HACIENDO EL TEATRO COTIDIANO Y MUCHAS RAZONES PARA PRACTICARLO

El teatro es un arte muy antiguo, y a través de la historia se ha quedado con el hombre. Este nace en Grecia aproximadamente en el siglo IV antes de Cristo, la festividad de Dionisio o Baco (dios del vino) se celebraba al terminar la cosecha, mediante una ceremonia que culminaba en el sacrificio de un macho cabrío, a partir de la cual se empezó a hablar de "tragedia", término que significaba justamente festividad del macho cabrío, pero antes de su nacimiento ya existían manifestaciones teatrales en el mundo: los bailes, las danzas, que constituyen las más remotas formas del arte escénico, es por ellos que los expertos dicen que proviene de lo religioso o su origen está en los antiguos ritos de origen prehistórico, donde el hombre se dio cuenta de la importancia de la comunicación para las relaciones sociales. Así las sociedades acuden a las ceremonias para desdoblarse y representarse a sí mismas. Esto constituye una forma de adquirir vigencia, de perpetuarse a través del espacio y del tiempo.

Toda esa necesidad que tiene el hombre tricotómico puede expresarla mediante el teatro, es por ello que a través de las generaciones ha perdurado y segura evolucionando. Los griegos fueron los primeros en introducir notables mejoras al teatro como los recursos escénicos y decorados.

El teatro es universal, el rompe barreas de culturas, creencias, ideologías. Todos lo practican desde nuestros queridos indígenas hasta las llamadas culturas civilizadas. Aunque para muchos es un acto natural de tipo religioso, social, de etiqueta, militar, cultural y para otros su profesión; es practicado por todos en algún momento. Es un modo de vida donde podemos expresar lo que sentimos, lo que vemos, lo que no vemos, las desgracias, los sentimientos, las pasiones. Además de ser una diversión es una forma de desahogo colectivo. Atrevería a decir que es el espejo del alma.

Los ritos religiosos de las culturas africanas es teatro, sus danzas sus ceremonias, sus vestimentas especiales para el acto, el sitio donde presentan el acto o el escenario, su música está lleno de arte teatral.

El ciudadano religioso que acude a misa o eucaristía, entra al escenario o iglesia, de una manera reverente, usa el vestido más formal que tiene para asistir; el católico se hecha la bendición, hace reverencia ante el altar, le reza a su santo de devoción, se sienta en la banca de manera silenciosa a escuchar el sermón del otro actor, los cantos congregacionales, la repartición de la ostia, la confesión de los pecados ante el cura y su vestimenta. Es evidente que se está haciendo teatro. El feligrés al salir del templo vuelve a su vida cotidiana y se porta, camina, habla, se viste de otra manera porque acaba de salir del escenario teatral. Esto no indica que el hombre es un farsante sino que es un modo de vida.

El militar uniformado, ante sus superiores, en una ceremonia hace un acto teatral estupendo,

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