Diles Que No Me Maten

¡Diles que no me maten!

De la obra “El llano en llamas” nace un cuento llamado “¡Diles que no me maten!” del autor Juan Rulfo. Esta obra habla sobre dos hombres que eran compadres uno se llamaba Juvencio Nava y el otro era conocido como Don Lupe Terreros , que era dueño de una propiedad llamada “Puerta de piedra”; a diferencia de este Juvencio Nava tenia ganado y en las épocas de escasez de agua el pedía a su compadre Don Lupe Terreros le dejara pasar su ganado a sus tierras para que se alimentaran bien,pero este no cedía. En distintas ocasiones Juvencio Nava ya al punto de verse en la desesperación, de ver a sus vacas tan flacas, rompió la cerca para que su ganado se metiera y hartara de tanto comer.

Don Lupe Terreros ya estaba harto de tener que estar reparando su cerca cada vez que Juvencio la rompía sin su consentimiento en varias ocasiones Terreros reclamo y advirtió a Juvencio que si seguía metiendo a sus animales al potrero se los iba a matar y dicho y hecho le “mato un novillo”. En una porción de la obra se señala que:

Juvencio tuvo que salir huyendo con miedo a que lo fusilaran pararon los años y se enteró de que Don Lupe había fallecido y que de hecho lo andaban buscando a él para inculparlo de este crimen por los pleitos que habían tenido hace algunos años.

Decía Juvencio que él no merecía morir así al coronel que dejara que al menos Dios lo perdonara

Subieron a Juvencio a un burro lo apretaron bien para que no se callera , le metieron la cabeza dentro de un costal para que no diera mala impresión , le dieron de beber hasta que emborrachara para que no sintiera los balazos en la cara.

Ahora por fin se había calmado

(Rulfo)

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