La civilización o cultura China

CULTURA CHINA

                                                                      DOCENTE: FRANCISCO JAVIER DOMINGUEZ RODRIGUEZ

                                                 ALUMNO: MA. GUADALUPE GUERRERO LUNA

    1er. CUATRIMESTRE

La civilización o cultura China, es una de las más antiguas del mundo, floreció en la fértil cuenca del río Amarillo. Durante sus inicios, el sistema político se basó en monarquías hereditarias, conocidas como dinastías. Para algunos investigadores, la historia de China comienza en el siglo VIII, con el célebre monarca Ping-Wan, de la dinastía de los Schu. Esta cultura ha hecho a la humanidad una importante aportación, no solo con sus inventos, sino también al compartirnos de alguna forma la estructura de su modelo educativo, el cual a lo largo de la historia ha sufrido varias modificaciones en los diferentes países del mundo.  

La finalidad de este ensayo es dar a conocer la importancia que tiene China, en las diferentes culturas de nuestra actualidad, debido a sus diferentes aportaciones que hizo al mundo, desde el tema educativo hasta varios de los inventos que nos heredaron y que en la actualidad se siguen utilizando.

Al hablar de la cultura China es introducirnos en un viaje al pasado, y conocer desde sus raíces a uno de los pueblos más conservadores de la historia. Debido a ello su educación estaba confinada al estudio de los libros antiguos, y a participar en las maneras reverenciales que eran inculcadas.

De su educación podemos comentar que consistía en copiar mecánicamente a la memoria textos antiguos, de tal manera que se pudieran escribir de ellos ensayos y poemas, tomando en cuenta los modelos prescritos, ya que la mayor motivación de los estudiantes chinos era realizar sus trabajos o tareas de la mejor manera posible, logrando con ello recibir cualquiera de las mayores recompensas, ya fuera un puesto público o un título de nobleza.

Es importante mencionar que una de las principales instituciones educativas era el propio núcleo familiar, donde el padre es el responsable de educar a cada uno de sus hijos desde la más tierna edad hasta los siete años, durante este transcurso de tiempo, el padre se encargaría de darles a conocer a sus hijos los deberes de los ancianos y los jóvenes. A partir de los siete años estarían preparados para comenzar su instrucción en la lectura.

La gran importancia concedida a la educación familiar, depende de que la familia es considerada como la base de la organización social. El bien del estado depende de la vida noble y religiosa de la familia. ”Si los negocios de la casa se hallan bien ordenados, los del Estado también lo estarán, pues estos reposan en aquellos; el que venera a sus padres, venera también al Emperador”. Los mandatos de éste, que tienen carácter divino, los acatan y hacen cumplir los mandarines, quienes gozan de parecida veneración. El padre de familia es el último eslabón de  esta jerarquía divina; y en el hogar representan al propio Emperador.^[1]

Es importante mencionar que en su sistema educativo, no hubo ley de enseñanza obligatoria, la educación fue objeto de atención del poder público.

Así como la familia fue la base de la educación en esta cultura, también lo fueron las escuelas elemental y superior.

La Escuela Elementa, fue una institución universalmente extendida, que tenía como finalidad conservar la unidad de la nación y de mantener las tradiciones ancestrales. A dicha escuela acuden los niños a partir de los siete años de edad hasta los catorce, donde cada pequeño era instruido en la lectura y escritura por maestros privados,  ya fuera en la casa paterna o en pequeñas escuelas. Este tipo de educación la conocemos como memorista y dogmática, pues los niños debían repetir cada palabra pronunciada por el maestro, observado detenidamente los caracteres impresos.

La escuela elemental también tiene como finalidad el instruir en los rudimentos de cálculo, para lo cual se servían los alumnos o discípulos de un Abaco contador (aportación de esta cultura a nuestro mundo actual), su sistema de conducta fue reforzado por otras religiones como el budismo y el taoísmo, para esta cultura también fue importante la educación del cuerpo, por lo cual dentro de su enseñanza existieron ejercicios gimnásticos como lo eran el manejo del arco, conducción de carros, uso de escudo y lanzas.

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