Lagrimas De Angeles

toca cumplir con su misión y al igual que aquel señor rico tambien lo secuestran y lo obligan a estar implicado en este delito, pero se presentan circunstancias que no esperaban como la aparición de la policía y de que Jaime se opusiera a cooperar. En todo este borolo que se presenta para capturar a los delincuentes la policía le dispara a Jaime por equivocación, El cae encima de unos matorrales, sobrevive y se encuentra de nuevo con su amiga de la calle LA FLACA quien después de haberse sentido en peligro decide entrar en el hogar de los sacerdotes y aconseja a Jaime para que vaya con su familiar la cual lo protegerá mientras regresa el padre. Así termina la historia de Jaime en las calles de una ciudad Ecuatoriana que le enseño a pensar en cosas que nunca pensó que le pasarían por la mente como el de ser padre y nunca abandonar a sus hijos.

Todos estos niños de la historia tenían sueños, esperanzas y pensamientos tan tiernos como creer que el almíbar que tienen los panecillos de azúcar son lágrimas de ángeles cuando lloran. Ellos caen a la calle por circunstancias la mayoria ajenas a ellos como quedar huérfanos, perdidos, abandonados. Los mayores son los responsables de no guiarlos por un camino seguro, al contrario se aprovechan de esa inocencia para conseguir poder.

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