Técnica De Lectura

FUNCIÓN DEL MATERIAL DIDÁCTICO EN LA ENSEÑANZA DE LA LECTURA EN PRIMER AÑO DE EDUCACIÓN BÁSICA

Los materiales de enseñanza pueden ser muy útiles para despertar el interés y reforzar las habilidades necesarias para la lectura.

Estos materiales son: cosas comunes, como libros, conjuntos de lenguaje, tarjetas con palabras, carteles de experiencias, muñecos, pinturas, pizarras individuales, miniaturas de plastilina; y menos comunes, como mapas transparentes, panfletos y buzones para sugerencias. La variedad de materiales de enseñanza para familiarizar a los niños con la lectura es interminable; solo tiene la limitación de la imaginación del profesor. Los materiales didácticos no sólo enseñan una habilidad, sino que hacen esta enseñanza interesante y viva. Cuando se usan mal, pueden resultar pesados y alejar al niño del aprendizaje de la lectura en vez de disfrutar con él. Una lección sobre la percepción visual (casar palabras) puede resultar una actividad interesante cuando el niño se pone la gorra de cartero y reparte las cartas de sus compañeros en los buzones respectivos. Aprende así a leer, pero aprende con una sonrisa. Un profesor creativo puede proporcionarle esta experiencia con poco esfuerzo y con gran éxito. Muchas oportunidades para leer podrían ser proporcionadas a los niños de PRIMER AÑO DE EGB SI SE USARAN LOS MATERIALES DE ENSEÑANZA APROPIADOS.

PRINCIPALES FUNCIONES DEL MATERIAL DIDÁCTICO PARA ENSEÑAR A LEER

El material didáctico se usa para enseñar una habilidad de una manera efectiva.

Son construidos y usados para un objetivo determinado, como por ejemplo enseñar a buscar palabras iguales, siguiendo un orden, o predecir resultados. Los materiales de enseñanza no deben ser usados simplemente para tener a los niños ocupados. Antes de preparar un juego u otros materiales el maestro debe tener un objetivo específico. El material se prepara entonces para conseguir ese objetivo. Como el profesor tiene cada año distintos alumnos en el PRIMER AÑO DE EGB, los objetivos de la enseñanza y, en consecuencia cambian. Cada año se construyen nuevos materiales didácticos de acuerdo con los intereses y necesidades de los alumnos y también a medida que el maestro va aprendiendo más acerca de cómo ayudar a que los niños aprendan a leer. Algunos materiales antiguos pueden ser importantes, mientras que en otros se usan cada vez menos. Algunos se dejan en casa a lo mejor un año más. El material se utiliza en los distintos cursos de EGB variará según las habilidades de los niños y las escuelas.

Una vez que los materiales se han usado, deben ser reevaluados.

¿Podrá el niño trabajar con ellos y conseguir los objetivos propuestos?

¿Entretienen de tal modo al alumno que no aprende?

Preguntarse estas cuestiones sobre los materiales de enseñanza es importante. Muchos libros comerciales y revistas ofrecen sugerencias para que el maestro pruebe los juegos y actividades. Este debe usar los que le ofrezcan mayor garantía y sean más prometedores, pero también debe estar dispuesto a descartar los que no sirvan o sean dudosos.

Tiene que preguntarse: ¿esta actividad, ayuda al niño a adquirir la habilidad? Los materiales preparados comercialmente requieren una evaluación semejante.

Durkin está cautelosamente de acuerdo con Choll al decir que los materiales para la enseñanza de la lectura son más bien un resultado convencional que un resultado de los datos proporcionados por la investigación, y lo que las editoriales proclaman y aseguran es más bien intuición sin verificación empírica. Los maestros deben ver con escepticismo lo que las editoriales ofrecen como propaganda.

EL MATERIAL DEBERÍA PROPORCIONAR UN DESARROLLO ORDENADO Y SISTEMÁTICO DE LAS HABILIDADES

Con este fin deberían ofrecerse muchos materiales de diferentes niveles de dificultad. Aquí ofrecemos dos instrumentos de enseñanza para desarrollar un orden y buscar igualdades de formas, objetos, formas, etc.

1. Las alfombras pequeñas. El objetivo es que el niño distinga semejanzas y diferencias en color, tejido, modelo de diseño y desarrolle sus sentidos táctil y visual. El niño empareja cuadrados de tejido con otros cuadrados que están colocados en el panel de las muestras.

2. Cajas de letras. El objetivo es que el niño reconozca semejanzas y diferencias, observe las formas de las letras, las empareje y haga comparaciones. El niño coloca las tarjetas con letras en el compartimiento que tiene la misma letra que la tarjeta.

Ambas habilidades requieren percepción, pero la actividad de la caja de letras requiere un nivel más elevado de habilidad.

Para enseñar la habilidad, algunos materiales de la clase serán muy sencillos y otros deberán presentar un grado mayor de dificultad, de modo que solo uno o dos niños de la clase puedan realizar. En cualquier clase de PRIMERO DE EGB l el profesor tiene una gama amplia de diferencias individuales a las que debe acomodarse. Habrá algunos niños que ya lean y otros que no puedan ni reconocer las letras del alfabeto. Algunos niños mantendrán la atención solo unos segundos mientras otros podrán estar atentos a una tarea durante un periodo más largo. El maestro tiene que decidir si le debe permitir al niño seleccionar la actividad y seguir su propio orden o reservar el nivel más alto hasta que el nivel más fácil haya sido totalmente adquirido.

EL MATERIAL DE ENSEÑANZA DEBE REFORZAR LAS HABILIDADES YA ENSEÑADAS.

Se necesita una gran variedad de materiales para este fin. Libros, rompecabezas, objetos, muñecos, pinturas y crayones son necesarios para practicar continuamente con la clase entera, con grupos o con actividades individuales. Deben ser atractivos en el contenido, el tipo, la duración, el interés y el punto de vista, de modo que los niños tengan diferentes clases de experiencias de aprendizaje con la misma habilidad. Algunos niños necesitaran solamente unos cuantos ejercicios para adquirirla y otros pueden necesitar hasta cuarenta.

La variedad de materiales para cada nivel de habilidad contribuirá a proveer los ejercicios extra necesarios para mantener el interés del niño.

ALGUNOS MATERIALES DEBEN FUNCIONAR COMO ACTIVIDADES INDEPENDIENTES.

Una vez que el maestro explica y demuestra cómo funciona un juego dado o una actividad, el niño debe estar listo para usarla sin necesidad de la atención constante de su profesor. El material didáctico debe contribuir a la libertad del maestro para dedicar atención especial a los niños que lo necesitan. Por lo tanto, como norma, las instrucciones a seguir con estos materiales deben ser sencillas. Idealmente deberían ser auto correctivos, de modo que el niño pueda tener inmediatamente el feedback que necesite y que el maestro pueda

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