Organizacion De La Escuela Primaria

ORGANIZACIÓN DE LA ESCUELA PRIMARIA

Antonio ballesteros y Usano

Organización de la disciplina y educación moral

La función del ambiente en la organización disciplinaria

La escuela como órgano de educación, tiene como finalidad esencialmente moral. Su aspiración máxima es la perfección del individuo para satisfacer las necesidades puramente materiales, que aspiran a la formación de su personalidad. Para establecer la organización que ha de tener la escuela ha de fijarse esos fines.

La escuela en su sentido tradicional durante todo el siglo XIX ejerce en la práctica escolar, la comunicación de normas y principios impuestos como reglas de conducta, a los alumnos y al maestro. Se consideraba grandes ideas la justicia, la bondad, sinceridad, religiosidad etc.

La organización de la escuela se basaba en la autoridad indiscutible del maestro, que se erigía en un ámbito de la conducta de sus alumnos. El programa tradicional recibe la denominación de “instrucción moral y cívica” la enseñanza tiene una doble finalidad: los niños adquieran un conocimiento teórico de las ideas morales y que mediante de este se despierte en ellos una apatencia por eso se les muestra como bienes, influyendo en su conducta, en las acciones dentro y fuera de la escuela.

La doctrina pedagógico acorde con el fin de educación señala como método propio el inductivo, esto es que los principios morales deberían comunicarse al niño fundándolos en su propia experiencia basándolos en el ejemplo de las grandes

figuras históricas: de los héroes, de los mártires, de los benefactores de la humanidad. Es decir que al hablar del sistema de la coacción como practica escolar y método pedagógico nos referimos a la enseñanza confesional basada en un criterio religioso, que a la que se funda en principios morales laicos de sentido universal, humano, ajenos a toda doctrina confesional.

Cada época y cada estado social crea una moral con carácter propio que se funda en una concepción del mundo. La escuela debe dotar al niño de la capacidad y de los medios culturales que son precisos para captar por su propio esfuerzo, y de acuerdo con sus propias necesidades individuales y sociales, un concepto moral.

La idea de disciplina lleva implícito la sanción, con la educación moral en su concepción tradicionalista, símbolo de la vieja escuela cruel, donde se infligían terribles castigos corporales a los niños indisciplinados, además de los castigos corporales causan un dolor físico, existen múltiples castigos de carácter moral: la privación de la libertad, lastimar el amor propio, herir el instinto de propiedad, la previsión del juego.

Los premios, igualmente al ponerse estimular lo que se considera falsamente como virtudes escolares: la aplicación, la obediencia, el silencio, la quietud, etc. Tienen por finalidad satisfacer los instintos

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