Ensayo sobre El nuevo modelo de hombre

El nuevo modelo de hombre, el hombre de hoy;  no tiene sustancia ni contenido, es solo fachada sin conductas, pensamientos, ideales y valores propios; Es decir, solo obedece a lo que sucede en su entorno, el cual está rodeado de placer, dinero, sexo e incluso del hecho de ser utilizado por otro; lo que lleva a nuestra sociedad a los constantes y brutos cambios.

Esto es lo que nos dice Enrique Rojas en su libro “Hombre light”, nos habla de un ser hedonista, permisivo, relativo y totalmente entregado al consumismo, de aquel hombre que no es completamente feliz aun teniendo todo lo que materialmente necesita e incluso más, muy superficial, con un enorme vacío moral y poco creyente.

Nos dice que este individuo tiene un gran interés por el poder, fama y libertad; Hace lo que quiere sin restricciones y vive para sí mismo únicamente; Todo cada vez más sometido al hedonismo, ley máxima de placer por encima de todo, a cualquier precio y que cada vez un más alto el nivel de bienestar. Sin embargo hay que entender que una cosa es disfrutar la vida y otra muy distinta el frenesí de diversión sin restricciones.

Se dice que el hombre actual recibe demasiada información y que ello genera dificultades para comprender y llevar a la práctica el resultado de esa información; es decir perdemos educación y esencia  pero crecemos en cuanto a las expectativas de nuestra abatible sociedad.

El hombre light al ser hedonista busca tan solo relaciones meramente superficiales y estas se encuentran en el sexo, las relaciones cariñosas terminan convirtiéndose en físicas. Siendo que se relaciona el sexo con el amor, no siempre será de esta forma.

 El autor define el amor como algo empalagoso, que suena y te logra hacer sentir bien, si es verdadero, pero también lo define poco fuera de lo real, lo cual no significa que no exista, si no que todos lo vemos y sentimos de diferentes formas, nadie tiene la misma perspectiva sobre lo que es el amor; El amor no es una constante, es totalmente impredecible. Nunca y nadie sabe ni sabrá  cuando le llega o a donde es lo lleva este sentimiento.

El hombre light no ha experimentado la felicidad absoluta por lo cual confunde el amor verdadero con un sentimiento pasajero; siendo que el amor es aprobar y desear estar con otra persona, querer lo mejor y ver por ella, darle un buen trato y lo mejor de uno.

 Hay momentos de confusión, donde todo ser jura haber encontrado el amor de su vida, pues creen sentir que verdaderamente les llena de esa inmensa alegría y paz, pero debido a que el hombre moderno no puede evitar seguir las nuevas conductas de la sociedad, cambia sus ideas, sus formas de ver la vida, y de percibir a las personas que están con él, de diferente manera.

Comienzan a sentir o convertir todo de manera monótona, comenzando a hacer daño, a no cuidar a la otra persona, todo se transforma de manera increíble, lo que se creía que era verdadero y eterno, se convierte en una mentira o confusión, en un ya fue; todo lo que conlleva amor verdadero es promesa de futuro y compartir la vida. Lo cual lleva rupturas en los noviazgos o el los matrimonios el divorcio. El hombre light debe descubrir su verdadero sentido para poder incluirlo en su vida, el amor no es pasión, mucho menos gratitud.

Las relaciones sexuales son estimuladas continuamente en la televisión, donde el contacto es inmediato, al poco de conocerse. Los jóvenes no tienen recursos psicológicos ni educativos ni de formación para controlar este aluvión. Por otra parte, el tráfico de vídeos porno en algunos países es una gran preocupación actual. Con el pensamiento light como bandera, no se puede censurar esa conducta comercial.

La pornografía es todo lo contrario a la sexualidad verdadera, frustra el auténtico progreso moral del hombre, y conduce las relaciones entre hombre-mujer a un trato de explotación. Para algunos ésa es una prueba evidente de libertad, pero desde luego es un camino acertado para esclavizarse y vivir supeditado a algo que exige constantemente una conducta sexual que puede desorientamos y crear la sensación de pérdida de sí mismo.

 En el sentido light se confunde libertad con pornografía, se relacionan sin que importe demasiado. Por tanto, una sociedad que no es capaz de criticar esto, debilita sus bases morales y deforma los comportamientos humanos, que sólo se mueven instintivamente y con un sentido muy materialista.

Por otro lado, se dice que una buena cultura se adquiere con un muy buen libro y hoy en día la información se propaga a través de las revistas, el internet y de la televisión, por supuesto, que es de cierta forma vana y nula.

El internet y televisión se han convertido en un vicio para el ser humano, para todo y en cualquier momento requerimos de hacer uso de estos medios, haciendo notorio que tenemos malos hábitos.

Un libro se logra un análisis más profundo y complejo de la realidad; pero, no hay que olvidar, que todo libro, que todo cuento, fábula, novela o tratado filosófico, tienen su cimentación en la realidad y la vida es la verdadera fuente de cultura.

En los programas educativos y en el mundo de la publicidad no se incluyen la compra de libros ni el interés por la vida intelectual. Sólo se insiste en lo que está de moda: ropa, música del momento y autores que se llevan, aunque todo esto sea trivial, ligero, inconsistente. Por eso no debe extrañamos que no surja un modelo humano más completo, sí más actual, pero su destino es perecedero, pasajero e imperdurable.

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