Sociologia
Enviado por 123212226 • 28 de Mayo de 2014 • 2.712 Palabras (11 Páginas) • 175 Visitas
• MODELO DE ESTADO
El terrorismo de Estado en Argentina en las décadas de 1970 y 1980 fue un período de terrorismo de Estado llevado a cabo durante la última dictadura cívico-militar autodenominada "Proceso de Reorganización Nacional", que gobernó la Argentina entre comienzos desde 1976 hasta la restauración de la democracia en 1983. Durante este tiempo la dictadura realizó un régimen de represión ilegal, violencia indiscriminada, persecuciones, tortura sistematizada, desaparición forzada de personas, manipulación de la información y demás formas de terrorismo de Estado. Se estima que durante ese período las fuerzas represoras del gobierno de facto hicieron desaparecer 30.000 personas.El uso sistemático de la violencia y su extensión contra objetivos civiles en el marco de la toma del poder político y burocrático por las Fuerzas Armadas, determinó la inmediata suspensión de los derechos y garantías constitucionales y propició la aplicación de tácticas y procedimientos bélicos irregulares a toda la población. ECONOMIA El esquema de política económica del Gobierno militar a través de su Ministro de Economía –Dr. A. Martínez de Hoz- estaba centrado fundamentalmente en bajar la tasa de inflación. Obviamente que para luchar con ella era necesario previamente, definir las causas que la motivaron; en ese sentido, se tenía la seguridad de que la inflación tenía su causa fundamental, por el déficit del Sector Público.se señaló como objetivo general el pasar de una economía de especulación a una de producción Ahora bien, no debe olvidarse que siempre impera como objetivo fundamental el reducir la tasa de inflación y para lograr dicho objetivo los esquemas de política económica fueron oscilando a través del tiempo en forma pendular, pudiéndose decir que existieron cuatro distintos programas bajo un mismo ministro de economía. O sea, a pesar de que se señalaba el carácter estable de los objetivos de la política económica por parte de la autoridad económica, se observa a lo largo de la aplicación concreta un desenvolvimiento pendular que ha gravitado adversamente sobre su eficacia operativa.de marzo de 1976 a marzo de 1977.Esta circunstancia lleva a inaugurar, en marzo de 1977, la famosa tregua de precios de 120 días, en donde de la liberación de los precios se pasó al congelamiento. Luego de pasados los cuatro meses previstos, vuelve a experimentarse una fuerte alza de los precios de los bienes y servicio.Esta circunstancia lleva a inaugurar, en marzo de 1977, la famosa tregua de precios de 120 días, en donde de la liberación de los precios se pasó al congelamiento. Luego de pasados los cuatro meses previstos, vuelve a experimentarse una fuerte alza de los precios de los bienes y servicios. En el año 1978 el Producto cayó cerca del 4%. Los insuficientes resultados obtenidos, condujeron nuevamente al equipo económico, en diciembre de 1978, a utilizar instrumentos adicionales o diferentes; el nuevo plan antiinflacionario que se inició en 1979 tenía como objetivo principal alcanzar un acercamiento o convergencia de la tasa de crecimiento de los precios internos al ritmo de devaluación anunciada en esa oportunidad. Tres instrumentos se destacan en este nuevo plan por su importancia: la tasa de interés, la fijación de pautas cambiarias, la política arancelaria. Esta vez se buscó estimular la inversión productiva mediante una reducción significativa de la tasa de interés real. Esto produjo una disminución en la retribución al ahorrista al reducirse las tasas pasivas de modo que se tornaron levemente negativas El otro instrumento elegido, esto es la fijación de pautas cambiarias –consistente en pautas graduales descendentes del tipo de cambio y de las tarifas públicas-, se complementó con una política monetaria que tendía a controlar la oferta monetaria a partir del establecimiento de trabas al ingreso de capitales del exterior. Esto, más el tercer instrumento comentado, tenía, asimismo, la finalidad de inducir una activa competencia en el mercado interno; o sea, reduciendo la protección arancelaria a la producción industrial nacional, se podría eliminar las condiciones oligopólicas internas que habían provocado un alto grado de ineficiencia y una política de precios con un pronunciado sesgo inflacionario en el pasado. Estas medidas condicionaron la conformación futura del sistema económico argentino y su inserción en el orden económico internacional de los años siguientes De enero a agosto se verifica un período de fuerte reactivación económica que alcanza su pico en el tercer trimestre de 1979. En el total del año el PIB creció un 8,5%. Se pretendió una política monetaria activa a partir de dos mecanismos importantes de expansión: el incentivo de la entrada de dólares del exterior y la baja del efectivo mínimo.en septiembre de 1979 las tasas de interés pasaron de ser reales negativas (2%) a reales positivas (4%) sobre todo en el último trimestre del año. En cuanto al balance comercial, pasó a ser negativo y junto con este déficit comenzó a jugar la salida de dólares por turismo en forma muy importante. De 400 millones de dólares mensuales que ingresaron hasta septiembre de 1979, pasó a 700 millones en concepto de préstamos financieros del exterior. En consecuencia, mientras en los primeros meses de ese año el endeudamiento con el exterior implicaba aumentar las reservas internacionales, en el período siguiente el país debe endeudarse no sólo para aumentar las reservas sino para cubrir el déficit operativo en la balanza comercial y en la parte de turismo.
Las medidas de política económica que incidieron Lo más importante de esto es que el crecimiento de los precios internos fue mucho mayor que el ritmo de devaluación de la moneda, por tanto se produce un desfasaje cambiario con serias repercusiones en los sectores productivos del país. en forma determinante en el sector industrial argentino en ese momento, fueron dos: la rebaja arancelaria y la fijación de tipos de cambio. Aunque debe tenerse en cuenta que también y siempre según lo manifestado por ese equipo económico, la adopción de las diversas medidas de política económica se centraba en un objetivo fundamental que era la lucha contra la inflación.Así como Martínez de Hoz, a fines del año 1979, ubicó la apertura de la economía como uno de los elementos claves en todo este proceso, ya que dicha apertura operaría como un factor de “techo” para los precios internos. O sea, aparece una política aperturista como instrumento de un plan estabilizador.Pero además de ello, debía comprobarse –para los fines perseguidos por el gobierno de facto- si era posible la apertura de la economía sobre la base de un tratamiento similar (cambiario, crediticio, impositivo) para el agro y la industria, cuyos niveles de productividad eran diferentes. . Hasta qué punto era posible
...