EL MUNDO MARAVILLOSO DE ADAM SMITH

EL MUNDO MARAVILLOSO DE ADAM SMITH

“En lo único que soy un hombre distinguido, es en mis libros”, fueron las palabras con que Adam Smith se definió así mismo.

Smith se vio afligido durante toda su vida de una dolencia nerviosa: le temblaba la cabeza y hablaba de una manera extraña. Smith fue desde sus primeros tiempos, alumno de gran capacidad.

Su vocación era, sin duda alguna la enseñanza; a los 17 años marcho a Oxford con una beca, haciendo el viaje a  caballo y allí permaneció seis años.

En 1751 Smith tenía entonces veintiocho años, le fue ofrecida la catedra de lógica en la Universidad de Glasgow. En 1759 publico un libro que causo sensación  inmediata: Se titulaba The Theory of moral sentiments, lanzo el nombre de Smith a la primera fila de los filósofos ingleses, esta obra era un estudio acerca del origen de la aprobación y la censur moral. El libro y los problemas que en el mismo planteaba despertaron un interés inmediato.

Townshend, a pesar de su miopía política era un sincero estudioso de la filosofía y de la política, y como tal un admirador de Adam Smith. Penso Townshend que el doctor Smith seria un acompañante ideal par el joven duque y le ofrecio trecientas libras anuales de sueldo, mas los gastos y un pension vitalicia de trecientas libras anuales.

El preceptor y su alteza, el joven duque  salieron rumbo a  Francia el año 1764. Siguieron luego por el sur de Francia donde Adam Smith conoció a Voltaire y rechazo las atenciones de una marquesa enamoradiza. Adam Smith empezó a trabajar en un tratado de economía política, tema sobre el cual había dado lecciones en Glasgow. El libro en cuestión habría de titularse “La riqueza de las Naciones” pero fue preciso que transcurrieran todavía doce años antes que estuviese terminado.

Anteriores a  Smith hubo una larga lista de observadores que estudiaron la interpretación el mundo según aquel: Locke, Stewart, Petty, Quesnay y a Hume. Smith tomo algo de todos ellos, en su obra cita por su nombre a más de un centenar de autores.

Quizá la riqueza de las naciones no sea un libro original, pero es indudablemente una obra maestra.

La riqueza de las naciones fue escrita por Smith en los años inmediatamente anteriores a la Revolución norteamericana. Fue en parte, un atque a la filosofía mercantilista en la que se apoyaba la política británica en las colonias y, en parte, la articulación del mecanismo, aun mal comprendido, de una nueva sociedad.

Smith que ere escocés, ocupaba la catedra e filosofía Moral en la universidad de Glasgow y, estando en ejercicio de la misma, publico “La teoría de los sentimientos morales”. Esta obra que apareció en 1759, consideraba como el hombre puede elevarse por encima de su propio interés al formular juicios morales y como su egoísmo puede ser transmutado a una esfera superior.

El libro dio a Smith ocasión de viajar por el continente, donde mantuvo contacto con Quesnay, el pensador económico más destacado de  Francia. Quesnay mantenía la idea de que la riqueza de una nación procedía de su capacidad para producir y no de la cantidad de oro y plata que poseyera. Smith desarrollo esta idea en el ataque que dirige en La riqueza de las naciones a la política restrictiva y proteccionista del mercantilismo.

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