¿Quién te fortalece?

¿Quién te fortalece?

Objetivo:

• Señalar algunas maneras erróneas de obtener fortaleza.
• Motivar e incentivar al joven a que dependa solamente de su Dios, que la fortaleza de su vida esté en los preceptos bíblicos que se presentarán.

Versículo Base: Filipenses 4:13

• Introducción.

El texto que leímos es muy conocido y muy utilizado para motivar y animar a las personas, podemos aventurarlo a que alguien emprenda un proyecto, hacerle sentir seguro que  podrá alcanzar el objetivo de lo planteado; pero muchas veces solo leemos y/o entendemos la primera frase “TODO LO PUEDO” que lo entendemos como “podremos alcanzar TODO lo que nos propongamos”, pero dejamos por un lado o no entendemos a cabalidad la otra frase “EN CRISTO QUE ME FORTALECE”. El problema se presenta cuando viene la prueba, el día malo, y lo emprendido empieza a salir mal, o no como queremos que vaya, viene el desaliento, el deseo que no seguir etc., pero Dios hoy quiere que comprendamos que él está ahí siempre para ayudarnos, para  darnos la  salida, está para FORTALECERNOS que es lo que necesitamos para lograr lo que deseamos.

Antes de seguir, entendamos bien la palabra fortaleza o fortalecer:

• Según el diccionario, fortalecer es 1. La capacidad de una cosa para sostener, soportar o resistir algo. 2. Capacidad moral de una persona para resistir o sobrellevar sufrimientos o penalidades.

En pocas palabras, cuando el texto nos dice “fortalece” se refiere al hecho que es Dios quien nos debe de dar la capacidad de realizar las cosas, ahora bien, podemos mencionar algunas maneras o formas erróneas en  las que nosotros creemos fortalecernos:

1. Creer tener fortaleza fuera de Dios

1. Amigos
2. Familia
3. Pareja
4. Ciencia (Psicología)

1. Creer que somos autosuficientes.

1. Creer en nuestra propias habilidades
2. Creer en las riquezas que tenemos
3. Creer en las poder.

Si identificamos una de estas maneras erróneas en la que creemos obtener fortaleza, debemos dar un vistazo a las formas o maneras que la Biblia nos enseña:

1. El gozo de Jehová fortalece (Nehemías 8:10)

“Luego les dijo: Id, comed grosuras, y bebed vino dulce, y enviad porciones a los que no tienen nada preparado; porque día santo es a nuestro Señor; no os entristezcáis, porque el gozo de Jehová es vuestra fuerza.”

El pasaje narra que el pueblo amado de Dios había sido reunido en la ciudad recién reedificada, fue un gozo grande para Dios el saber que su pueblo nuevamente tendría autonomía y que esta vez Israel si le obedecería, y es por eso que Nehemías y Esdras le decían al pueblo que día de gozo y alegría era, ya que el pueblo estaba compungido al escuchar la ley que estaba siendo leída, y ellos mandaron y dijeron que debía de sentirse fortalecidos porque había gozo en el corazón de Dios; así nosotros debemos de llenar de gozo el corazón de Dios con todo lo que hacemos, vivir conforme su voluntad, andar de manera que le seamos perfume grato siempre , si logramos esto, ese gozo que Dios sentirá en su corazón se convertirá en fortaleza para  nosotros.

1. La sabiduría fortalece (Eclesiastés 7:19)

“La sabiduría fortalece al sabio más que diez poderosos que haya en una ciudad.”

Esto lo comprobamos día con día, el adquirir sabiduría afirma nuestro corazón con la sana doctrina de Dios lo que hace que nos sintamos fortalecidos, pero debemos tener mucho cuidado en no caer en la SOBERBIA, sino ser humildes usando, como dice el apóstol, bien la palabra de verdad. Entendamos bien que la sabiduría nos llena de paz, de esperanza y seguridad, por eso debemos adquirir sabiduría siempre.

1. En la oración Dios nos fortalece (Lucas 22:41-44)

“Y él se apartó de ellos a distancia como de un tiro de piedra; y puesto de rodillas oró, diciendo: Padre, si quieres, pasa de mí esta copa; pero no se haga mi voluntad, sino la tuya. Y se le apareció un ángel del cielo para fortalecerle. Y estando en agonía, oraba más intensamente; y era su sudor como grandes gotas de sangre que caían hasta la tierra.”

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