México Y La Lectura

MÉXICO, PAÍS DE ESCASOS LECTORES …

México es un país que no lee. El promedio de la lectura de calidad en nuestro país es bajo.

Tras un sondeo realizado al azar en el marco de la celebración del Día Nacional del Libro, marcado en el calendario el 12 de noviembre, se constató que se prefiere escuchar música o ver televisión en lugar de leer, porque eso no compromete a su concentración. En la opinión del escritor Jaime Muñoz Vargas, para escuchar música -por lo general, baja en calorías- sólo es necesario encender la grabadora y dejarse llevar; el esfuerzo es mínimo. La lectura es más exigente, requiere atención, tenacidad, deseo de encajar a fondo la neurona y por tanto, el fruto que se obtiene es mayor.

El escritor manifiesta que la facilidad de recepción explica por qué es posible escuchar dos, tres o más horas seguidas canciones y no ocupar esas tres horas en las páginas de un libro. En cuanto al tipo de lectura y al tipo de autores que la gente frecuenta, son previsibles las respuestas, cuando por fin decide buscar un libro, una sociedad formada por la televisión, busca y encuentra productos con análogo contenido, es decir, basura esotérica o seudo científica, libros de auto ayuda, biografías de famosos y ficciones de octava categoría.

Hablar en México del número de libros que la gente lee al año es como buscar una aguja en un pajar, habría que preguntar a la gente cuántas páginas de un libro lee al año y estoy seguro que ni así lograremos un número decoroso. Con esto se confirma que por mil razones, en México los libros son objetos completamente desconocidos para la mayoría.

Los libros constituyen un medio privilegiado para conocer los valores, los saberes, el sentido estético y el imaginario de la humanidad. Es una línea de creación, información y educación, en el que cada cultura puede imprimir sus rasgos esenciales y al mismo tiempo, leer la identidad de otras, de la misma forma se le clasifica como la ventana a la diversidad cultural y puente entre civilizaciones.

A través de la lectura se pueden conocer ciudades y países que no han sido visitadas, sin necesidad de moverse de lugar. El libro, más allá del tiempo y del espacio, es a la vez fuente de diálogo, instrumento de intercambio y semilla de desarrollo.

La importancia de la lectura

Una de las primeras necesidades del ser racional fue transmitir a los demás, de su época o de futuras generaciones, emoción y vivencias a través de manifestaciones impresas, textos que con el tiempo se convirtieron en un medio de comunicación muy importante.

Jaime Muñoz Vargas, explica que es muy importante la lectura porque con ella hay un crecimiento, se ingresa a otros mundos, el músculo de la inteligencia se fortalece, al igual que el de la sensibilidad y se amplían las fronteras de la imaginación. Pienso en todo tipo de lectura culta (literatura, ciencia, política,

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