Discurso De Despedida

DISCURSO DE DESPEDIDA

Muy buenos días señora rector, coordinadores, docentes, y compañeros del colegio francisco de paula Santander. En este momento de absoluta felicidad y orgullo, mi corazón como el de mis compañeros, sienten infinitos agradecimientos hacia Dios nuestro Señor, creador y protector, porque hoy culmina una de nuestras más grandes metas. Porque durante 11 años, y en especial estos seis últimos llenos de trabajo, esfuerzo y dedicación, pudimos aprender más de nuestros compañeros, nos fue posible conocer personas maravillosas en el transcurso de nuestras vidas, con ellos compartimos cosas maravillosas, en el colegio nos enseñaron a valorar a las personas que viven en nuestro alrededor , nuestros docentes nos enseñan más sobre las cosas que podemos encontrar cuando salgamos de estudiar también nos enseñan a ver las cosas de otro modo, pero sobre todo en el colegio nos enseñan a ser personas de bien. No podríamos continuar si no les diéramos las gracias a unos seres muy especiales, que marcaron significativamente nuestra vida, nuestros maestros, de corazón gracias, por ser nuestros segundos padres, porque aparte de que son nuestros segundos padres fueron, son y serán nuestros amigos, gracias por toda la paciencia tenida, gracias por todas la noches en vela preparando la mejor clase para nosotros, por todo el tiempo dedicado a revisar nuestros cuadernos y/o evaluaciones, y explicarnos nuevamente un tema, aun cuando todo el mundo ya había entendido, gracias por hacer de nosotros personas emprendedores, diligentes, esforzados, y disciplinados, gracias por exigirnos, por prepararnos para este mundo que ahora tenemos que enfrentar. Gracias por todas sus pláticas y reflexiones, gracias por enseñarnos más que materias, a ser personas; y hoy que nos marchamos de aquí, con una profunda tristeza en nuestros corazones solo nos alegra saber que seguiremos nuestros caminos llenos de hermosos recuerdos. De la misma manera agradecemos a todo el equipo administrativo por hacer de nuestro colegio un lugar más ameno, más ordenado y más coordinado. Solo les pido que ahora que nos separamos no pierdan ese espíritu joven, emprendedor, soñador y alegre, nunca pierdan la magia de vivir, confíen siempre en Dios, valoren todo lo que tienen, hoy muchas personas sufren hambres, violencia, necesidades y catástrofes, pero nosotros estamos aquí dando un paso tan significativo para nuestras vidas, todo gracias a la bondad y el amor de nuestro Señor; nada nos cuesta dar las gracias, brindar una mano o regalar una sonrisa, nunca olviden sus sueños, sus metas sus ilusiones, persistan en sus ideales y confíen en sus capacidades esfuércense y hagan de Colombia nuestra patria, un país más hermoso, más justo y más libre.

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