Reseña El Alquimista

EL ALQUIMISTA

RESEÑA

La obra ‘El alquimista’ del brasilero Paulo Coehlo nos cuenta la historia de Santiago, un joven andaluz dedicado al pasturaje de ovejas, un oficio  en el que se siente feliz  ya que en medio de su labor puede permitirse viajar por lejanos lugares, vivir experiencias y conocer nuevas aventuras. La trama de la historia empieza cuando nuestro querido Santiago tiene un mismo sueño en más de una ocasión. En el sueño se ve a el mismo viajando por territorio africano y llegando a Egipto, país en el que encuentra un tesoro en las pirámides del país. En un principio Santiago duda de la importancia que debe darle al sueño pues nunca ha sido supersticioso. Sin embargo, y ante la reiteración de la imagen en sus descansos se descubre yendo a buscar interpretación a donde una adivina gitana.

La gitana a cambio de una parte del supuesto botín le afirma la existencia del tesoro, que este es para él y que está en este lugar esperando su llegada. Santiago no se siente satisfecho con lo que le han dicho y por el contrario siente que le han timado por lo que decide seguir con su vida cotidiana. El mensaje volveria a tomar importancia para el rey cuando se encuentra a un hombre que dice ser el rey de Salem el cual se le acerca en un pequeño pueblo, y le habla de algo que él llama ‘la Leyenda Personal’. Sobre esto le dice que todos en este mundo tenemos una para la cual debemos vivir y luchar de modo tal que si actuamos persistentemente por ella, el universo entero conspirará a nuestro favor para que de esta manera alcancemos nuestra Leyenda. Ahí retoma su sueño. Siente que su leyenda personal es ir a Egipto y buscar su tesoro, y así debería hacerlo. El mensaje de este hombre y su insistente sueño no podrían ser una casualidad.

El problema es que ellas no se dan cuenta de que están haciendo caminos nuevos cada día. No perciben que los pastos cambian, que las estaciones son diferentes, porque sólo están preocupadas por el agua y la comida. Quizás suceda lo mismo con todos nosotros.

Santiago decide ser osado y emprender su Leyenda. Para empezar vende sus ovejas y pasa el estrecho que separa su natal España de Marruecos. Allí encuentra a un hombre que dice poder ayudarlo, le confía sus pertenencias para obtener ganancias de esto pero en vez de ello, le roba todo cuanto llevaba, dejándolo sin dinero y solo en un lugar que no conoce. Para poder regresar a España y seguir con su oficio de pastor busca una solución que encuentra como comerciante: empieza a trabajar en una pequeña tienda de jarros de cristal. Al cabo de doce meses dedicándose a esto no solo recupera su dinero sino que le representa unas sustanciosas ganancias el haber aprendido un oficio diferente como era el de los cristales y hablar con facilidad la lengua del país. Aun no se decidía regresar a  España cuando recuerda por qué esta allí, rememora su sueño y su objetivo, su Leyenda Personal. Santiago de esta manera se embarca en una caravana que atraviesa el desierto rumbo a las pirámides de Egipto donde se halla su tesoro.

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