El Pizarron Encantado

El pizarrón encantado

Es un cuento muy corto escrito por Emilio Carballido en donde nos narra la historia de un chico llamado Andrés que por obras del destino se queda en casa de sus tíos debido a que su madre tiene que irse ya que su padre se encuentra enfermo en otro lugar.

En esta historia podemos notar a una familia disfuncional de clase baja, ya que el padre tiene que emigrar para poder mantener a su familia.

Cuando Andrés llega a casa de sus tíos se da cuenta de que son algo raros y que en su casa tienen distintos objetos curiosos. Todos los que vivían ahí seguían reglas específicas, por ejemplo a cierta hora tenían que rezar con la tía Pompilia.

En este pequeño cuento sobresale el tema de los valores en familia y se ve también el deseo de todos los seres humanos de manipular todo lo que hay en su entorno de acuerdo a su conveniencia. Dentro de la historia notamos que Adrián utiliza primero el pizarrón para jugar y explorar pero después al darse cuenta de la gran responsabilidad que implicaba tener y utilizar el pizarrón decidió utilizarlo para mejorar algunas cosas que necesitaba, fue así como le devolvió la salud a su padre y le consiguió trabajo de payaso en un gran circo a su tío.

Esta historia me enseñó que todos debemos ser responsables con nuestras decisiones y pensar muy bien las cosas antes de realizarlas ya que pueden tener consecuencias negativas y meternos en problemas.

También aquí vemos la envidia que tenían los demás al ver que Andrés tenía el pizarrón, pero este era muy inteligente y antes de que se lo quitaran lo volvió invisible para poder conservarlo.

Al final como todo cuento tiene un final feliz en el que todos quedan satisfechos con lo que han obtenido. Esto demuestra que si se trabaja y planea de forma adecuada podemos llegar a conseguir las metas propuestas y porque no, tener una vida feliz identificando y evitando problemas futuros.

El cuento se relaciona con la materia de planeación y evaluación institucional porque para poder cambiar las letras en el pizarrón Adrián tenía que planear muy bien lo que quería y ver la gama de opciones que tenía para poder elegir la palabra adecuada y conseguir su objetivo.

En el cuento al principio Andrés toma decisiones sin planear y casi logra que maten a los gatos, pero después empieza a planear y consigue cambios duraderos y benéficos.

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