CUENTO DÍA DEL IDIOMA

CUENTO

DÍA DEL IDIOMA

RAFAEL SANTIAGO DIAZ

GRADO: 6-02

DOCENTE: NOLVIS MARTINEZ

INSTITUCIÓN EDÚCATIVA EUSEBIO SEPTIMIO MARY

RIOHACHA LA GUAJIRA

2020

EL ACEITE DE DIOS

Había una vez una familia conformada por 4 personas: mamá, papá y 2 hijos, que vivían en un pueblo pequeño.

Un día cualquiera se expande una terrible enfermedad, y todos debían quedarse en casa para no ser afectados por esta.

La familia veía por las noticias todo lo que sucedía. Estaban asustados y sorprendidos.

Cada noche oraban sin cesar y se les apareció un ángel diciéndoles que todo iba a cambiar para ellos, pues era la única familia que buscaba al Señor, pero que debían tener calma y paciencia y les dio un aceite para salvar vidas, donde la única condición era dar testimonio.

En un día soleado al papá llamado Santiago le tocaba salir a hacer compras, llevando con él, el aceite. Cuando salió a la puerta vio que venía corriendo el vecino, hombre incrédulo y prepotente, pidiendo ayuda para llevar a su pequeño hijo a la clínica porque se había infectado por no obedecer.

Papá Santiago le dice al vecino que tuviera calma y que lo podía ayudar, siempre y cuando el orara con él y en su corazón hubiera reconcilio con Dios. El vecino se enojó, no acepto y se fue.

A los pocos días se fue regando el testimonio del milagroso aceite que Dios le había regalado a papá Santiago.

El vecino sin aliento y muy triste fue a visitar a papá Santiago y de rodillas le pidió que le dijera a Dios que salvara a su hijo y que lo perdonara, oraron y se dirigieron hacia la casa de este vecino, ungieron al niño y a las pocas horas estaba sano.

El vecino, junto a papá Santiago convocaron para hacer una oración y ofrenda en agradecimiento, y, fue de agrado para Dios y los bendijo, acabando la enfermedad del pueblo y en una parcela que estaba alrededor de él, hizo fértil la tierra y la llenó de alimentos variados para que no olvidaran su milagro y todos vivieron felices para siempre.

FIN

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