El cultivo de maní representa en varias regiones de Guatemala

Análisis económico

El cultivo de maní representa en varias regiones de Guatemala una opción muy valiosa para la obtención de ingresos económicos, debido a que se obtiene una rentabilidad alta, por su bajo costo de producción específicamente; además su manejo es relativamente fácil en comparación con cultivos como frijol, tomate, chile, entre otros.

En la aldea Jumuzna, es una opción muy importante, debido a que puede considerarse como una alternativa para contrarrestar el crecimiento exponencial de plagas y algunas enfermedades en cultivos tradicionales y de baja rentabilidad. El cultivo de maní se considera económicamente rentable, lográndose obtener hasta 2.6 cosechas al año si se cuenta con agua para riego, es de fácil manejo, la inversión es mínima y el mercado es cada vez mas extenso.

Los ingresos económicos por la venta del producto son altos, ya que existe una gran demanda tanto en el mercado nacional como internacional, tendiendo a aumentar anualmente.

Para determinar el tratamiento que representó la mejor opción desde el punto de vista económico, se calculó la tasa de retorno marginal (TRM).

El resumen de costos e ingresos por hectárea que se muestra en el cuadro 11, se calculó tomando en cuenta el ingreso bruto y los costos variables relacionados únicamente con la cantidad de semilla según su peso (peso de 100 cápsulas de cada cultivar), y costo de mano de obra para cosecha, según la producción de cada cultivar de investigación.

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El ingreso bruto de cada cultivar estuvo relacionado con su rendimiento y el precio unitario, es decir, fue el dinero obtenido por la venta del producto. Los ingresos netos obtenidos fueron la diferencia entre el ingreso bruto y el costo total; se puede observar que el cultivar 1806 representó el mayor ingreso neto (Q. 8,908.85), y en base a los resultados que se obtuvieron es el de mayor producción (1502 kg/ha).  Los costos variables de cada cultivar dependieron de la cantidad de semilla utilizada para la siembra y la cantidad de mano de obra para la cosecha.

Para determinar la dominancia, por definición, el primer tratamiento es no dominado. Un tratamiento es dominado cuando resultado de un incremento en los costos, su empleo no conduce a un incremento en los beneficios netos; es dominado porque al menos existe un tratamiento de menor o igual costo que genera mayores beneficios.

Para realizar este análisis se organizaron los datos con un orden creciente de los costos que varían, es decir, de menor a mayor y los respectivos beneficios netos. Luego se procedió a comparar, si al aumentar los costos ocurría un incremento en los beneficios netos, el tratamiento se consideró no dominado (ND), si ocurría lo contrario se consideró dominado (D) y este último no se tomó en cuenta en el análisis posterior. El análisis de dominancia se muestra en el cuadro 12.

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