EL CONEJITO PORFIADO

FÁBULA 1.

EL CONEJITO PORFIADO

Había una vez en una escuela de Campo, un conejo que se portaba muy mal dentro de la sala de clases. La profesora siempre le decía que se comportara como un buen alumno, sin embargo el conejito porfiado le respondía: - Después me voy a portar bien profesora.

Así pasaban los días y el conejito nunca se comportaba como un buen alumno. Hasta que un día en la clase de lenguaje, mientras la profesora enseñaba sobre los verbos, el conejito se comenzó a balancear en su silla. La profesora le pidió que lo dejara de hacer, pero como era tan porfiado continuó haciéndolo.

Sin darse cuenta el conejito se balanceo demasiado en la silla y se cayó, tan grande fue el golpe que todo el brazo morado le quedó. Sus compañeros lo ayudaron a levantarse y sólo así el conejito aprendió una gran lección.

MORALEJA: Sentarse bien, evita que pases una vergüenza.

FÁBULA 2

EL perrito sin conciencia.

Todos en la escuela estaban comprometidos con el aseo, menos uno, perrito se llamaba, sin conciencia era su apellido. Siempre botaba los papeles al patio, no importaba si estaba limpio, el siempre prefería botar la basura fuera del basurero.

Los padres de perrito sin conciencia estaban apenados por el comportamiento de su hijo, - Bota los papeles donde corresponda, le decía el padre, sin embargo, el perrito no quería darse cuenta del daño que estaba haciendo en su escuela al no botar los papeles al basurero.

Un día, el perrito venía de su casa a la escuela comiéndose un plátano y para variar, botó la cáscara al patio de la escuela. Entró a clases y cuando tocaron la campana para salir al recreo, el perrito salió corriendo para poder jugar fútbol en el patio. Mientras corría, no se dio cuenta de que estaba la cáscara que él mismo había dejado, ¡se cayó!

MORALEJA: Mantén tu escuela limpia, sino quieres tener accidentes.

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