DISCURSO CEREMONIAL.

DISCURSO CEREMONIAL

Alejandro Contreras Giraldo 11°B

Buenos días directivos, docentes, estudiantes, familiares y  toda la comunidad educativa pastoral del colegio salesiano El Sufragio, gracias por acompañarnos en este día tan especial, espero que hoy se sientan orgullosos y entusiasmados, tanto como nosotros por esta culminación del periodo escolar.

Durante todo este tiempo tuvimos el acompañamiento de varios maestros, quienes nos llenaron de conocimiento y se comportaron como unos verdaderos amigos, compartiéndonos experiencias y enseñándonos trucos para la vida, ya que en este momento saldremos al mundo que nos espera; estamos a punto de iniciar una nueva etapa de nuestras vidas.

En este periodo escolar no solo aprendimos información relacionada con las áreas del conocimiento, también aprendimos a tolerar, a respetar las ideas del otro, a aceptar a las personas como son, a aceptar fuertes críticas, que nos han ayudado a crecer como personas, en esta etapa escolar también hemos aprendido a reconocer triunfos ajenos, a saber que no siempre se es el mejor , aprendimos a auto controlarnos , a tener paciencia, a ser verdaderos amigos, a ayudar al necesitado, a ser honestos, a ser responsables, no solo en el ámbito académico sino también en la vida, aprendimos a hablar en público , a sustentar nuestras ideas, entre otras cosas que nos hacen ser lo que somos.

Compañeros, o más bien colegas, hoy somos ganadores, no de lo que culmina, sino de los retos que empiezan, el colegio fue nuestra etapa de entrenamiento, espero que no haya sido un objetivo final. El objetivo final es la intensa y permanente búsqueda de nuestra identidad y nuestra felicidad, y a partir de esto interceder por el desarrollo de la humanidad. Proyectémonos como líderes o como dueños, no podemos ser conformistas, debemos reconocer las capacidades de cada uno y emprender los caminos apegados a estas, no temamos a salir a buscar nuestro futuro.

Agradecemos a nuestras familias y amigos por el sacrificio y el apoyo, tanto moral como económico, por la preocupación, por el consuelo, pero principalmente por compartir la felicidad de este día. A las directivas, a todos los docentes que participaron de este proceso y a toda la comunidad del colegio salesiano El Sufragio que en estos años fueron nuestra segunda familia, solo resta decirles: GRACIAS.

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