ocasiones se habló con la familia, comentando que sucede en el día a día de la sala, y preguntando que sucede en la casa. Siempre respondiendo que en la casa está todo bien, no hay nada que a ellos les llame la atención, también afirmaron que, a veces se lleva a la boca revoque o pintura floja, al igual que en la escuela corre, explora y es inquieto.

Siento que por momentos las docentes se quedaron en el tiempo, cuando todos los niños eran iguales, se comportaban de igual manera, no había espacio a la singularidad, coincido con S. Carli cuando dice que  “(…) ya no es la escuela la que produce "las" definiciones acerca de la infancia o discute críticamente las definiciones heredadas, sino que son los niños los que desafían a redefinir las escuelas.”^[4]  Se debe dar lugar al desafío, si el mayor objetivo del nivel es educar niñes autónomos, con criterio, no se puede censurar.  

Ceci fue etiquetado como un niño problemático, malo, al que hay que prestarle mayor atención. Las docentes no saben qué hacer con él, desde la conducción no hay respuesta, desde los padres se puede notar la negación ante del tema. Por momentos la situación en la sala se vuelve tensa, hay que mirarlo constantemente, que no muerda o empuje a algún compañero, o que no esté mordiendo cosas peligrosas.

“¿Qué es lo que no se puede con estos niños? ¿Qué es lo que les pasa a estos niños? Hago un recorte, o una especificación, en relación con el modo de nombrar el “no se puede”. ¿Qué es lo que no se puede? Hacer lazo. La dificultad para estos niños es el obstáculo para hacer lazo con los otros” ^[5] En este caso, Ceci no ha podido entablar un lazo real con sus docentes, de alguna manera las docentes tampoco han podido lograrlo. La autora L. Kiel habla sobre el poder alojar a ese niño, sostener el deseo, es decir, sostener el deseo de alojarlo. Algo primordial en la primera infancia, sentirse sostenido, apoyado, contenido, es fundamental.

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