El Coronel No Tiene Quien Le Escriba

a historia expone tres meses de la vida del coronel y su esposa que vivían en un pueblo. El coronel es un veterano de la guerra civil y hace 15 años que espera su carta para su pensión. Durante esa espera venden todo lo de su casa pues no tienen que comer. Va cada día a la oficina de correos pero la carta de pensión nunca llega. Por esta causa eran pobres y así siguieron hasta el final de la historia.

La Idea principal de la historia, El Coronel No Tiene Quien Le Escriba, es “la esperanza es lo último que se pierde”, pues el coronel a pesar de todas las dificultades que pasaron con su esposa durante esos quince años de espera por la pensión, siguió adelante y nunca se rindió en su vida; se quedo con el recuerdo de su hijo Agustín a pesar de que eso les podía dar dinero para poder comer y así sobrevivir en ese mundo cruel por el cual pasaban en esos momentos. Nunca perdió la esperanza aunque de último dice que no sabe que van a comer pues no tienen nada, la pensión nunca llego y ellos sin dinero y sin cosas que vender pues todo lo habían vendido, para poder comer durante esos quince años que han pasado. El Coronel y su esposa sufren demasiado en este lapso de tiempo, sin embargo ambos tiene la esperanza y nunca la pierden eso es lo que los mantiene vivos.

La esperanza es el estado de ánimo de los seres humanos en el cual se cree que lo que uno desea es posible, la mayoría de personas suelen aferrarse a la esperanza cuando están en una situación difícil o tienen problemas. Gracias a la esperanza es que todos los seres humanos hemos sobrevivido en la Tierra pues tenemos esa esperanza de que los problemas de nuestro país como lo son la violencia, el secuestro, la falta de dinero, la muerte, etc. Desaparecerán con el tiempo y así podremos vivir felices por siempre como en los cuentos de hadas o las fantasías que creamos en nuestra mente.

Para concluir la esperanza forma una parte muy importante en nuestra vida; pues esta nos ayuda a mantener esa llama que esta dentro de nosotros encendida y así poder seguir adelante. El Coronel lo hizo, confió, deseo con toda su alma y aunque no obtuvo los resultados esperados, lo logro nunca se apago esa llama interna llamada esperanza.

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